martes, 27 de enero de 2009

La Democracia según el Artículo Tercero Constitucional

Vicente Luna Hernández

Es una realidad que la cultura política en nuestro país fue durante muchos años esperar lo que papá gobierno nos quisiera dar, los ciudadanos agradecían de manera entusiasta y tumultuosa las obras y acciones de gobierno que llevaban a cabo quienes detentaban el poder político en México, sin embargo, se dice que desde el terremoto de 1985 los ciudadanos tomaron la iniciativa de organizarse y coadyuvar a la solución de los grandes problemas que hieren y lastiman a nuestra sociedad.
Si bien es cierto que durante un proceso electoral le otorgamos nuestra confianza a determinado partido político y candidato – a través de nuestro voto-también es cierto que no debemos permitir que quienes nos pidieron nuestra respaldo actúen de manera patrimonialista y deshonesta con ese poder que les otorgamos, esperando pasivamente que el juramento ante la Constitución de “ Protesto guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos… y si así no lo hiciere, que la Nación y el Estado me lo demanden” de manera automática sea una realidad – aunque así debería de ser- cuando infinidad de veces son solo palabras huecas dichas sin ningún compromiso ético y social, palabras solo dichas por cumplir un protocolo ya establecido, es ahí cuando se requieren de ciudadanos mejor informados y más activos en la vida política de este país.
La democracia no solo se construye acudiendo a emitir nuestro voto, la democracia es una tarea diaria que debemos de llevar a cabo ciudadanos y gobierno, si entendemos la democracia no solamente como una estructura jurídica y un régimen político, sino como un sistema de vida fundado en el constante mejoramiento económico, social y cultural del pueblo como lo señala textualmente el inciso A del articulo 3º de nuestra Constitución Federal, si respetamos a quienes piensan diferentes a nosotros, si respetamos las leyes que propicien un mejor entendimiento entre todos, si escuchamos al débil como al poderoso, al rico como al pobre, si nuestros gobernantes llevan a cabo su trabajo de manera transparente y responsable y donde un desvío de los recursos públicos para beneficio personal sea castigado más allá de venganzas políticas o personales, a una mejor retribución al trabajo realizado, a una mejor distribución económica y social producto de nuestras riquezas naturales, a ese tipo de democracia aspiramos los ciudadanos mexicanos y ese debe ser el compromiso fundamental de todos los partidos políticos – independientemente de su ideología-, y deje de ser necesario manifestarse públicamente bloqueando calles o carreteras para recibir algún beneficio social.
Los ciudadanos – hombre, mujeres y jóvenes-, de manera organizada, solidaria y responsable debemos de hacer uso de los canales institucionales para manifestarnos y ser escuchados por nuestros gobernantes y también contribuyamos de manera corresponsables en tener buenos gobiernos, un ciudadano informado y organizado es difícil que sea condicionado a votar por determinado partido político para recibir a futuro o por recibir algún beneficio producto de sus impuestos, a esa democracia se aspira más allá del partido político que tenga la responsabilidad en cualquiera de los tres niveles de gobierno.
De manera tajante lo ha señalado el gobernador Fidel Herrera Beltrán con relación a las buenas acciones de su gobierno “es el cumplimiento de un deber contraído”.
P.D.- Con el ánimo que el inicio de las precampañas y campañas electorales fortalezcan el plan anticrisis del gobierno federal… escribiré otro día.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

bueno pues me parece que este texto esta muy bien redactado y pones en claro tu punto de vista me parecio que te falto informacion pero es muy buena y me gusto mucho.

Anónimo dijo...

Gf