domingo, 23 de enero de 2011

Cafres y Buganza

Salvador Muñoz
Los Políticos

En Tijuana, el chofer (de servico urbano, particular, de empresa x) conduce por las calles como desenfrenado, como alma que lleva el diablo, se pasa el alto, rebasa la línea peatonal, pone en peligro a los demás conductores así como al transeúnte... al pasar a San Diego, este cafre se transforma, modula la velocidad, respeta los señalamientos y es en sí, todo un caballero al volante.
¿En qué consistió la transformación? En que simplemente al pasar al otro lado sabe que las Leyes allá son diferentes.
Allá, el uniformado, hace respetar la Ley y si él mismo no lo hace, será juzgado igual o peor que el infractor.
II
Omar salió de su casa, a la altura de Plaza Cristal de Xalapa. Tenía que ir al centro. A pesar de contar con vehículo propio, tomó una decisión repentina: Abordaría un camión del servicio urbano o una combi... lo que pasara primero.
En la parada de Independencia esperó entonces hasta que una combi, de la ruta amarilla, fue la que apareció. La abordó y se percató de lo incómodo que a veces resultan los asientos pero eso era pecata minuta cuando el conductor de la unidad 407 empezó a poner en movimiento el vehículo.
¿Se quejan los ciudadanos de lo lento que es el servicio urbano? se preguntó Omar. Las velocidades adquiridas por la 407 de rápidas, se transformaron en temerarias. ¿La razón? Otra combi, la 414. Cual depredador, el conductor donde iba Omar, la había visto. Parecía que el objetivo era rebasarla y llegar primero que la presa al centro. Sólo así se entendía la manera tan osada para conducir y perseguir al de la 414.
Mientras, los pasajeros se agarraban de donde podían, pero ninguno chistaba por el modo de conducir del chofer de la 407... incluso la anciana con bastón.
Entonces vino lo sorpresivo en la avenida 20 de Noviembre. El conductor de la combi 407 dejó su ruta y entró de manera sorpresiva sobre 5 de Febrero... ¡un atajo! Exacto. Le daría la vuelta a la avenida para bajar exactamente sobre Xalapeños Ilustres. Y cuando así lo hizo, al reincorporarse a su ruta, ya había rebasado al 414 quien venía metros atrás.
El regidor Omar Miranda Romero, titular de la Comisión de Tránsito, entendió que tiene mucho trabajo que hacer al lado de la presidenta municipal Elizabeth Morales y del director de Tránsito, Marco Antonio López Domínguez, en lo que a Vialidad y Transporte Público se refiere.
III
Retiran la licencia al conductor del camión urbano 1055, ruta Tejar-Medellín, después de haber atropellado a un joven y darle muerte. El dueño de la concesión, Francisco Martínez, pierde la concesión.
Al menos esa es la información que la secretaría de Gobierno, a cargo de Gerardo Buganza Salmerón, dio a conocer.
A primera vista, creo que todos debemos aplaudir la medida que nuestras autoridades hacen respecto a este lamentable accidente...
Pero, me pongo a pensar, ¿qué tan responsable es el concesionario de la conducta de su chofer? Al menos, yo no entiendo esa mecánica...
Si yo doy trabajo a una persona y ésta hace mal uso del empleo que le doy... ¿también soy responsable? Digo, si así fuera, cuántos comandantes o hasta secretarios de Seguridad Pública o generales, habrían ya caído por el actuar de sus policías o soldados.
Habrá que analizar, creo yo, más a fondo, este esquema punitivo de la secretaría de Gobierno. A simple vista, insisto, es bueno, hasta populista, pero bien podría caer en un autoritarismo. Soy un ignorante de las Leyes, lo confieso, y debo dar por hecho que Gerardo Buganza está actuando apegado a la Ley y que ésta marca que, cuando un conductor de una unidad del servicio público lesiona o mata a un tercero, retiran la licencia de conducir al chofer y la concesión al “pulpito”. Ojalá hubiera alguien que me indique qué artículo lo marca.
IV
Bueno, entre las cosas que encontré en la Ley de Transporte en su Artículo 74, en la página de Gobierno del Estado, están:
“Los conductores, propietarios de vehículos y la empresa aseguradora, en términos de lo dispuesto por el artículo 46 de esta Ley, están solidariamente obligados a responder por los daños y perjuicios causados a terceros en su persona y patrimonio. Cuando se cometa el delito de homicidio o el de lesiones previstas en las fracciones de la IV a la VI del artículo 137 del Código Penal, la Dirección de Tránsito y Transporte del Estado retendrá el vehículo que haya intervenido en el accidente para garantizar el pago, y lo pondrá sin demora a disposición de la autoridad competente, para la determinación de la responsabilidad procedente. Probada la culpabilidad del operario por la autoridad competente, en caso de insolvencia del mismo, el concesionario o permisionario deberá indemnizar a la víctima o a sus deudos, con la póliza del seguro correspondiente y, de no
ser suficiente, con sus recursos propios. El monto de la indemnización y los mecanismos para su pago inmediato los determinará la autoridad jurisdiccional competente. La indemnización por ese
concepto nunca será menor de dos mil ni superior a cuatro mil salarios mínimos vigentes en la capital del estado. Tan luego como resulte cubierta la indemnización procedente y a entera satisfacción de la víctima o sus deudos, el vehículo será devuelto sin demora al concesionario o permisionario”.
Pero no habla de retirar la concesión... a menos que vuelva de nuevo a leerme toda la Ley o alguien por favor me aclare y diga en dónde se dice que perdió su concesión el dueño de la unidad. Espero fervientemente estar equivocado y puedo aceptar gustoso no entender de Leyes.
V
En fin... que lo único que uno espera es que, en términos de vialidad y transporte, nuestros conductores y peatones asuman una conducta y nuestras autoridades su papel y actúen como tal: con la Ley en la mano, créanme que a veces por ahí, entra la educación y la cultura. Pero, insisto, no al sensacionalismo... nomás que nos diga Buganza si efectivamente se va a retirar esa concesión y qué Ley lo marca...

1 comentario:

Anónimo dijo...

chinga tu madre puto lame bolas