Cañeros, bloqueos e intereses

Luis Alberto Romero
Hora Cero

En el ámbito nacional, el movimiento cañero se convierte en un verdadero problema porque los productores exigen un millonario subsidio que el gobierno federal no está en condiciones de cubrir. Mucho menos los gobiernos estatales.
Piden un apoyo extraordinario, sobreprecio le llaman ellos, de 250 pesos por tonelada de caña entregada a los ingenios azucareros y alcoholeros del país.
El apoyo que exigen es para los 286 mil productores de caña, por lo que el monto de su petición asciende a más de 7 mil millones de pesos.
El problema de los cañeros radica básicamente en el desplome de los precios, derivado de la sobreproducción: durante la zafra 2012-2013 se cosecharon 7 millones de toneladas de caña de azúcar, casi el doble de la demanda nacional, que es de 4 millones de toneladas.
Ante el aumento en la producción, los precios bajaron de manera drástica, es la ley de la oferta y la demanda, lo que causó millonarias pérdidas a los productores.
Lo malo, por cierto, es que a los agricultores les pagaron un menor precio por la caña entregada a los ingenios azucareros, pero eso no repercutió en el precio final en que se vende el azúcar a los consumidores.
El problema alcanza a 15 entidades del país, donde los productores se organizaron para exigir el apoyo extraordinario de 250 pesos por tonelada de caña.
Las protestas de los cañeros han derivado en bloqueos carreteros y cierre de vialidades en el Distrito Federal, desquiciando esa capital aún más.
En Veracruz, los cañeros también han bloqueado carreteras, tomado casetas de peaje, donde incluso cobran cuotas a los automovilistas, y llegaron al extremo de parar el tránsito vehicular y los accesos a varios municipios de la zona centro.
Lunes y martes, por ejemplo, taparon la carretera federal y también la autopista Veracruz-México; previamente habían tomado las casetas de Cuitláhuac y Fortín de las Flores, a pesar de la reunión que sostuvo dicho sector con las autoridades del gobierno federal el pasado lunes, cuando se anunció un programa emergente de apoyo a los productores de caña de azúcar.
Así, al continuar con sus protestas a pesar del anuncio del gobierno federal, los productores han dejado claro que el tema de los apoyos no es el único punto en su agenda ni en sus intereses.
Hay quien comenta que la toma de casetas es un millonario negocio y en ese sentido hay señalamientos contra dos figuras de la actividad política veracruzana, el ex senador perredista Arturo Hérviz Reyes y el actual diputado federal panista Víctor Serralde Martínez.
El fondo del asunto tiene que ver con los intereses de esos dos personajes, que buscarían debilitar a la CNC y a la CNPR, las dos organizaciones que predominan en el sector cañero, para fortalecer a una nueva agrupación, la Coordinadora Nacional de Organizaciones de Cañeros Independientes.
En ese contexto se enmarca a la nueva dupla Hérviz-Serralde, quienes estarían atrás del movimiento cañero, patrocinando los bloqueos y financiando, en el caso del diputado presidente de la comisión de desarrollo social, las protestas de los cañeros de los ingenios Central Motzorongo, Constancia, La Margarita, San Nicolás, Refugio, San José de Abajo, Potrero y Providencia, con la intención de consolidar a su nueva organización.
Es una lucha por el poder político y económico que representa un negocio millonario y para eso están usando a los productores de caña.