Ideas
El libro que más rápido he leído en mi vida no ha sido por prisa o pocas páginas, sino por su contenido digerible, y su muy ameno análisis sobre los temas mediáticos de hoy en día. Por cierto la obra de la cual hablo me la regaló el actual Secretario de Salud Juan Antonio Nemi Dib, quien me compartió que ese era uno de sus textos predilectos, el escrito por el profesor de filosofía en la Universidad de Zaragoza Daniel Innerarity, titulado “La sociedad invisible”.
El autor de dicho título nos dice: “Ninguna generación ha estado tan obsesionada por lo visual como la nuestra. Nos rendimos ante lo visible y apenas podemos librarnos del poder de las imágenes, tanto de las fascinantes como de las terribles. La sociedad que se ha ido generando en torno a la televisión está acostumbrada a no creer salvo lo que ve y creerse todo lo que ve.”
Dicho lo anterior podríamos decir que desde esa premisa partió el ex Gobernador del Estado de México y actual Presidente de la República Enrique Peña Nieto, quien desde la gubernatura comenzó con una fuerte campaña mediática de impacto visual, cubriendo varios frentes que pasaban desde el político y social, hasta el personal, es decir familiar y amoroso donde el político originario de Atlacomulco se veía en revistas de la élite social en nuestro país, al lado de su en esa entonces prometida Angélica Rivera y sus vástagos.
Enrique Peña Nieto como en su momento el Presidente de los Estados Unidos de América Barack Obama, han entendido que la sociedad en la que vivimos no es la misma que hace 3 o incluso 2 décadas. La tendencia sin lugar a dudas dio un vuelco hacia lo no material sino digital.
El mandatario mexicano tiene en el momento en que escribo estas líneas, 2, 676, 334 seguidores, mientras que en la ya muy popular red social Instagram tiene 57K que equivale a 57, 000 seguidores en este muro de imágenes editadas y con filtros. Las fotografías del mandatario son cuidadas, tanto en Twitter como Instagram; sus gestos faciales siempre son los adecuados, y que decir de su manejo de expresión corporal, como lo podemos constatar en la fotografía en la que aparece junto al actor Kevin Spacey protagonista de la muy exitosa serie de “Netflix” House of Cards. Según el tipo de evento es la expresión del Presidente en la mayoría de sus fotografías se ve sonriente, aunque en algunas otras se le ve serio, pensativo como si algo lo consternara, generalmente esas imágenes son en el marco de eventos de mayor solemnidad.
Los políticos y la sociedad a la que representan se encuentran inmersos en lo mediático. Basta con insertarse en el tema del momento a través de un posicionamiento y este adentrarlo al debate que en ese momento se esté llevando a cabo.
Las redes sociales y la prensa digital se han convertido en un referente obligado hoy en día. Basta observar como los jóvenes se “pasan coordenadas” de la ubicación de los alcoholímetros a través de Twitter o mayor ejemplo tenemos el de hace unos días cuando se registró un sismo a las 5 de la mañana y en pocos minutos se volvió tendencia.
De ahí pues que quienes buscan adquirir el poder se encuentren inmersos en las redes sociales. En el caso de Peña Nieto ya lo ha logrado, sin embargo su estrategia publicitaria y de imagen es integral. Además de contemplar prensa, específicamente la televisión, su equipo ha sabido explotar muy bien la imagen del jefe del ejecutivo federal. No es casualidad la aparición del mandatario en la revista “Times” donde auguran por parte de los EUA éxito en este 2014 al mandatario mexicano o la portada en Rolling Stone en mayo del año en curso donde el encabezado dice “El reformador” ¿Tonto?... ni tanto. Los periodistas Michael Crowley como Enrique Hernández Alcázar de Times y Rolling Stone respectivamente hacen análisis de manera imparcial de la gestión que califican como buena en los primeros 18 meses del ejecutivo federal.
El libro que más rápido he leído en mi vida no ha sido por prisa o pocas páginas, sino por su contenido digerible, y su muy ameno análisis sobre los temas mediáticos de hoy en día. Por cierto la obra de la cual hablo me la regaló el actual Secretario de Salud Juan Antonio Nemi Dib, quien me compartió que ese era uno de sus textos predilectos, el escrito por el profesor de filosofía en la Universidad de Zaragoza Daniel Innerarity, titulado “La sociedad invisible”.
