Entre lo utópico y lo verdadero
Sentado cómodamente en su sillón de piel negro, la ira, el coraje y sentimientos de venganza lo llenan de mal sanos pensamientos. Su hambre de desquite lo hace perder la cordura y también, el temple. Fracasar de esa forma, fue una ofensa para quien desde hace muchos años, dominaba todo el panorama político desde su trinchera opositora al régimen estatal veracruzano. No había nada que se moviera u opinara, sin la aprobación de él. En años atrás, el monaguillo de la Iglesia de San José, ahora flamante político panista “puro”, es hoy quien ha perdido el piso, los amigos y lo peor, la dignidad. Alejandro Vázquez Cuevas, el rey de las máscaras…
Ahora, debe tener una salida digna, para demostrar a sus súbditos que él sigue siendo el que manda. Busca afanosamente negociar su derrota con Josefina Vázquez Mota. A la candidata presidencial la presiona, intimida y hasta amenaza. Exige cobrar facturas y engaña argumentando haber sido el responsable del triunfo de Josefina. Lamentablemente para él, en Veracruz triunfó Cordero. Su mentira fue descubierta. Pero no importa, mitómano tal cual es y obedeciendo más a sus entrañas, que a la inteligencia, busca en la cúpula política nacional, obtener una diputación federal plurinominal. Lo malo, las cifras no ayudan, ni el resultado estatal tampoco.
Y busca más. Debemos primero conocer la raíz del problema y así, entenderemos las causas y efectos. Sabía usted inteligente lector el por qué renunció Alejandro Vázquez Cuevas a la campaña del excandidato del PAN-PANAL a la Gubernatura de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares… ¿No?, le cuento…
Recuerdan la declaración de Pipo el 21 de mayo del 2010, en la cual, en la mayoría de los medios de comunicación se leía: “En ese grato coincidir, acordamos que no soy la persona idónea para coordinar la campaña de Miguel Ángel Yunes Linares por unos sucesos que prefiero reservarme”… Durante varios días, se manejó la versión de una posible traición a Yunes Linares, quien no quiso hablar de la verdadera razón de lo sucedido. Ni tampoco, del despido fulminante del exdirigente estatal. Rápidamente, por acuerdo interno, se nombró a Danilo Alvízar Guerrero como el nuevo Coordinador de campaña panista, para evitar posibles fracturas internas en acuerdos y pactos… Aquí, la crónica de la verdadera razón…
Suena el celular privado. Rápidamente, contesta Enrique Pérez Rodríguez, delegado del ISSSTE en Veracruz y uno de los hombres de más confianza de Miguel Ángel Yunes Linares. Era un “amigo” que le informaba la llegada de tres camionetas de lujo, a la casa del exdiputado federal y hoy, Secretario de Gobierno Gerardo Buganza Salmerón, ubicada en Córdoba, Veracruz. En ellas, descendieron caras conocidas, entre las que destacaba, el gobernador del estado de Guanajuato Juan Manuel Oliva Ramírez y Alejandro Vázquez Cuevas, Coordinador de campaña de Yunes Linares, entre otros. Buganza los recibió con mucho interés y gusto…
En ese momento, Pérez Rodríguez llama a sus contactos del aeropuerto para confirmar la llegada del avión privado del Gobierno de Guanajuato. Y efectivamente, era correcta la versión. Le dieron la hora de llegada y en qué vehículos se trasladaron, confirmando ser las mismas camionetas estacionadas frente al domicilio del expanista cordobés…
Lo que temía Enrique Pérez era la reacción de Yunes Linares al conocer el evento. Y lo peor, no haber sido notificado por su flamante Coordinador General de Campaña. Y no le extrañaba nuevamente otra traición, pues el propio Pipo Vázquez Cuevas fue uno de los Consejeros Nacionales, al igual que Enrique Cambranis Torres, actual dirigente estatal de Acción Nacional en Veracruz quienes votaron en contra de Miguel Ángel Yunes para ser designado como candidato del PAN a la Gubernatura de Veracruz…
Y no tuvo más remedio, que decirle a Yunes. Las nuevas noticias provocaron ira y enojo del exsecretario de Gobierno en tiempos chirinistas. Es conocido por todos sus amigos, que el oriundo de Soledad Doblado es de “mecha corta”… Entre gritos y enojo, Enrique Pérez puso orden. Le pidió a Yunes no trasladarse a Córdoba y ni tampoco armar un escándalo. Le advirtió tener cabeza fría y pensar muy bien las cosas.
Y se dio la llamada. Yunes Linares le habló a Pipo Vázquez para conocer su versión de los hechos. Rápidamente, le contestó desde su celular. Miguel Ángel lo saludó y le preguntó dónde estaba, pues quería verlo. El panista “puro” le respondió que se encontraba en Xalapa realizando algunas diligencias y actividades propias de la campaña para organizar futuros eventos proselitistas. Entre palabras entrecortadas y titubeos, Pipo no dijo la verdad de su ubicación ni de estar en una reunión secreta y a puerta cerrada, con vitales personajes políticos, entre ellos, Gerardo Buganza Salmerón.
