Las pompas de Dante

Salvador Muñoz
Los Políticos

La rumpología es el arte de leer el trasero… Sí, aunque Dante Delgado lo considera perverso, habemos quienes podemos saber ciertos detalles de la persona nomás con verles las pompas.
Por supuesto, esto viene a colación por el comentario que hizo el precandidato a la Gubernatura por “medio” PRD (el “otro medio” quiere a Yunes Linares) y Convergencia (DDR se autoproclamó candidato por su partido) respecto a lo que él acusa como derroche de recursos innecesario y manipulación de programas sociales, lo que califica como una perversión política de “tocarle las pompas a quien se deje”.
Don Dante, usted mismo lo dijo: “Quien se deje”.
Exacto, cada quién es libre de hacer de su culo (nombre propio con que también se le conoce a las pompas, nalgas, trasero, etcétera) un papalote y empinarlo como quiera.
Quien no se deja y le agarran las nalgas, se siente ofendido, ultrajado, humillado, rebajado.
¿Estamos de acuerdo? Si no, que lo digan las damas que han sido víctimas de algún perverso que si no lo hizo físicamente, lo habrá hecho verbalmente con frases como “en esa cola sí me formo”, “Con esa torta y una Fanta, hasta mi pajarito canta”… ¡Eso sí ofende!
Lamentablemente, don Dante, vivimos en una sociedad que disfruta de los regalos como gorritas, camisas, pegotes, sombrillas, artículos que a un grueso de la gente, le encanta.
Cuando alguien da un presente ofrece al mismo tiempo el regalo de la risa, la felicidad… aunque efímeras ambas.
Es cierto, nada de eso habrá de saciar hambre o sed, a menos que el candidato también dé las tortas (las comestibles, no las tocables) y los “Pau Pau” que son más baratos que bajarse por los “chescos”.
Aunque no me va a negar que su partido, como muchos otros más, viven de nuestros impuestos… entonces, en política, las gorras sí sirven… digo: Hay quienes viven de la “gorra”…
Califica los altos topes de campaña (500 por ciento más comparado con el de hace seis años) como el taparle el ojo al macho para justificar el derroche de recursos… me hubiera gustado oírle decir que usted no va a tocar ese dinero para su campaña y que va a apostarle a la buena voluntad de los medios de información para difundir su propaganda y propuesta. Que no regale gorras, sombrillas o camisas no significa que no se va a gastar lo que considera un derroche.
Claro… ni usted ni Duarte o Yunes harán algo al respecto ¡porque está permitido por la Ley gastarse ese dinero!
¿Es una perversión política tocarle las pompas a quien se deje?
No… si tiene edad de votar y permite que lo trasteen… no hay perversión.
Pero si fuera una perversión es en la que todos participamos ya sea con acción u omisión: Usted, cuando fue priista y hoy que es dueño de Convergencia. Los ciudadanos, por seguir permitiendo que nos agarren las nalgas y los medios de información, que se van de nachas con un PAN, un PRI o con usted…
Eso sí, ni políticos, ni periodistas, ni ciudadanos, hombres o mujeres, podemos escapar del dulce encanto que puede haber en un buen par de nalgas… o pompas, como tímidamente las menciona usted.
Pero… ¿estaríamos dispuestos a hacerles una crítica rumpológica a nuestros políticos sin que se ofendieran?
Querido lector, si usted es puro y casto, deje de leer porque puede que no esté de acuerdo con el siguiente estudio sobre las pompas de nuestros políticos, funcionarios y candidatos…
Venga entonces el estudio:
* Julio Saldaña, con pompas de llamarada: ¡Chiquitas y quemadas!
* Alfredo Gándara, con nachas de comediante: Las ves un día y te ríes toda la semana.
* Ainara Rementería, de Submarinos Marinela: Esponjaditas esponjaditas, dijera Kiko.
* Nicho Pérez Jácome, de Mejoral: Planas y con raya en medio.
* Chendo Pelayo, con pompas de tarea de niño travieso: Planas, planas y mal hechas.
* Carolina Gudiño, con pompas de asma: Las ves y se te va la respiración.
* Martha Patricia Romero García (la que se desnudó en Palacio de Gobierno), con nachas de viuda: Tristes y apachurradas.
* Marcelo Montiel, con sentaderas de Puente de Plaza Cristal: Porque Theurel lo dejó a medias.
* Martha Montoya, con pompas de canción de los 70’s: ¡Viejitas pero bonitas!
* El líder ferrocarrilero Víctor Flores Morales no tiene pompas, tiene cola… ¡que le pisen!

e-mail: dor00@hotmail.com