Arturo Reyes González
El Burladero
Cual si fuera figura de acción de alguna marca de muñecos para niños y cuando parecía que ya habíamos visto bastante de las múltiples facetas fotográficas del actual gobernador, Fidel vuelve –recargado– con su versión de Fidel El Cazacocodrilos, lo cual no es más que un reflejo fiel de la personalidad del gobernante.
La foto publicada en medios de comunicación donde aparecen un par de ciudadanos tras haber recuperado un cocodrilo prófugo y el Gobernador posa al lado de ellos como parte del equipo de captura, no es más que la proyección y dimensión de su estilo de vivir, gobernar y hacer política. Fidel gusta de estar en todo y goza trabajar, se da tiempo para dar el extra y me parece al mismo tiempo divertirse dejando huella en la memoria fotográfica del estado. Él está obligado a encontrar soluciones, para eso lo contrataron los veracruzanos con su voto, la forma gustará a algunos, a otros no, es quizás lo más criticado.
Pero ¿acaso habrá tomado Fidel algún curso del canal de televisión de paga especializado en vida animal como Animal Planet, del Discovery Channel o del mismo National Geographic para la captura de cocodrilos? No dude que al rato nos digan que algo de eso hay, que fue en línea o vía Internet, o que ya lidiaba con este tipo de animales desde su natal Nopaltepec en la zona de la cuenca del Papaloapan, junto a Rafael El Negro Cruz cuando chamacos.
Entonces, mucho se ha especulado acerca de su forma de gobernar, de hacer política, de operar, prácticamente todo está dicho y es motivo de comparación y hasta ahora mera especulación con el próximo gobernador de Veracruz.
Me parece que el estilo puede ser lo de menos, mientras se den resultados cumpliendo a la gente. Por supuesto hay formas básicas, reglas escritas y las que no, que muchas veces se deben de respetar, pero de allí en fuera lo importante son los hechos y las promesas cumplidas.
Si ya fuimos capaces de sobrevivir al personaje de las botas de charol, el Borgues, al comes y te vas, a las víboras prietas y las tepocatas presidiendo nuestro presente como Nación, el cazacocodrilos no es nada.
No me cabe duda de que el staff del Gobernador no estuvo a la altura de la circunstancia, y una vez más les ganó el brinco, porque de haber estado en sintonía le hubieran pasado el sombrero café, las botas de piel de cocodrilo y el collar de dientes al puro estilo Hollywood y Dundee.
A Fidel lo único que le hizo falta en su gabinete fue un productor estilo Hollywood y no Televisa.
Para el caso del próximo gobernador, él sabrá si se viste como algún miembro del grupo musical Los Caracoles, si se sube al palo de los voladores de Papantla, se avienta de un avión en paracaídas o si encabeza una marcha por cada pueblo veracruzano acompañado de una banda musical de viento, lo importante es que lleve bienestar a la gente y atienda sus demandas con prontas soluciones, a corto, mediano y largo plazo.
Para el caso de muchos de los próximos nuevos alcaldes, aunque quieran adoptar una pose y aparentar lo que no son, al final siempre sale la verdad, no tardarán en mostrar el cobre y algunos volverse locos, nada más dejen que cobren sus primeras quincenas para verlos en las principales tiendas departamentales, agencias de autos e inmobiliarias.
Lo que natura no da, salamanca no lo presta.
Y a todo esto, ¿quiénes son los dueños de los animales? De los cocodrilos…
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