El autor de dicho título nos dice: “Ninguna generación ha estado tan obsesionada por lo visual como la nuestra. Nos rendimos ante lo visible y apenas podemos librarnos del poder de las imágenes, tanto de las fascinantes como de las terribles. La sociedad que se ha ido generando en torno a la televisión está acostumbrada a no creer salvo lo que ve y creerse todo lo que ve.”
Dicho lo anterior podríamos decir que desde esa premisa partió el ex Gobernador del Estado de México y actual Presidente de la República Enrique Peña Nieto, quien desde la gubernatura comenzó con una fuerte campaña mediática de impacto visual, cubriendo varios frentes que pasaban desde el político y social, hasta el personal, es decir familiar y amoroso donde el político originario de Atlacomulco se veía en revistas de la élite social en nuestro país, al lado de su en esa entonces prometida Angélica Rivera y sus vástagos.
Enrique Peña Nieto como en su momento el Presidente de los Estados Unidos de América Barack Obama, han entendido que la sociedad en la que vivimos no es la misma que hace 3 o incluso 2 décadas. La tendencia sin lugar a dudas dio un vuelco hacia lo no material sino digital.
El mandatario mexicano tiene en el momento en que escribo estas líneas, 2, 676, 334 seguidores, mientras que en la ya muy popular red social Instagram tiene 57K que equivale a 57, 000 seguidores en este muro de imágenes editadas y con filtros. Las fotografías del mandatario son cuidadas, tanto en Twitter como Instagram; sus gestos faciales siempre son los adecuados, y que decir de su manejo de expresión corporal, como lo podemos constatar en la fotografía en la que aparece junto al actor Kevin Spacey protagonista de la muy exitosa serie de “Netflix” House of Cards. Según el tipo de evento es la expresión del Presidente en la mayoría de sus fotografías se ve sonriente, aunque en algunas otras se le ve serio, pensativo como si algo lo consternara, generalmente esas imágenes son en el marco de eventos de mayor solemnidad.
Los políticos y la sociedad a la que representan se encuentran inmersos en lo mediático. Basta con insertarse en el tema del momento a través de un posicionamiento y este adentrarlo al debate que en ese momento se esté llevando a cabo.
Las redes sociales y la prensa digital se han convertido en un referente obligado hoy en día. Basta observar como los jóvenes se “pasan coordenadas” de la ubicación de los alcoholímetros a través de Twitter o mayor ejemplo tenemos el de hace unos días cuando se registró un sismo a las 5 de la mañana y en pocos minutos se volvió tendencia.
De ahí pues que quienes buscan adquirir el poder se encuentren inmersos en las redes sociales. En el caso de Peña Nieto ya lo ha logrado, sin embargo su estrategia publicitaria y de imagen es integral. Además de contemplar prensa, específicamente la televisión, su equipo ha sabido explotar muy bien la imagen del jefe del ejecutivo federal. No es casualidad la aparición del mandatario en la revista “Times” donde auguran por parte de los EUA éxito en este 2014 al mandatario mexicano o la portada en Rolling Stone en mayo del año en curso donde el encabezado dice “El reformador” ¿Tonto?... ni tanto. Los periodistas Michael Crowley como Enrique Hernández Alcázar de Times y Rolling Stone respectivamente hacen análisis de manera imparcial de la gestión que califican como buena en los primeros 18 meses del ejecutivo federal.
Nota 1: Siempre son motivantes los comentarios positivos de quienes me hacen el honor de leer esta columna. Gracias a Carlos Rodríguez Velasco, Juan Morales, Juan Miguel Castillo Lara, Heriberto Ponce, Carlos Abreu, Mauro Solano, Tito Barquín, Lluvia Aguilar, Daniel Fernández, Carlos García, y a todos los que siguen esta publicación.
Nota 2: Felicidades doble a Felipe Hákim quien además de cumplir años festejo el sexto aniversario de Crónica del Poder, que sigan los éxitos estimado contador.
Comentarios: rodrigomontoya91@hotmail.com
Nota 2: Felicidades doble a Felipe Hákim quien además de cumplir años festejo el sexto aniversario de Crónica del Poder, que sigan los éxitos estimado contador.
Comentarios: rodrigomontoya91@hotmail.com
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