lunes, 20 de junio de 2011

Clonación

Brenda Caballero
Números Rojos

Era la primera tarjeta de crédito de mi hermana. Acababa de llegar a su domicilio. Sobre cerrado, sellado, plástico inactivo. Creo estaba contenta, pues ya podía endeudarse solo con el poder de su firma. ¡Qué emoción! No lo cree.
Bueno, a ciencia cierta, casi todos pasamos por allí. Es como cumplir 18 años y querer tener la credencial del IFE, aunque ya para los 19, ni caso le hacemos. Mientras que a la tarjeta de crédito cuando la endeudamos, ya cancelarla queremos.
Pero le sigo contando, mi hermana abrió el sobre y al llamar al teléfono del banco para activarla y preguntar su límite de crédito, le dijeron que era de 5 mil pesos, pero que sólo contaba con 150 pesos disponibles de crédito, pues había hecho dos compras, una de ellas por el monto de 4 mil quinientos pesos… ¡se la habían clonado!
Pero… ¿puede ser posible la clonación, cuando he de suponer que viene del banco en sobre plástico sellado? ¿Tendrán al enemigo en casa?...
La clonación de tarjetas de crédito o débito, también llamada “skimming” es la duplicidad ilegal de los datos del plástico, sin el consentimiento del titular, y puede hacerse en menos de 3 minutos a través de medios electromagnéticos, los cuales son aplicados cuando Usted paga una compra o servicio con su Tarjeta de crédito o hace algún retiro de algún cajero electrónico previamente manipulado con un pequeño dispositivo llamado skimming, que es colocado en los cajeros en el área donde se inserta la tarjeta plástica para guardar la información de la cinta magnética; posteriormente, el delincuente lleva el skimming a su casa donde lo conecta a una computadora y le proporciona todos los datos de su identidad, pudiendo transmitir esa información mediante un codificador a tarjetas con cinta magnética en blanco que se compran hasta por internet.
En el caso del pago con tarjeta, la clonación puede hacerla el mismo empleado que le hace el pago en la terminal pasando previamente el plástico por un skimming de bolsillo, repitiendo los pasos anteriores o transmitiendo en ese mismo instante sus datos a alguna banda de delincuentes que opere en diferentes puntos del país e incluso de Sudamérica, los cuales en ese mismo momento que usted paga, ellos hacen compras o pagos sin que se “dé cuenta”, ¡claro! hasta que le llegue su estado “de cuenta”.
Apenas, esta quincena, algunos trabajadores del las dependencias del IMSS, CFE y Pemex, de los municipios de Xalapa, Coatepec, Ciudad Mendoza, Nogales y Orizaba, fueron afectados, así como del ayuntamiento de Río Blanco en donde trabajadores reportaron el saqueo de sus cuentas de nómina por la clonación a sus tarjetas.
No dudo que el banco Banamex se haga responsable, lo malo es que a veces pasa hasta un mes en lo que se hacen las investigaciones para que les reintegren su dinero ¿y con qué $$$$ van a vivir en ese tiempo? ¿y el control de las autoridades? ¿y la seguridad?
Pues desgraciadamente lo constaté en varios anuncios de internet como éste “Vendo tarjetas clonadas, empieza tu negocio hoy mismo en Xalapa, Veracruz, México” con el siguiente contenido: “vendo tarjetas clonadas sin estafa, mucha gente me ha comentado que ha sido estafada por gente que se hace pasar por ‘clonadores’ , yo realmente sí me dedico a la clonación de tarjetas de crédito por eso pongo mis anuncios y les doy lo que me encarguen; bueno, cuento con tarjetas muy buenas… éstas son las fechas donde tú puedes exprimir el saldo y con muy buen saldo vienen; bueno, contáctame… te dejo mi correo aquí para que me agregues al msn o me mandes un correo; yo inmediatamente te lo contesto; me pongo a sus servicios. credencialife@hotmail.com”.
Sinceramente no me puedo imaginar la estafa a esta gente que estafa; en fin, un caso más que tendrán que resolver nuestras autoridades, y no nada más pedirle a sus empleados que chequen los principales portales de noticias para ver lo bonito que hablan de ellos y los dizque avances que han tenido.
Al pagar no olvide hacerlo usted mismo, y si lo hace por medio de un intermediario (mesero, empleado) no le quite el ojo de encima hasta que le regrese su tarjeta.
Trate de verificar sus saldos en sus cuentas, vía telefónica o internet y si va a retirar de algún cajero electrónico, observe que no tenga algún objeto sobrepuesto donde inserte su tarjeta; al digitar su pin, trate de cubrir con la otra mano el teclado por si hay alguna cámara espía.
Así que si Usted como yo siempre paga con tarjeta de crédito, ojo, mucho ojo, pues en esta época vacacional que se acerca, este tipo de delito se incrementa hasta en un 30 por ciento.
Mientras tanto, espero que al celebrar este día del padre, la delincuencia no le haya dado en su madre.

brendacaballero1@hotmail.com

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