Las meretrices

Salvador Muñoz
Los Políticos

Acababa de asentarme en Xalapa y además de estudiar, decidí buscar un trabajo... la bondad de don Guillermo Zúñiga Martínez, siendo alcalde de esta ciudad, me extendió una carta de recomendación. ¡Imaginen! Nada más y nada menos que recomendado por el alcalde de la capital veracruzana. Llegué al restaurante La Estancia de los Tecajetes y mostré mi carta ante los ojos de David Bouchez quien aceptaba darme trabajo si además de esa carta, le ofrecía otra.
Le dije que volvería. Fui a la casa de una señora que me había ofrecido su amistad, junto con su familia y le platiqué lo ocurrido. Entonces me citó para dos días después en un tianguis, pues ella vendía pescado. Acudí al lugar, y allí me presentó a otra señora y le dijo: ¡Mira, este es el muchacho que te dije... el que salió de su casa porque su mamá anda en malos pasos!
-¿Entonces tu mamá se prostituye?
-¡Sí, señora!
Y en ese momento, mi mamá era convertida en una meretriz.
Sin embargo, conseguí mi carta de recomendación y cuando llegué con don David Bouchez, se sorprendió, porque precisamente la dama que me había extendido el documento, era una de sus proveedoras...
Por supuesto, a mi santa madre le conté la anécdota y me habrá dicho algo así como “hijo de tu chingada... ya me prostituiste”... y reído con ganas.
II
Al diputado federal Francisco Moreno Merino le acaban de quitar la candidatura al Senado por Morelos por pasarse de la boca. Una frase, un refrán, un dicho, acaba con su carrera al Senado.
Durante la comparecencia del director del Issste, el legislador federal (al que postulaban para ser Senador), dijo lo siguiente:
“No hay caballo que no tire a mula, ni mujer bonita que no llegue a ser meretriz y hombre bueno que no tire a penco. No sea usted un hombre bueno... sea un buen director del ISSSTE”.
Las mismas compañeras del legislador priista de inmediato se molestaron por el dicho al considerarlo agresivo para con ellas... que conste, nadie exentó al director del Issste de “hombre bueno” o de “penco”...
La polémica se desata porque consideraron misógino el refrán... es decir, atentaba contra las mujeres...
A mí se me hizo generalizado: Al citar “mujer bonita” damos por hecho que no hay mujer fea y entonces, en el refrán de Francisco Moreno, las aludidas agarraron parejo...
Pero aparte es como discriminatorio y elitista... ¡huy! es una ofensa llamar a la mujer “meretriz”... quizás hace más de 20 años, cuando taché a mi madre de “prostituta”, pudo haber sonado fuerte... hoy, al parecer, la sexoservidora sólo practica un oficio... luego entonces, yo creo que las ofendidas debieran ser las meretrices porque las “mujeres bonitas” se hayan sentido agredidas al ser comparadas con ellas.
Como sea, mi respeto para estas mujeres que se ganan el pan con el sudor del de enfrente...
III
En fin... Francisco Moreno Merino perdió la oportunidad de llegar a un cargo de representación popular tan alto como ser gobernador de su estado, por culpa de una “meretriz”... en cambio yo, hace más de 20 años, ¡hasta chamba conseguí por una “prostituta”... cómo han cambiado los tiempos.