¡Estatuas!

Salvador Muñoz
Los Políticos

Estimado Tío Fide…
Permítame no dirigirme a usted como Señor Gobernador, porque si bien respeto las investiduras, es más valiosa la persona por ser como es que por ser lo que es.
Llega a mi correo información de que usted planea mandar a hacer 120 estatuas de su figura... por supuesto y apuesto que dicha información no busca más que causar malestar en quien la lee ¡y lo logra!
Aunque sé que es mentira tal cosa, no está de más pedirle, solicitarle, que considere (si fuera cierto) que no se acerque por ningún momento a la línea del tirano, del dictador.
A lo mejor usted recuerde a Turkmenbashi (Guía de los Turcomanos), como así se hizo llamar un “presidente” de Turkmenistán: Saparmyrat Atayevich Niyazov, quien entre todas las cosas locas que hizo, está un monumento, el de la Neutralidad, que remata en su punta con una estatua de él, que se mueve como girasol, en aras de que siempre le dé el sol en la cara y no caiga sombra alguna sobre su faz.
Hubo muchas estatuas de oro que también mandó a hacer mientras fue presidente. Por intentar darle una identidad a su pueblo, todo lo pintó (no de rojo) con su apodo: Escuelas, universidades, un pueblo, aeropuertos, incluso hasta un meteorito llevaban el nombre de Turkmenbashi.
Créame que usted tiene el privilegio de ser Gobernador de un pueblo noble, valiente, alegre, que sabe agradecer la humildad, la sencillez, la bonhomía del gran político que, de seguro hay en usted.
No se permita ni permita que ningún alcalde, ninguna asociación, ningún empresario, ningún grupo político, ¡nadie! lo arrulle con el canto de la lisonja, plasmado en una estatua de bronce o cobre… o cualquier otro material.
Aléjese de quienes sólo saben decir “Sí señor”, ponerse a sus órdenes, a sus pies, a los que lo alaban, “tapetes” sin criterio, porque jamás tendrán el valor de disentir un error suyo… y es usted humano.
¡Vaya! Su trabajo está plasmado. Su trabajo se ve, se siente… no necesita de estatuas.
Pero, si en un momento el arrullo de ese canto parece adormecerlo, permítame unas líneas que un periodista, desde la cárcel, escribió a su esposa:
“No barruntamos que si alguien se sueña estatua, ése es el tirano. No sabe que al convertirse, en vida, en más mármol que carne humana, sensible y perecedera, el resto de los hombres comienza por temerle, luego por despreciarle, y más tarde burlarle. Lo que empieza con solemnidad de himno para el héroe –si es un tirano el elegido– termina con fanfarrias de circo para el devenido saltimbanqui, caricatura de lo que fue heroismo”.
Las líneas eran contra Fidel… Castro, por supuesto.
El autor, Manuel Vázquez Portal.
Claro que, mejores palabras son éstas, cuando el panista Francisco Avila, alcalde de Boca del Río, pretendía colocar una estatua de Vicente Fox:
“Es algo que no le sirve a nadie, ni le sirve al presidente Fox ni le sirve a la nación ni le sirve a Veracruz ni le sirve a la sociedad”.
El autor de esta frase… usted.
Ya tenemos a un loco que manda a hacer sus biografías en estampitas… no entre a ese mundo… no subestime a su gente, a su pueblo… si bien, es cierto, no es monedita de oro, estoy seguro que hay más gente que lo quiere, lo estima, que aquella que no.
Esperando al tiempo que me dé su respuesta en ausencia de estatuas, quedo de usted, como siempre, su amigo Salvador.

¡Rostros conocidos!
Temporada de precandidatos… aparecen rostros nuevos y conocidos.
Cuando te encuentras a gente que quiere participar en la contienda electoral y sabes de su trayectoria, pero trayectoria de a de veras, de ésa que es de picar piedra, y no hechiza que muchos jóvenes dicen tener en un curso Fast-track de seis años, da gusto verla de nuevo, como a esos amigos que tienes años de no ver y de repente, a la vuelta de cualquier esquina, allí están.
Es el caso de Fernando Arteaga Aponte, delegado de la SEV en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río.
Lo curioso es que Fernando no ha dicho esta boca es mía. Son sus amigos los que dicen que les gustaría ver como candidato a diputado a Arteaga, quien se mantiene, como todo viejo lobo de mar, sereno, institucional, atento a las labores encomendadas en la SEV.
El curriculum de Arteaga es amplio, extenso, que habla de un hombre comprometido con su partido. Ojalá la Revolución le haga justicia ahora que este abanico de precandidatos, conforme se acerca el día de la Convocatoria tricolor, se abre más y más…
¡Suerte Arteaga! Espero verte en la contienda…

¡Pegamento!
En la zona de Joachín, por La Mixtequilla, a dos hombres les interesó la idea de Tavo Payán, presidente de la Fundación Colosio de Boca del Río, sobre la readaptación social con trabajo en el campo. Tienen interés, claro, porque quieren invertir en sembrar tubérculos como la malanga y yuca… si no mal recuerdo, de la yuca se produce el pegamento, del que la familia Padrón, de Yucatán, hizo el gran negocio… si se pone abusado el amigo Payán ¡su proyecto, ahora sí, puede pegar!

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