¡Chiste y circunstancia!

Salvador Muñoz
Los Políticos

Contar un chiste tiene su gracia y también su circunstancia.
Al menos yo soy malísimo para contarlos por eso prefiero escuchar a alguien que no lo cuenta, lo interpreta.
He visto en varias ocasiones el programa de “Guerra de chistes” y aunque hay personas que lo catalogan como vulgar, prosaico, de poco buen gusto, hay otras a los que les fascina y se divierten con ello.
Yo me situaría en este grupo.
Para quienes no conocen el programa que se transmite en Telehit (canal por cable), les cuento que éste es conducido sin libreto, a la buena de Dios, por Radamés de Jesús, Juan Carlos Casasola y Juan Carlos “El Borrego” Nava.
El chiste del programa es contar chistes que cuando niños, llamábamos “colorados”, “pelados” o “subidos de tono” con dos censuras: No pueden decir “Cojer” (con “J” se ve insultante) ni “Verga”.
¿Que por qué no me censuro? A lo mejor porque considero que la palabra no tiene más censura que la de nuestra moral.
Recuerdo a una política durante una entrevista que, en medio de la plática, decía que tal cosa tenía una “enver… enver…” y no se atrevía a completar la palabra hasta que le dije: “¿envergadura?” para que ella asentara con la cabeza.
Nosotros nos ponemos la censura.
Pues el programa “Guerra de Chistes” fue “clausurado” simbólicamente por el Consejo Ciudadano por la Equidad de Género en los Medios de Comunicación, obstruyendo con una manta las instalaciones de Telehit, en la ciudad de México.
Los motivos: Consideran que los conductores ofenden a una dama de nombre Carmen Yered Licona.
Bueno, realmente no se trata de defender a Carmen Yered Licona o a la “Wanders Lovers”, personaje que interpreta dicha dama en el programa, sino a la Mujer en general.
Y es que en la “Guerra de los Chistes”, los conductores no bajan de “pendeja” a “Wanders Lovers” lo que dicho Consejo considera que denigra a la mujer.
Se puede estar de acuerdo o no con el Consejo Ciudadano y su postura. A mí sólo me gustaría precisar y dar a conocer mi opinión que no busca ni intenta ser un absoluto, sino eso, una opinión:
“Wanders Lovers” es un patiño de los conductores y no intenta reflejar en nada el papel de ninguna mujer. ¡Vaya! Es la interpretación de un personaje en el que recaen las burlas, por eso nunca presentan a esta mujer como Carmen Yared Licona.
Pero para el Consejo, resultó ofensivo que el día de su cumpleaños le dieran una nalgada con un cinturón y pedirle que alzara los brazos para que exhibiera un poco, más de lo que enseña, de su generoso busto.
¡Vamos! La “Wanders Lovers” brinca con blusas extremadamente escotadas para jugar con el movimiento de sus senos.
En lo particular, insisto, ese es su papel en un programa que promete sólo dos censuras, las ya comentadas.
Es como si dijéramos que “la Chupitos” denigra a las mujeres porque pudiera uno pensar que todas son borrachas… y Liliana Arriaga (la actriz que interpreta al personaje) no es alcohólica… creo.
Yo apoyo a la “Guerra de Chistes” y creo que no ofende a nadie más que a quien quiere ofenderse.
¿O a usted lo ofendió el “que la chupen”, “que la sigan chupando” o el “que la mamen” de Diego Armando Maradona?
Ése sí fue un chiste… nadie duda de la genialidad como futbolista del “Pelusa”, pero como Director Técnico es mediocre.
Y contar un chiste tiene su chiste y su circunstancia…
Como una vez me ocurrió a mí…
Siendo gobernador electo Fidel Herrera Beltrán y teniéndolo a modo en una entrevista, durante la inauguración de las oficinas de un semanario, le solté a bocajarro:
–¿Usted tiene humor negro?
Y su respuesta dio por concluido mi chiste…
–¿¡Lo dices por la pigmentación de mi piel!?
Y me di cuenta que no tenía humor negro…

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