El enojo fue mayor por la infantil excusa. Yunes Linares pensó en ese momento, que la experiencia política debe imponerse y reflexionar ante una crisis. En eso, optó por la mejor opción: Hablarle al gobernador de Guanajuato, Juan Manuel Oliva Ramírez para saludarlo. Dos timbrazos se escucharon y rápidamente, en el celular estaba a la escucha el Mandatario Estatal, quien efusivamente lo saludó y extrañado le dijo sentir mucho no poder estrechar su mano. Expresó en ese momento, estar reunido con Buganza Salmerón en su casa de Córdoba y fue llevado, por el excelente anfitrión Alejandro Vázquez Cuevas… Además, Pipo Vázquez ya le había comunicado, que por cuestiones de agenda proselitista, Yunes Linares no pudo recibir al Ejecutivo Estatal guanajuatense en el aeropuerto, ni tampoco verlo durante su estancia en tierras veracruzanas…
Miguel Ángel Yunes le comunicó, como buen político, que ante su “abarrotada agenda proselitista”, hizo un espacio para verlo. Se citaron en la caseta de Paso del Toro, cerca del Puerto de Veracruz. Ahí, frente a unas tiendas comerciales… Llegó el convoy de camionetas de lujo y se dio la reunión… Entre abrazos y alegría se saludaron los dos amigos. Pálido y enrojecido de la cara, descendió Alejandro Vázquez Cuevas de la camioneta que trasportaba al Gobernador de Guanajuato. Y rápidamente, para no perder tiempo, Yunes le dijo al chofer de Oliva Ramírez que quería manejarle al señor Gobernador y se subiera como escolta en una de las camionetas de atrás… Y así fue…
En el trayecto de esa caseta hasta el aeropuerto, nadie supo lo que hablaron. Sólo Oliva, Yunes Linares y el propio Pipo. Lo que se conoció horas después, fue que el candidato del PAN-PANAL a la Gubernatura de Veracruz había despedido a su Coordinador General de Campaña de manera fulminante… Evidenció con hechos que Alejandro Vázquez Cuevas estaba jugándole las contras de manera abierta…
Y Pipo nunca quiso decir el por qué le pidieron su renuncia. Él alegó haber renunciado por cuestiones de ética y decoro, pues dijo, que Yunes Linares le pidió hacer cosas, que van más allá de sus valores y creencias… Una salida fácil para no alegar haber pactado con Fidel Herrera Beltrán y Gerardo Buganza Salmerón de ser el mayor operador político para boicotearle la campaña de Yunes. Eso explica, la incrustación de gente espía en la logística y comunicación social. Poner a personas claves para observar, informar, con reportes y fotografías enviadas al C4, sobre las actividades diarias del excandidato panista…
Todo eso, que aquí les cuento, inteligentes lectores, Pipo ya lo olvidó…Ante la derrota descomunal en la elección interna a la Senaduría, busca a quién echarle la culpa. Lo que también olvida, es su imperiosa necesidad de amarrar una diputación federal plurinominal, como salida airosa. Lo que además olvida, son los resultados del triunfo de Fernando Yunes Márquez a la candidatura para Senador, mismos, permiten a “Chiquinando” poner a gente de su confianza en puestos estratégicos en el Comité Estatal del PAN… Eso, lo tiene con los “pelos de punta” a Pipo y sus aliados han declarado en abierto, no permitirán la entrada del grupo Yunes al PAN Estatal y así, perder el control total, que por muchos años, ha sido el reinado de Alejandro Vázquez Cuevas… Como vemos, esto no es sólo una candidatura… Es el control del partido estatal azul, de las prerrogativas, dineros y también hay que decirlo, de futuras decisiones en candidaturas a Diputados Locales y Alcaldías, que eran negociadas por el propio Pipo y su gente. La estrategia pasada era poner a gente de bajo perfil o boicotearle la campaña y vender eso, al candidato de PRI, por varios millones de pesos…
Pipo ha vendido candidaturas por no menos de tres millones de pesos y una de ellas, la capitalizó en diez millones de pesos… Testimonios de empresarios revelaron esto que aquí escribimos y además, oferta Regidurías, Sindicaturas y para agentes municipales… Todo, bien vendido y al mejor postor…
Por lo pronto, Alejandro Vázquez Cuevas ya anunció que impugnará el triunfo de Fernando Yunes Márquez. El motivo, enrarecer el ambiente político y poner piedras en la campaña de Josefina Vázquez Mota, a quien, en correos en la Internet, enviados desde el Comité Estatal del PAN en Veracruz y gente cercana de Pipo, señalan de traidora a la candidata presidencial por haberse reunido con Miguel Ángel Yunes Linares, después de la derrota del Pipo en el estado…Su finalidad es presionar, con el apoyo de padrinos políticos y parientes acaudalados para obtener una diputación federal plurinominal y además, impedir la entrada del bloque yunista en el control del partido… Lo lamentable, todo lo realizado o declarado en contra de Josefina, hundirá aún más a Pipo en el descrédito y la vergüenza con que goza por parte de una militancia panista cansada…
Notita importante: Grave situación se encuentra cierta dependencia estatal, ya que la Secretaría de la Función Pública Federal está realizando auditoría a ésta, por los malos manejos y evidente desvío de recursos… Pone en aprietos al empleado de los veracruzanos de Javier Duarte de Ochoa, quien cree que pactando con el Gobierno Federal, lo exime de cualquier responsabilidad sobre el quebranto económico en que está el estado de Veracruz…
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