Brenda Caballero
Números Rojos
Nació en Chihuahua en novecientos seis / en un petate bajo un ciprés/ a los dos años hablaba inglés/ mató a dos hombres a la edad de tres…Pancho, Pancho López/ Chiquito, pero matón…A los cinco años sabía montar / y la carabina sabía usar / y su papá lo dejaba fumar / y se emborrachaba con puro mezcal… Pancho, Pancho López/ Chiquito, pero matón…
Aunque en nuestros días pareciera una historia más del crimen organizado, era una canción que cantaba el grupo adolescente Parchis, incluso el mismo Cepillín para los pequeñines.
El autor de tal corrido infantil fue Eduardo Lalo Guerrero, el de las Ardillitas (¡Pánfiloooo...contesta el teléfono… no puedo jefe, me estoy bañando), basándose melódicamente en la popular canción norteamericana de “Balada de Davy Crockett”, y con la moraleja de no vivir la vida con tanta rapidez.
Desde luego que en aquel entonces no era mal vista, incluso era chistosa y merecedora de varios reconocimientos. Hoy, si se cantara, hasta la hubiesen vetado.
Billy The Kid dice la leyenda nació en Nueva York. A los doce años tuvo que sobrevivir lavando platos y en otros trabajos mal pagados, causa que dicen lo obligó a iniciar una vida delictiva con robos mas pronto era liberado. Su vida fue objeto de películas y canciones, pues a su corta edaddicen mató a 21 hombres.
Era finales del 2010. Edgar ‘N’, alias el Ponchis, conocido como el “Niño Sicario”, era condenado a tres años de prisión por el asesinato de 4 personas cuyos cuerpos colgó de un Puente. Asimismo se le vinculó con unos 300 homicidios, pues su carrera delictiva empezó a los 11 años.
Delgada, aparentemente indefensa, con 45 kilos, 1.45 metros de estatura, son las características de Ana Carolina, adolescente de 17 años que, a principios de este mes, fue la autora intelectual del homicidio de sus padres adoptivos, a manos de su novio y un amigo de éste. El móvil aparente: no le compraron un coche.
Hace unos días, en la Delegación Alvaro Obregón del Distrito Federal, Yohanan Jefte, de 15 años agredió a un compañero de escuela y a la madre de éste en su casa. A la señora le propinó un navajazo en el cuello y a su compañero le propinó 15 puñaladas. El motivo: una deuda de 3 mil pesos.
Y la pregunta millonaria ¿Deben ser juzgados como adultos? ¿Saben lo que hacen? ¿Tienen conciencia de sus actos?
Según la misma Iglesia, un niño, a partir de los siete años, ya puede decidir lo que hace; ya tiene uso de razón, motivo por lo que es la edad mínima para poder recibir el sacramento de la confirmación y renovar por sí mismo las promesas bautismales.
En México, la edad para recibir un proceso penal es a los 18 años, lo que genera controversia antemenores infractores, que lo más que se puede hacer contra ellos es recluirlos en Centros Integrales, en los que pasarán unos cuantos años y saldrán nuevamente, debido a que la legislación no permite presentar cargos penales en su contra.
Y nuevamente, como se hace año tras año, se pidió reducir la edad penal. En el 2013 fue debido a la liberación de otro niño sicario de 13 años que confesó haber participado en una docena de homicidios, aunque desgraciadamente el menor fue ultimado después de haber salido en libertad.
Ciertamente, desde hace muchos años, existen asesinos menores de edad, aunque actualmente la situación delincuencial en México está engrosando las filas del crimen organizado.
Ese podría ser un factor para reducir la edad penal en México a pesar de que grupos de Derechos Humanos y de la Infancia se opongan a ello.
Otra de las causas que se manifiesta para no bajar la edad penal son las Teorías Psicológicas del Desarrollo, que consideran que un menor de 16 aún no ha superado sus etapas de desarrollo que lo hacen llegar a la adolescencia, y si éste no se desarrolla plenamente, le costará adaptarse a la sociedad y al medio ambiente que le rodea.
Otra de las propuestas que se han hecho durante estos años es que se juzgue a los menores de acuerdo al delito que cometan, o como dice el dicho, “de acuerdo al sapo, la pedrada”. Si los menores cometen delitos como narcotráfico, homicidio calificado, violación, secuestro, se les procese como adultos pues ¡por supuesto que saben lo que hacen!
Esas son las reformas que necesita el país, pues todos los ciudadanos tenemos derecho a la protección y a la seguridad y no solo a estar contribuyendo con impuestos.
Creo que este 4 de diciembre será un factor determinante para volver a retomar la edad penal en México, ya que después de tres años de prisión, el Ponchis regresará a las calles.
Email: caballero_brenda@hotmail.com
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