Atractiva tentación

Arturo Reyes González
Burladero

En una ocasión tuve la oportunidad de escuchar una conversación en un autobús del servicio urbano, hace un par de meses, donde dos individuos de aspecto normal, jóvenes de entre 25 a 30 años, platicaban acerca de que si tuvieran la oportunidad no dudarían en ponerse al servicio del narcotráfico.
En ella señalaban dos aspectos importantes, uno, que en su desesperación generada por su precaria situación económica estarían dispuestos a asesinar a alguien a cambio de una buena cantidad de dinero; y dos, que este hecho de muerte se ha dado a últimas fechas de manera más frecuente, denotando un cierto ambiente de inmunidad con respecto a la acción policiaca, sin especificar si en la entidad o en ámbito nacional.
De inmediato me vino a la mente una pregunta, me parece algo obvia: ¿cuánto paga el narco? Y en consecuencia: ¿a cambio de qué? ¿Se tratará de un sueldo fijo que incluye todo o hay tarifas dependiendo de tus funciones? ¿Te dan “bonos” si matas a diez ciudadanos y no a una persona, es mayor si te enfrentas con la policía local, con la federal o el ejército? ¿Tu familia tiene seguro, prestaciones? O como a lo mejor muchos ciudadanos comunes imaginamos, ¿todo es en efectivo?
Y en contraparte ¿cuánto gana un soldado del Ejército Mexicano? ¿Él qué tiene que hacer, aparte de su esencia y función natural, auxiliar en las inundaciones y desastres naturales y ahora combatir de manera directa al narcotráfico? En febrero de este año el presidente Calderón aumentó al salario de las fuerzas armadas tanto del Ejército como de la Marina en mil pesos, difundiendo de manera oficial que de 2006 a este 2010 prácticamente se ha duplicado su sueldo. Y ahora, entonces, ¿cuánto ganaban en 2006?
De acuerdo a información obtenida de la misma tabla de percepciones de la Sedena, en 2006 indica que la categoría de soldado registra una "percepción bruta de 4,053.38 pesos y una percepción neta de 3,865.25 pesos". Pero en realidad, el salario neto de un soldado aprobado por la SHCP es de 2,136.20 pesos mensuales. Esto sin tomar en cuenta descuentos por préstamos, adeudos, retenciones hacendarias.
Imagínese usted eso, pero hay que quitarle todavía los descuentos. Ese sueldo reconvierte en 3,239.82 pesos mensuales en la zona uno; 3,843.51 pesos mensuales en la zona dos y 4,331.08 pesos mensuales en la zona tres, que la correspondiente a la frontera norte.
Pero además, se encontró la siguiente información –todo público– resulta que la Sedena dispone además de compensaciones mensuales para todos sus miembros, que van desde los 700 pesos mensuales brutos (560 reales) para sargentos segundos, ¡hasta 195,476 pesos mensuales brutos (133,689.12 netos) para el secretario de la Defensa Nacional! Ah, y por si fuera poco, cabe señalar que los soldados rasos no cuentan con el beneficio de la compensación mensual.
Esto es, a resumidas cuentas, que si ganaban de tres a cuatro mil pesos mensuales, hoy ya están ganando de seis a siete, ponga usted ocho mil pesos. El doble que hace cuatro años cuando inicio esta administración. Ya sabemos ahora cuánto esta ganando –aunque sea de manera aproximada– un soldado. La contraparte la desconozco totalmente.
¿Cree usted que si escuchamos historias urbanas acerca de lo que maneja y gana el narcotráfico, de los millones de dólares, euros y demás monedas extranjeras que van y vienen, relativamente de manera fácil, no sea atractivo pensar en engrosar las filas del narco en lugar de engrosar las del desempleo o las del comercio informal, si bien nos va?
De entrada parece una muy atractiva tentación. Claro, ya cuando a los interesados les toca la balacera será otra cosa. Mientras eso no suceda y mientras nuestras aspiraciones –validas y legítimas– sean mucho mayores a los raquíticos (y además lo digo con toda convicción) e inmerecidos sueldos de millones de mexicanos, lo seguirá siendo. No digo que se viable, pero desesperados, parece somos casi capaces de todo.
Déjeme comentarle algo más acerca de nuestro Ejército, ya que estamos en ello.
El día de ayer el Congreso de la Unión autorizó al Ejército recursos para la creación de 18 nuevos batallones en 2011. Según información pública, se contempla con lo anterior el poder reclutar o contratar a diez mil soldados más de los 200 mil elementos que ya sirven a la nación para combatir a narcos, pero también atender a la población afectada por desastres e inundaciones como ya lo hemos visto tanto en el norte como en el sur de la entidad y estados vecinos.
Asimismo, de acuerdo con información de la Comisión de Defensa, que encabeza el diputado priista Ardelio Vargas, nada más este año el Ejército ha atendido 12 huracanes, dos tormentas tropicales, cuatro depresiones tropicales, 58 inundaciones y 632 "eventualidades internas", por lo que para poder enfrentarlos han echado mano de 150 mil efectivos del Ejército de esos 200 mil con que cuentan.
150 mil efectivos, no todos ellos al mismo tiempo, pero… entonces, mientras, ¿cuántos soldados hacen frente al narco?