viernes, 1 de octubre de 2010

Afrodisiacos y Demandas

Brenda Caballero
Números Rojos

Siempre he escuchado de la vox populi que los mariscos son un potente afrodisiaco, incluso, si vas a tener un ¡graaan encuentro!, te recomiendan los mariscos como antesala, claro lo “demás” lo tienes que hacer tú.
Alguna vez leí que reciben ese nombre de Afrodita, diosa del amor, de la que cuenta la mitología griega que nace del mar después de que Cronos castró a su padre Urano y lanzó sus genitales al océano, aunque Afrodita no hace referencia a un amor romántico, bueno y puro, sino más bien al Eros, a esa atracción física o sexual.
Pero volviendo a los afrodisíacos, podríamos decir que son los elementos que nos fomentan potencia e instinto sexual. En pocas palabras: lo que nos pone “sensuales”, “cachondos”, “ganosos” o al estilo tata “¡quiero mi cocol!”
Incluso se les ha relacionado también por su forma: fálica, y provocativa; similares a los genitales masculinos o femeninos, razón por la cual a través de la historia numerosas culturas vieron en ellos la causa del deseo sexual (camarones, almejas, ostiones entre otros).
Aquí en Veracruz (y más hacia el sur), se dice que la gente tiene la sangre caliente. Es un decir, ya que el clima y la tierra son más cálidos, lo que es cierto es que mis paisanos son más desinhibidos en su forma de vestir, de hablar… y en todo lo demás, ¡pues también!
Aún recuerdo los tegogolos con limoncito y pico de gallo originarios de la Laguna de Catemaco, famosos por dos poderosas razones: porque dijera el primo de un amigo, “son más poderosos que el viagra” y porque te dan unos gases que ¡pa’ qué le cuento!
Pero volviendo a la comida de Veracruz, usted puede comer almejas, ostras, ostiones crudos, bañados con limón o bien cocinados; camarones, langostinos, cangrejos, acamayas, pescados, ya que según dicen los que saben, contienen proteínas que pasan rápidamente a la sangre, lo que a su vez ayuda al funcionamiento hormonal. Además tienen elevadas tasas de una sustancia llamada “ciclopentano perhidrofenantreno”, elemento principal en la estructura básica de todas las hormonas sexuales masculinas y femeninas.
¡¡¡Ahhh!!!, esta lectura afrodisíaca no es porque “hoy toca”, dijera Germán Dehesa que en paz esté, ni porque yo sea presumida, sino porque en Washington están sometiendo a pruebas microscópicas los mariscos, especialmente el pescado, camarón y otras especies marinas, provenientes del Golfo de México, para detectar cualquier residuo de petróleo ocasionado por la compañía British Petroleum (BP).
Pero no se alarme, puede seguir comiendo pescados y mariscos para ayudar a su libido, pues las autoridades sanitarias aseguraron que no hay evidencia de que químicos se alojen en la comida de mar, pero por si acaso están desarrollando pruebas instantáneas de detección.
Según el científico marino George Crozier, director el Laboratorio Marino Dauphin Island de Alabama, la biología es crucial con respecto a los mariscos; hay especies marinas que eliminan la contaminación de petróleo mucho más velozmente que otras. Los peces lo eliminan más rápidamente que ostiones, almejas y cangrejos, mientras que el camarón está en un punto intermedio.
Imagínese, apenas el 20 de abril acaba de pasar la explosión en la plataforma Deepwater Horizon, que dejó 11 operarios de BP muertos y provocó el derrame de 4.9 millones de barriles (780 millones de litros) de crudo al Golfo de México, siendo considerada la peor catástrofe ambiental de la historia de Estados Unidos, aunado a las pérdidas económicas de los veracruzanos por el Huracán Karl y la tormenta tropical Mattew ¿Habrá crecimiento económico?
En esta ocasión aplaudo a las autoridades de los estados de Veracruz, Tamaulipas y Quintana Roo, porque son los primeros gobiernos extranjeros en interponer ante una corte federal en San Antonio, Texas, demandas contra las compañías British Petroleum, Transocean y Halliburton, por daños causados por el reciente derrame petrolero en el Golfo de México y por afectar sus intereses como entidades costeras reclamando compensaciones financieras ya que los 20 mil millones de dólares del fondo de compensación dispuesto por British Petroleum no incluye a entidades extranjeras.
¡No cabe duda que hay que buscar recursos de donde sea y como sea! Sinceramente prefiero el sexo que las demandas, la cama que los juzgados aunque no coma mariscos antes del “cuchi-plancheo” pues creo que una mirada amorosamente cachonda antes del “ prau prau” es el mejor afrodisíaco, ¿oh no?...

brendacaballero1@hotmail.com

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