miércoles, 13 de abril de 2011

Mello

Salvador Muñoz
Los Políticos

El miedo es inherente al hombre como el pez al agua, el aire al águila o el gato al ratón.
De una u otra forma todos tenemos un miedo.
De más está decirles mi miedo a las ratas o a todo lo que tenga que ver con la película “El Exorcista”.
Claro, los tiempos cambian. Hoy, sigo teniendo los mismos miedos pero acumulados con otros que al final de esta columna, le daré en forma de lista si un día decide espantarme.
Veo en la prensa un trabajo que titularon “Dime en qué zona del país vives y te diré a qué le tienes miedo”.
Curioso, leí la nota y me llama la atención dos omisiones.
No veo a Veracruz y tampoco a Tamaulipas.
En la nota aparecen Torreón, Monterrey y Juárez entre las ciudades donde hay temor por la narco-violencia.
En la Ciudad de México, Tijuana y Guadalajara la gente teme ser asaltada con violencia.
El estudio hecho por la Encuesta Nacional sobre Discriminación (Enadis) comenta que a mayor inseguridad, mayor intolerancia.
Insisto:
Me llama la atención la omisión de Veracruz y Tamaulipas.
Siendo optimista por mi lado jarocho, pues qué bueno que Veracruz no esté dentro de esta encuesta aunque no hay que confiarse.
A ciencia cierta, yo temo un robo a mi casa. Si bien tomo todas las medidas necesarias para que esto no ocurra, hay detalles que escapan a mi control... los vecinos.
Platicaba hace unos días con un funcionario de Seguridad Pública y llegamos a la conclusión de que nuestra seguridad empieza en uno mismo.
Mis vecinos entendieron que no tengo ningún Trastorno Obesivo Compulsivo por mantener cerrada la puerta del edificio después de que dos de los departamentos fueran robados. Duele, pero se aprende. Hoy me encuentro a la hora que llegue, con la puerta cerrada... nada más falta que le pongan luz a sus entradas.
Creo que el veracruzano tiene otros miedos muy distintos a los que viven las ciudades citadas. Sin embargo, el hecho de que no aparezca Veracruz en esa encuesta me tranquiliza pero a la vez, el que no esté Tamaulipas, me intriga.
Sin ser tamaulipeco, sencillamente a mí me da miedo, no sé a usted, sólo de pensar que la cifra 120 continúe “in crescendo”.
Me refiero con 120 a los muertos que han aparecido en San Fernando sin contar con el más de medio centenar de centroamericanos ejecutados que hubo el año pasado.
Eso sí da miedo.
Pero me aterroriza cómo los políticos utilizan nuestros miedos.
Moreira diciendo que cuando gobernaba el PRI, el Chapo estaba en la cárcel. Senadores del PAN respondiendo que el PRI gobierna a los estados con más crimen.
De bravatas estamos llenos... ojalá Héctor Yunes no siga con esa línea de ataque y aporte más propuestas.
Pero, respiremos un momento. Xalapa es una bella ciudad (gol para Elizabeth) donde todavía podemos caminar tranquilos y si tengo que tener “cuz cuz” es a lo siguiente:
* me da “mello” encontrarme en un restaurante a Toño Flores Vargas bien “pedernal” y que me la haga de tos...
* me da “mello” ir en carro por el centro y justo al pasar por la Plaza Lerdo, se me atraviese una manifestación...
* me da “mello” que un agente de Tránsito me haga la parada... por eso prefiero nomás saludarlo y emprender veloz huida ante el temor de una mordida...
* me da “mello” encontrarme a Ainara Rementería en mis sueños ¡y que se transforme en Claudia Ramón Perea!
* me da “mello” ver la mano de “Juanelo”, el diputado por Coatepec, por el cachito de dedo que le falta... bueno, ¡una uña menos!
* me da “mello” que el titular de Becas no quiera aceptar las renuncias voluntarias para evitar congelar las plazas y así poder repartir esa lanita entre sus recomendados...
* me da “mello” cada vez que veo por el retrovisor a un camión urbano y por inercia, me encomiendo al Señor...
* Claro, por supuesto, siempre tengo “mello” de encontrarme a alguien más pendejo que yo...
* Pero me daría más “mello” que no pudiera andar por las calles de Xalapa a cualquier hora...
Y usted, a qué le tiene “mello”...

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