Javier Duarte de Ochoa *
La recesión económica es ya una realidad declarada y los gobiernos de todos los Estados deberán implementar políticas que logren apaciguar los efectos negativos que puede generar esta crisis tan profunda.
La crisis económica, además, se presenta en un escenario en el que la crisis alimentaría ya venía mermando la dinámica económica mundial, y los bajos precios del petróleo no están ayudando al desarrollo de las economías latinoamericanas.
Ante este escenario, la administración encabezada por Fidel Herrera Beltrán no fue tomada por sorpresa.
El desarrollo de Veracruz no se ha visto obstaculizado por la situación internacional que enfrenta y los datos lo demuestran.
Por un lado, hemos emprendido una estrategia proactiva frente al ingreso y uno de austeridad frente al egreso.
Mientras que por el otro lado estamos siguiendo una clara estrategia de impulso a las cadenas productiva y a la infraestructura, en un franco apoyo a la estrategia propuesta por el gobierno federal.
Es decir, estamos dando cauce a una verdadera política de estado en la que estamos velando por contar con una gestión económica que siga las bases de la política nacional y que garantice los niveles aceptables de actividad económica para que las variables de empleo, precios y consumo se mantengan estables.
Veracruz es uno de los estados Mexicanos con mayor contribución al Producto Interno Bruto (PIB) para los tres rubros más importantes de actividad económica (sector agropecuario, minero-metalúrgico y servicios financieros).
Estos sectores son altamente sensibles ante el escenario de recesión en Estados Unidos.
Dentro de los escenarios de recesión, hemos delineado un conjunto de estrategias que son vitales para hacer más efectiva la intervención estatal ante los posibles deterioros económicos propiciados por la actual situación de la economía internacional.
En lo que se refiere a la estrategia que hemos emprendido en cuanto al equilibrio entre el ingreso y el egreso, este año no sólo logramos una recaudación superior a la programada dentro del Plan Veracruzano de Desarrollo 2005-2010, sino que hemos equilibrado también el gasto.
Estamos sustentando el crecimiento del estado apostando por el incremento en la recaudación y no en la deuda pública.
Estamos apostando por un lado por la eficiencia y la equidad en la recaudación, mientras que por otro, promovemos una actitud proactiva para incrementar el acceso a recursos federales en menores periodos de tiempos.
Esta lógica nos ha permitido una actuación clara y efectiva cuyo resultado han sido ingresos superiores en 8.2% al periodo anterior y 6.2% a lo presupuestado.
Adicionalmente, hemos promovido la innovación en la captación de recursos.
Innovación que ha sido bien recibida dentro del estado e incluso reconocida a nivel internacional.
La implementación del mecanismo de bursatilización de la tenencia vehicular ha sido uno que no sólo ha procurado un importante monto de recursos adicionales para los municipios que decidieron participar, sino que ha permitido dirigir de manera quirúrgica dichos recursos hacia las áreas de atención prioritaria de esta administración: la seguridad y la infraestructura productiva.
Como instrumento financiero de apoyo a la modernización e innovación en la búsqueda por recursos para impulsar el desarrollo del estado, éste esquema se ha instalado por primera vez como política de estado en nuestro país.
Un esquema que es sólo posible en el contexto de finanzas sanas, de trabajo y planeación intenso y coordinado entre las diversas dependencias de gobierno y sobre todo, con miras a mejorar el nivel de vida de la población.
En lo referente al impulso a las cadenas productivas, la estrategia se dibuja en las líneas que especialistas como Joseph Stiglitz y Paul Krugman han respaldado: es momento de estimular fiscalmente a la producción, es momento de ampliar el gasto público en materia de infraestructura –que es uno de los sectores con mayor impacto en la economía- a fin de agilizar el gasto presupuestal.
Es por ello que en este año que cierra ejercimos el presupuesto casi en su totalidad.
El gasto ha tenido y seguirá teniendo para el próximo año como prioridad el desarrollo social.
Se han destinado recursos cada vez mayores a la educación, a la seguridad, a promover la equidad social y de género, a los programas de combate a la pobreza y al medio ambiente, tanto como al desarrollo de infraestructura productiva y de comunicaciones para el estado y para el campo veracruzano.
Es decir, estamos frente a un esquema de gasto que no sólo se ha dirigido a los sectores con mayores carencias, sino a los que resultan estratégicos para impulsar el crecimiento y el desarrollo en el estado.
Un desarrollo que sea integral, sustentable y sobre todo, que provenga desde la propia sociedad.
Una sociedad que posee cada vez mayores oportunidades para desarrollar sus capacidades, sus talentos y en consecuencia, cada vez con mayores potencialidades para convertirse en los motores del desarrollo.
En materia de inversión, la estrategia ha sido muy clara.
La presente administración está trabajando para generar un escenario de certidumbre tanto a la inversión como al empleo.
Estamos conscientes de que nuestra calificación en este ámbito aún deja mucho que desear.
Sin embargo, hemos emitido un compromiso firme como gobierno y sobre todo desde la Secretaría de Finanzas a mi cargo, para mejorar la calidad de nuestros servicios, trámites y otorgar facilidades para la apertura de negocios, al tiempo que hemos también hecho un compromiso con el poder judicial del estado a fin de elevar el estándar de ejecución de contratos mercantiles e hipotecas, así como en el cumplimiento de sentencias.
El contexto en el que estamos, nos es inevitable.
Pero como estamos viendo, no hemos sido tomados por sorpresa.
Las estrategias que estamos siguiendo en la administración del Gobernador Fidel Herrera son las de un estado responsable, que mantiene finanzas sanas y que a la par, incentiva las cadenas productivas en diversos sectores a fin de mantener una economía dinámica.
Estamos blindados en el sentido de mantener una estabilidad de precios que evite un impacto directo en los bolsillos de la población.
Pero también estamos blindados para que el desarrollo del estado no se vea mermado.
*Secretario de Finanzas y Planeación del Gobierno del Estado.
jduarte@sefiplan.gob.mx
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