¿Halcones UV Xalapa tendrá la mejor afición del país?

Fernando Hernández Fernández
El Marcaje

Cuánta tristeza me dio escuchar las dudas ligadas al tetracampeonato de los Halcones UV Xalapa en la Zona Sur de la Liga Nacional de Baloncesto Profesional. No me cabe en la cabeza que gente ligada a la mal llamada mejor afición ponga en duda la clasificación de su equipo a su cuarta clasificación consecutiva a luchar por el título general de la competencia.
Durante la semana, en varias pláticas de café con colegas y personas que van a los partidos, me confesaban sus vacilaciones para lo que sería la serie contra Córdoba, porque es un equipo de la misma organización, porque es un conjunto también de la entidad veracruzana, porque el entrenador de los verdes estuvo con los capitalinos en el pasado reciente, en fin, por muchos factores.
Todo aumentó cuando el ave cafetalera ganó el tercero de la tanda de manera apabullante. Los titubeos aumentaron y los comentarios también. De paso le faltaron el respeto a los hombres de Ángel González por considerar que se habían prestado a tal situación.
Yo tuve la oportunidad de estar en ese partido y difícilmente creo que haya habido un arreglo por parte del presidente de ambos conjuntos, Juan Manuel González. ¿Por qué? Sencillo, muchos de los tiros de los capitalinos prácticamente caminaron por el aro y se salieron. Si alguien puede controlar eso, entonces es un mago del muñequeo. Eso entre otras cosas que se pudieron apreciar durante el duelo.
Luego salieron las preguntas acerca de cómo Xalapa impuso tanta hegemonía en el cuarto y quinto partidos. Más sencillo de aclarar. Les picó el orgullo que el hermano menor les haya pasado por encima. Nada que ver que los azules se dejaron ganar para no humillar a los cafetaleros con una barrida. Si la dirigencia hubiera metido mano, la conveniencia hubiese sido irse a siete partidos en la serie por tres razones: la primera, pues la taquilla, ésta habría aumentado considerablemente; luego, los de Córdoba habrían quedado como héroes por la hazaña de alargar tanto la contienda; y, finalmente, se habría podido tener un mejor ritmo de juego tras el atraso que vive la final en la Zona Norte. Estos días de descanso podrían afectar a los emplumados.
Desde hace una semana quise redactar una columna acerca de la afición de los Halcones capitalinos, pero preferí contenerme porque lo de El Flamer fue una joya y porque quise darle el beneficio de la duda para la tanda frente a los hombres de la ciudad de los 30 caballeros.
El análisis que rescato tras estos cinco partidos contra los cordobeses es que el público xalapeño estuvo algo lejos de lo que era años atrás, pero hizo un buen intento, aunque a cuentagotas, como por ejemplo los gritos de la porra oficial en todo momento, pero a qué me refiero con el término a cuentagotas, bien, pues que la pasión y la hostilidad que se vivía en El Nido se quedó en el pasado. Y no con usar el término hostilidad me refiero a ser violentos, sino a volver a ser ese público intimidante para cualquiera que se parara en este gimnasio.
Hace años, cuando los emplumados llegaron, yo expresé mis dudas en cuanto a si la gente podría responder para un deporte profesional nacional. Con el paso del tiempo sí pudo y callé la boca. La conocida apatía de los que vivimos en esta ciudad quedó de lado y en el 2005 vivió su mayor catarsis con el título de la LNBP.
Después de eso no sólo el equipo vivió una crisis severa, lo que sucedía en las tribunas también. Se dejó de ser la mejor afición del país. He tenido la oportunidad de conocer otras plazas y sin duda debo decir que Mexicali ostenta ese honor en el presente. El Auditorio del Estado es un hervidero cuando sus Soles juegan allá y realmente es un grupo de gente que espanta a cualquier rival que se pare allí. No sólo de ahora, desde las finales en la campaña anterior lograron imponer una presión impresionante, justamente a los xalapeños, para conseguir el campeonato, así como para llegar al Final Four de la Liga de Las Américas.
Así es lectores, si los Halcones quieren su segunda corona en el circuito nacional tendrán que recibir el apoyo de su afición, que estas personas vuelvan a ser ese conjunto que se sentía en El Nido hace tiempo, porque en la actualidad en mínimos espacios del recinto se puede sentir cuánto quieren a su equipo, pero la gran mayoría que va o es por moda o se ha vuelto conformista con lo que ve en la duela.
Y de paso debo decir que si se quieren autonombrar como el mejor público de la LNBP no es bien visto que duden de su equipo. Los campeonatos se deben ganar como sea, porque luego nos quejamos que vivimos en un estado mediocre, que no gana nada en el deporte profesional, y cuán malditos podemos ser que atentamos contra el único equipo que ha dado la cara en los recientes cuatro años por la entidad.
Aunque para finalizar, debo insistir en que si no se gana el campeonato de la Liga será una temporada de fracaso, porque el ser monarcas de la Zona Sur realmente ya no sabe, justo como lo afirmé cuando los emplumados fueron eliminados de la Liga de Las Américas.
Hasta la vista.

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