Salvador Muñoz
El jarocho es cabrón. Tiene un humor increíble y un tino de apache para poner apodos o para cada puntada que envidiaría cualquier guionista de Eugenio Derbez y que pediría a gritos el deprimente Jorge Ortiz de Pinedo.
Vaya como ejemplo la siguiente anécdota que oímos ayer por la noche:
Estaban reunidos en un restaurante varios periodistas en espera de un alto funcionario de Sefiplan… mide cerca del 1.80.
Si fuera un funcionario de peso de Sefiplan, sería Duarte…
Si fuera el beltronista más fidelista de Sefiplan o el fidelista más beltronista de Sefiplan… mmm… ¡ya me hice bolas!
En fin, total que llegó el funcionario y además de los periodistas –que hoy en día andan en bolita por aquello de las recochinas siglas (ya no “dudas”): PFP– había un ciudadano con su pequeño hijo al que llamaremos “Pollito”.
El de Sefiplan saludó a la familia y el padre, orgulloso, presentó al vástago ¡como todo un adivinador!
–¡Con solo agarrarte te adivina qué eres, a qué te dedicas!
Le decía el orgulloso ciudadano al funcionario que, sin más, accedió poner en prueba los poderes psíquicos del chaval de escasos once años.
Todo un profesional, el mozuelo respiró hondo, hizo algunos movimientos con los brazos, con las manos, tocó al de Sefiplan y…
–Eres… eres…
Y la expectación crecía ante ese ambiente de maravilla creado por el niño que tenía a todos en alerta para ver si, efectivamente, adivinaba qué era el joven funcionario…
–Eres… eres… ¡puto!
¡Y las risas estallaron! El de Sefiplan había caído en la trampa del niño.
Así y peor es el jarocho, de humor cabrón, de puntadas geniales, de humor ingenioso, que desde pequeña edad, desde muy “pollitos”, ¡aflora!
Sólo así se entiende que a un edil boqueño le digan el “Chiqui-Perro” y por ende, a su padre, le digan “El Perro”.
¿Por qué? No sabemos por qué les dicen así a don Miguel Ángel Yunes Linares y a su hijo, Yunes Márquez.
Porque se es “perro pa’ la falda” dice el dicho. En el argot futbolístico, al defensa que no permite jugar al delantero, se le dice que “es un perro”, pero en política, se desconoce a quién se le dice “perro”, bueno, sí se sabe, así le dicen a los Yunes (padre e hijo), pero por qué, no.
El problema de este comentario, es que, al no ser jarochos, probablemente se ofenda el choleño y también se moleste el vecino de Miami.
Hablando de don Miguel (no le digo “Don Perro” porque no soy jarocho… peor: ¡soy chayotero!), se dice que este marzo legalizará su amasiato… con el PAN, por supuesto.
Y para ello piensan traer a la plana mayor del partido, o sea, Juan “Mamilo” Mouriño y Germán Martínez.
Todo indica que se prepara el escenario para dar la bienvenida al neopanista y a ello, se le agrega un ingrediente adicional… la renuncia de Pipo con un ultimátum de 48 horas a partir de ayer, para que deje la dirigencia a la de ya.
Todo indicaría que el grupo de los Julen, Buganza, Torio y compañía, habrían triunfado pero con la incorporación de Yunes Linares en marzo, si se da como se dice, ¡quién sabe!
Y con la caída de Pipo Vázquez es curioso, pero no cabe allí el dicho de que “muerto el perro, se acabó la rabia”…
En fin… el humor jarocho y la política, es una combinación tan extraña, pero que le da sabor a la noticia…
Así que si usted no es jarocho, por lo que más quiera, no se deje sorprender de los “pollitos”… porque estos no corren… ¡vuelan!
***Apartado Especial
Acá en Xalapa, el Ayuntamiento hace una encuesta para los siete puentes que se harán con el Libramiento, supongo.
Entre los nombres que están para elegir, Alfonso Valencia Ríos, Juan Herrera “Juanote”, Sebastián Lerdo de Tejada, Libertad Hernández Landa, Francisco Morosini, Antonio López de Santa Anna, Enrique C. Rébsamen, Rafael Hernández Ochoa, Juan de la Luz Enríquez, Antonio M. Quirasco, Fernando Gutiérrez Barrios, Rafael Guízar y Valencia, entre otros…
Pero como nadie nos tomó en cuenta para la propuesta de nombres, aquí les ofrecemos unos para los siete puentes:
* Puente Eloína Vargas Merino, en honor al puente que cada año obliga echarse a alumnos y maestros de la UV.
* Puente General Orozco Méndez –para que haya caché– con el Puente Lupe-Reyes.
* Puente Jon Rementería, por el puente que nos echamos con el carnaval jarocho… por cierto, sospecho que tampoco es jarocho el alcalde porteño… carece de sentido del humor igual que su jefa de prensa.
* Puente Edmundo Zaleta, por el puente de día de muertos.
* Puente panista, con eso de que son mochos, quedaría bien en Semana Santa.
Si tiene nombres que agregar a los puentes, mándelos a Xalapa.
Otro apartado:
Algo pasa en la Cruz Roja que anda con números rojos para que no le paguen a los médicos dos quincenas… o alguien se está yendo cabezón o de plano hay alguien que lleva mal las cuentas…
Uno más:
¿Qué hacen 50 periodistas juntos? Destrozan a la diputada Dalia Pérez.
De manera absurda, mucha gente ha satanizado una escena de la diputada Dalia Pérez en la película “Chiles Xalapeños”. De manera particular, conociendo a Dalia, a la mujer, sabemos que su interpretación en ese film no deja de ser eso: una interpretación que no riñe para nada con su ser mujer, su ser madre, su ser diputada, su ser humano.
Yo, al menos, tomé las escenas (http://lospoliticosveracruz.blogspot.com), que a mi gusto, son sensacionales porque no deja de llamar la atención que una diputada haya hecho hace mucho, algo tan peculiar como un “tubazo”.
Dalia es una mujer que me merece todo mi respeto. No sé si sea buena actriz, tampoco buena diputada, lo que sí sé es que es buena persona y como tal, llena de virtudes y defectos, torrente inagotable de inquietudes, que, por supuesto, puede o no caer bien a muchos…
De mi parte (y no es albur) la felicito por su valor (porque no me gustó la película) en un film que no deja de parecerme sacado de un libreto de Jorge Ortiz de Pinedo, con todo el cariño y respeto que me merece mi maestro Renato Prada… aunque con ello me arriesgue a un regaño más de su parte.
e-mail: dor00@hotmail.com
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