José Emilio Lobato Corrigeux
Comentario Abierto
Cuando compareció en su momento ante el Congreso del Estado la Secretaria de Desarrollo Social y Medio Ambiente fué cuestionada sobre el programa de verificación anticontaminante, principalmente sobre el universo de vehículos existente en la entidad , los ingresos que el programa representa a las finanzas estatales y su nivel de eficiencia.
La respuesta fue clara, un millón 54 mil vehículos de los cuales solo realiza su verificación el 32.8%, por lo tanto esa es la proporción de ingresos, un aproximado a los 80 millones de pesos contra 250 millones que debieran ingresarse por lo que se refiere al aspecto financiero, pero además, no se conocen las condiciones mecánicas en que se encuentra el 67.2% del resto de los vehículos del estado entre los que se incluyen los del transporte público en todas sus modalidades.
De tal manera que, pese a la obligatoriedad del programa, porque así lo establece el articulo 146 de la Ley Estatal de Protección al Ambiente, así como los artículos 40 y 41 de la Ley de Transito y Transporte del Estado y articulo 67 párrafo “Y” de su reglamento, , el incumplimiento es notorio, siendo un programa que se aplica desde 1990 a la fecha, adoptado como una medida preventiva y para animar el nivel de concietizacion ciudadana de los automovilistas, vino a menos irónicamente en el régimen del Ex Gobernador Patricio Chirinos Calero, quien antes de ocupar ese cargo fuera Secretario de Desarrollo Urbano y Ecología, pues a través de la Secretaría de Gobierno instruyó a la Sefiplan que no se exigiera el certificado de verificación anticontaminante en el trámite de pago de derechos vehiculares.
Las cifras expresadas por la Titular de la Sedesma Silvia Domínguez, fueron confirmadas posteriormente por el Coordinador Estatal del Medio Ambiente Licenciado Alonso Domínguez Ferráez, quien anunció que a partir del 2008 entrarían en operación patrullas ecológicas, para detectar a los vehículos que no cuenten con su engomado de verificación; realmente ignoramos como va ser instrumentado el mecanismo, pues dichas patrullas deberán contar con atribuciones legales y para ello habrá que hacer algunas reformas, pues actualmente quien tiene esa facultad es la Dirección General de Transito y Transporte del Estado, la cual por lo visto no cumple cabalmente con su cometido, es decir, existe discrecionalidad por parte de los agentes de tránsito para sancionar a los infractores y las razones son mas que explicables.
Posteriormente el Diputado Panista Antonio de Jesús Remes Ojeda, declaró ante los medios que tiene la idea de proponer la entrada en operación del “Programa Hoy no Circula” arguyendo elevados índices de contaminación ambiental por vehículos automotores, lo que resulta acertado que se preocupe por la defensa del ambiente, pero incongruente con la realidad pues no se sabe de donde obtiene la medición para saber si los índices contaminantes son o no elevados.
Lo congruente es primero fortalecer el programa de verificación anticontaminante para saber si una vez verificado el 100% de los vehículos en el Estado, este parque vehicular cumple con los limites máximos permisibles de emisión de gases contaminantes y si con esas variables, derivado de un monitoreo atmosférico en las ciudades del Estado con mayor numero de vehículos, la contaminación se encuentra en situación de riesgo por culpa de los automotores, se comiencen a tomar medidas.
Antes de llegar al extremo de aplicar el programa hoy no circula, debe tomarse en cuenta además las condiciones viales de las ciudades medias del Estado, pues un buen proyecto de eficientar vialidades, convertir a un solo sentido las mas amplias, construir pasos a desnivel, sincronizar semáforos, identificar y combatir los puntos de conflicto vial y la aplicación del programa 1 por 1 ayudaría a disminuir los niveles de emisiones contaminantes de vehículos.
Sin soslayar además que la experiencia con el Programa Hoy no Circula en la ciudad de México fue un fracaso, debemos recordar que la medida provocó que los automovilistas adquirieran una unidad extra de modelo atrasado con un dígito final diferente de placas, por lo que no es precisamente una medida eficiente.
En suma, que bueno que exista preocupación por la cuestión ambiental derivada del uso de vehículos automotores, sin embargo, antes de llegar a grados extremos, es importante adoptar medidas previas que puedan abatir los índices de contaminación ambiental, sobre todo porque los ciudadanos adquirimos un vehiculo para transportarnos, no para tenerlo guardado; nuestra responsabilidad está en tener nuestras unidades en buenas condiciones de funcionamiento y verificarlas para constatar que sus emisiones están dentro de los niveles de aceptación.
lo-corrijo@hotmail.com
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