¿Qué pasa en Veracruz?

Salvador Muñoz

Veracruz es un Estado que cuenta con seguridad y tranquilidad, gracias a que contamos con un Gobernador como Fidel Herrrera Beltrán, atento y preocupado porque nuestros paisanos cuenten con espacios dignos para el esparcimiento y la libre convivencia. Eso no lo digo yo, eso lo dice Juan de Dios Sánchez Abreu, líder del Movimiento Territorial en Veracruz, quien aseguró que los hechos recientes ocurridos son hechos completamente aislados y de carácter federal, por lo que no empañarán la gran imagen que tiene Veracruz para el turismo nacional y extranjero.
Puede que el carvajalista más fidelista tenga razón, puede que no… lo cierto es que hubo cierta reunión privada que a continuación detallo:**
Era una reunión urgente… ¡super urgente! Alrededor de la mesa se concentraban los más altos funcionarios del gabinete y el mero mero petatero… el Preciso, quien levantó la voz, que dejó escucharse como un trueno:
–¡Sor Yeyé! ¿Cuál dijimos que es el tema de hoy?
Estirándose el cuello, como siempre, Arturo carraspeó y dijo: Veracruz, ¿qué pasa en Veracruz?
–A ver, colaboradores, amigos, colados y compromisos… quiero respuestas.
Un dedo temeroso se alzó en la mesa, temblaba tanto que apenas si se alcanzaba a ver entre la cabeza de los presentes.
“¿Qué te pasa, Juan?”, preguntó el Preciso.
–¡Tengo miedo!
La mirada fría del Preciso atemorizó a los demás, pero fue benévolo… sólo le pidió que fuera al baño y Juan con Miedo (perdió el “sin”) salió a disipar su temor.
–¡A ver, Jorge Alejandro! Agéndale a Juanito una cita con el médico para que atiendan su incontinencia…
–¿A poco se hizo pipí?
–¡No! ¡Su incontinencia verbal! Mira que decir ante los medios que tiene miedo… Continuemos… ¿en qué nos quedamos Sor Yeyé?
“¿Qué pasa en Veracruz?”, respondió el secretario.
–¡Exacto! ¿Qué saben ustedes de lo que está ocurriendo en Veracruz?
Otro dedo se alzó, temeroso, más temeroso que el de Juan… ¡era Bola de Nieve! Todos se sorprendieron… ¡lo va a calabacear de nuevo!, pensaron algunos; otros sólo esperaban el baño al fiel Bola de Nieve, pero no, a lo mejor por la desesperación, el Preciso accedió esta vez escucharlo:
–¿Qué sabes tú, Bola de Nieve?
Bola de Nieve se levantó, orgulloso, con la mirada altiva, con papeles en mano, activó un control remoto, bajó una pantalla y acto seguido apareció un título: ¿Qué pasa en Veracruz?
–¡Ejem! ¡ejem! Mis colaboradores y yo hicimos un sondeo mejor que el de Orbit Media y preguntamos a los veracruzanos ¿Qué pasa en Veracruz? Y como el pueblo siempre tiene la razón, le muestro los resultados siguientes: A la pregunta de ¿Quién cree que sea responsable de lo que pasa en Veracruz? Todos respondieron que…
El silencio se hizo sepulcral cuando apareció en la pantalla dos palabras. Sabían que ahora sí, iban a matar a Bola de Nieve, algunos cerraron los ojos, algunos perversos dejaron escapar una sonrisa malvada mientras que otros, veían con odio a Bola de Nieve. Estas eran las dos palabras:
¡¡¡EL NEGRO!!!
¡Cri! ¡Cri! ¡Cri! ¡Cri! ¡Cri! ¡Cri!
¡Todo era silencio! Hasta que el Preciso dijo: “¡Continúa!” Todos volvieron a respirar. Bola de Nieve se acomodó la corbata, carraspeó y continuó:
–A la pregunta ¿Qué debe hacer el Gobierno con lo que pasa en Veracruz? Todos respondieron…
Y el silencio, frío como muerto, se hizo de nuevo presente cuando aparecieron en la pantalla tres palabras. Ahora sí, ahora sí lo mataba por esas tres palabras:
¡¡¡FUERA EL NEGRO!!!
¡Cri! ¡Cri! ¡Cri! ¡Cri! ¡Cri! ¡Cri!
¡Todo era silencio! Hasta que el Preciso dijo: “¡Continúa!”.
–¡Eso es todo!
Y el Preciso se dirigió a sus demás subordinados y les preguntó:
–¿Quién está de acuerdo con lo expuesto por Bola de Nieve?
Nadie. Había más miedo del que tenía Juanito y nadie se atrevía a hablar hasta que Hugo, el jefe de asesores de Rey, dijo:
–¡Yo!
¡Gulp! Tragaron saliva todos.
“¿Por qué?” preguntó el Preciso.
–Pues si no funciona el Negro Sandoval, hay que dejarlo fuera y probar con nuestra cantera en Coatzacoalcos. No debemos permitirnos caer en la primera A, Veracruz se merece un equipo de lujo… hay que decirle a “Chafagol” (Nota del columnista: bautizado así por el sobrino-nieto de el Tlacuache Garizurieta, mi amigo Hugo, hoy corresponsal en TV Azteca ¡viviendo en el error!) que se deje de antros, al igual que al otro negro cabrón, Tressor Moreno, que hasta perdió el avión para ir a Colombia…
El Preciso aplaudió los pantalones de Hugo y prometió tomar cartas en el asunto a la vez que felicitaba a Bola de Nieve por su trabajo.
Así que si usted se pregunta ¿Qué pasa en Veracruz? No se preocupe… el Preciso ya está trabajando en ello.

** Por supuesto: Todo es ficticio. Nuestro reconocimiento a El Negro Sandoval por su gran talento. También al Gober, para que no se sienta y al amigo Hugo Vega Morales, de los funcionarios empecinados en ayudar a Fidel Herrera…

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