¡Cuidado con lo que come!

Brenda Caballero
Números Rojos

¡Gran final de futbol este sábado! México & Estados Unidos, el lugar: Pasadena, California.
La disputa: el trofeo de la Copa Oro que además contiene un boleto para la Copa Confederaciones del 2013. Los comentaristas dicen que era la final que todos esperaban, que los sueños húmedos de mexicanos y estadounidenses están cumplidos, mejor aún, ¡los intereses económicos del torneo más prestigioso de Concacaf! ya que todas las localidades han sido vendidas.
En fin, que ni quería ir, prefiero verlo desde la tele de mi casa.
Pero más allá del futbol, la exhibición deportiva se convirtió en exhibición alimenticia de nuestro país, pues hasta los jugadores que representaban a México presentaban en sus organismos restos de sustancias tóxicas. La historia Usted la sabe.
Pues tenemos días escuchando la palabra “clembuterol”, sustancia que se ha inmortalizado al dar positivo en los seleccionados mexicanos Guillermo Ochoa (América), Francisco Rodríguez (PSV Eindhoven), Christian Bermúdez (Atlante), Antonio Naelson y Edgar Dueñas (Toluca).
Aunque las recientes declaraciones de Joseph Blatter han dejado más dudas que aclaraciones, pues menciona de que fueron más de cinco los contaminados por Clembuterol (hablan de 7 más). ¿Será que toda la selección salió positiva en el antidoping? Según las reglas de la Concacaf, tendrían que ser descalificados… es más... razón tiene el director técnico de la selección de Honduras, en su malestar por permitir la sustitución de jugadores positivos en dopaje, eso no esta permitido.
Luego entonces sin la selección Mexicana, no habría aficionados mexicanos, ni estadios llenos, ni ganancias, ¡el negocio, habría fracasado este año!
Pero… ¿Cómo adquirieron el clembuterol? La mayoría coincide en que fue mediante la ingesta por carne contaminada, pues en nuestro país cuando los ganaderos quieren vender a un precio mayor su ganado, utilizan el clembuterol para aumentar la masa muscular en el ganado y disminuir la grasa. ¿No se supone que en México por Legislación está prohibido desde 1999?
Una amiga me decía: “Mejor voy a comprar carne con grasa y yo se la quito, así me sentiré más tranquila”. Pero… ¿debemos sentirnos más tranquilos? Y conste que no hablo de inseguridad, que cada día esta peor. No, en esta ocasión hablo de lo que comemos y que desconocemos.
Porque estoy segura que si nos hicieran un antidoping a todos los mexicanos más de la mitad saldría positivo.
Y es que al analizar los alimentos, los investigadores han detectado el uso de sustancias químicas en la producción de frutas, verduras y carnes, con el propósito de que parezcan de “óptima calidad”.
Por ejemplo, se han presentado algunas intoxicaciones en seres humanos y animales por el consumo de frutas y verduras que contienen sustancias como: DDT, clorano, dieldrin, dioxinas, furanos, PCB, endrín, aldrín, heptacloro, mírex, HCB y toxadeno. Estas sustancias, a pesar de estar prohibidas desde la Convención de Estocolmo realizada en el año 2001, siguen siendo utilizadas en algunos países por los agricultores como pesticidas.
En las carnes principalmente de res, cerdo y pollo, los productores administran sustancias como el famoso clembuterol, el dietilstilbestrol, cimaterol, fenoterol, ritodrine, ractopamine, terbutaline, y salbutanol, entre otros elaborados a base en hormonas, los cuales son administrados a los animales desde pequeños hasta su sacrificio, con el fin de que crezcan “gorditos y bonitos”. O peor aún, se la inyectan a la carne próxima a vender, para que de la apariencia de “calidad y frescura”.
Los enlatados y embolsados no se quedan atrás pues contienen una gran cantidad de sustancias químicas que sirven de conservadores, antioxidantes, colorantes, estabilizantes, emulgentes, espesantes, gelificantes, humectantes, reguladores del ph, gasificantes, , saborizantes, edulcorantes, etcétera.
Ahh!!! Pero si Usted pensaba que al comer pescados y mariscos estaría a salvo, déjeme darle la mala noticia que también se les ha detectado sustancias tóxicas, principalmente por los desagües de las ciudades o la contaminación de desechos industriales en ríos, mares y lagunas.
Algunos especialistas comentan que estas sustancias no representan un riesgo para la salud si se consumen en pequeñas cantidades, pero en grandes porciones pueden provocar cáncer, malformaciones congénitas, alergias e incluso la muerte.
Así es que estamos desamparados pues a pesar de que la Sagarpa y la Secretaría de Salud supervisan los establecimientos donde venden los productos que consumimos, no sabemos las cantidades de sustancias tóxicas que contienen.
Sólo nos queda seguir algunas recomendaciones como:
 Al comprar frutas y verduras ver que estén frescas y brillantes con su olor característico.
 Observar que la carne presente su olor y color natural, y sus tejidos sean firmes.
 El pescado que vayamos a comprar debe tener agallas rojas y los ojos salientes y brillantes.
 Las leguminosas, cereales y pastas no deben tener insectos.
 Si compramos enlatados no olvidar verificar la fecha de caducidad e inspeccionar físicamente en su envase abolladuras, abombamientos u oxidaciones.
 Si compramos alimentos empacados en papel plástico o celofán observar que estén bien sellados.
En fin, sólo espero que la selección Mexicana gane pues después de su paso perfecto (cinco victorias -una en tiempo extra- cero empates y cero derrotas en el torneo, con 18 goles a favor y uno en contra, es el favorito contra un Estados Unidos con cuatro victorias, una derrota y con siete goles a favor y dos en contra.
Este sábado prepararé mi botana, para ver la final en Pasadena desde mi televisor, evitando un antidoping, pues después de comer salchichas, sabritas, chicharrones, queso y refrescos ¡no se cuán contaminado resulte mi organismo después del partido!

brendacaballero1@hotmail.com