Contrasentido

Arturo Reyes González
Burladero

En algunas ocasiones, en varias, he tenido el sentimiento, la idea, la leve sospecha de que en nuestro país algunos temas tal parece que llevan un sentido contrario al de la tendencia global respecto de un tópico especifico y en otras ocasiones simplemente vamos muy atrasados respecto de. ¿Cómo es esto posible esto en plena época de la información? Desconozco en lo absoluto la respuesta.
Por ejemplo, me sucede cuando vía web leo notas en medios de comunicación de distintas partes del mundo sobre el desarrollo de vehículos ecológicos, eléctricos, que no contaminan en lo absoluto, que se recargan y tienen batería para avanzar un impresionante número de kilómetros, como alternativa al uso de las gasolinas.
Casas que aprovechan la energía solar para realizar prácticamente todo tipo de actividades, como abrir y cerrar persianas y ventanas, las que están orientadas a aprovechar la entrada de luz natural, regular la temperatura interna de cada área, por supuesto dar corriente para el clima y los aparatos eléctricos del hogar sin faltar su uso para calentar el agua e iluminar focos.
El desarrollo de las alternativas se encuentra en una etapa ya de auge lo mismo en España que en Estados Unidos, Holanda o algunas zonas de Marruecos, sólo por citar algunas. Insisto, alternativas viables pero sobre todo reales para el uso de los derivados del petróleo.
Mientras tanto, nuestro Presidente Felipe Calderón declaró el pasado 15 de junio en su última visita a Veracruz, desde la plataforma de exploración “Centenario”, que el petróleo es clave para el progreso del país y pilar de la soberanía y que por ello la modernización de Pemex avanza en un esfuerzo conjunto de gobiernos, diputados y trabajadores.
Calderón agregó que se está garantizando el futuro de la industria petrolera y de México, poniendo como ejemplo dicha plataforma que explora en aguas profundas y también el buque tanque “Centenario”, el primero que se compra después de 20 años.
El secretario de energía, de la cuadra de amigos del presidente desde el ITAM, José Antonio Meade, destacó que con esto el presidente garantiza la seguridad energética del país y no podía faltar la frase: siempre cuidando el medio ambiente.
¿No pareciera que contrario a una tendencia mundial a no depender tanto del petróleo y sus derivados, con esto estamos destinados, al menos en los próximos años, a mediano plazo, a continuar siendo sus rehenes?
¿De veras es lo mejor para nuestro país el apostar a seguir apuntalando la economía nacional en el petróleo cuando las naciones más desarrolladas del mundo buscan afanosamente no depender de él y de países productores como el nuestro?
Viene otro ejemplo. El día de ayer leía en la agencia AVC Noticias, que comanda el buen amigo Toño Villagrán, que el jefe del Centro de Información de la Central Nucleoeléctrica de Laguna Verde, Marcelino Jácome López, calificó como viable la construcción de una nueva planta nuclear en el país, porque considera que el manejo de esta energía es segura y ecológicamente sustentable.
¡Ah caray! ¿Qué acaso no en Europa y en Asia después la tragedia que ocurrió por el temblor-tsunami que afectó la planta nuclear de Fukushima, con sus respectivas conocidas consecuencias: muertos, enfermos, afectados, fugas radioactivas, alimentos, animales y agua contaminada con severas cantidades de radiación, se sometieron a severas y estrictas revisiones las plantas nucleares de toda esa zona del globo terraqueo, llegando incluso al punto de iniciar el proceso de cierre de las mismas en los próximos años?
Eh aquí la respuesta de parte de don Marcelino: “En Alemania fue una decisión del gobierno decir que no se van a construir plantas nucleares y en Italia fue algo que se sometió a la opinión pública, pero si hacemos consenso existe todavía mucha gente que está en contra de esto y es necesario que sean los especialistas los que asesoren”.
A mi definitivamente me sonó cantinflesco. O sea, sí pero no, o como quien dice, allá ellos por tontos y no saber aprovechar lo que nosotros acá sí hacemos aún por encima de todo aquel que tontamente se oponga porque no saben de esto (la energía nuclear).
O sea que en Alemania el gobierno prefirió iniciar el proceso de cierre de sus plantas pese a que se trata de un excelente recurso –según Marcelino–, seguro y ecológicamente sustentable, y en Italia la gente dijo mejor no y acto seguido el gobierno también decidió no seguir usándolas. Qué buenos gobiernos que, como la gente dijo no, pues que dejan de usar la energía nuclear. Qué buenos y que tontos entonces.
Don Marce aseveró que no existe evidencia científica para señalar que una planta nuclear ha generado daño al medio ambiente o a la salud humana desde el incidente ocurrido en Chernobyl, pues contrario a lo que se piensa, se cuenta con un estricto control de operación para garantizar la seguridad de los trabajadores y de los habitantes.
¿Cómo ve eso? ¿Usted le cree a don Marce? ¡Yo tampoco! A mi me dejó con el ojo cuadrado. ¿Por qué miles, cientos de miles de mexicanos y otros tantos habitantes de distintas regiones del planeta nos empeñaremos en creer lo contrario?
Finalmente, en ese sentido, refirió que pruebas realizadas desde hace diez años en la zona de Laguna Verde por personal del Laboratorio Estatal de Salud Pública demuestran que los niveles de radiactividad son nulos.
Inche bola de zonzos esos europeos y asiáticos, por qué no podrán aprender de nosotros
Por cierto, saludos al movimiento de Madres Veracruzanas contra Laguna Verde, a quienes les reconozco su incansable y loable esfuerzo preocupadas por todo lo que compartimos con ellas
argo_reyes@hotmail.com