lunes, 23 de julio de 2012

Ya extraño a Tío Fide

Salvador Muñoz
Los Políticos 

La nota en sí, es de ésas que uno pudiera asumir como una vacilada de no ser porque la fuente, Plumas Libres, es un portal de noticias con mucha seriedad en la información que maneja... abusando de la amistad que me brinda Jorge Morales, su director, retomo tal cual algunos párrafos:
“El gobernador Javier Duarte de Ochoa impulsa una legislación que busca castigar a los medios de comunicación que ‘publiquen mensajes en contra’ de partidos o candidatos. A estos se les negará el acceso a convenios con organizaciones políticas en el próximo proceso electoral del 2013. Incluso, quienes no cumplan con esta disposición serán sancionados”.
La pretensión está contenida en el artículo 48, capítulo II, de la Iniciativa de Reforma de Ley al Código Electoral que presentó el Gobernador Javier Duarte al Congreso local.
Actualmente, en el Artículo 50 del Código Electoral local, en sus párrafos, sólo se habla de la contratación de espacios publicitarios y el registro ante el IEV de los medios así como sus tarifas que deben ser económicas.
Sí... dije “espacios publicitarios” y con ello entonces se entiende que el partido o el candidato debe comprender que está adquiriendo una dimensión, una medida, un sitio dentro del universo que implica el medio impreso o electrónico... pero a veces se confunden y creen comprar todo el medio o a la conciencia del dueño... ¿o lo hacen?
Pero si es cierto lo que pretende el Gobernador, pareciera que Javier Duarte busca aplicar la máxima que hiciera célebre a José López Portillo cuando enunció “No te pago para que me pegues”.
Es más, quitándonos las caretas, la reforma de Ley de Duarte de Ochoa es una norma no escrita que muchos medios de comunicación y poder llevan al pie de la letra... ¿cómo “pegarle” a quien me da convenio? Son medios que usan al medio para tener medios y hacerse medio...penitentes con la realidad.
El asunto es que a veces el convenio se malinterpreta para entenderse como complicidad y entonces, aberraciones, omisiones, actos de prepotencia, o simplemente ausencia de trabajo, son ocultos al que se supone es motivo y fuerza mayor para la génesis del medio y del poder: el ciudadano.
Ahora bien, supongamos que esa Ley se aprueba bajo el entendido de que tenemos un Congreso local donde se piensa con las nalgas y se actúa con el dedo (mayoría priista pues), el hecho de que sea Ley, no implica que esté bien y la historia está plasmada de cantidad de pendejadas como la que se pretende o peor, nomás baste recordar a Crisóstomo y su prohibición de la risa...
Se imagina que se diera una manifestación contra un candidato o un partido por estudiantes como ocurrió hace poco en la Ibero, ¿los medios serían omisos (¿máaaas?) ante el riesgo de que les quiten un convenio? ¿la noticia sería relegada por un fajo de billetes? ¿quién sería el censor de la nota para ver si es en contra o sólo informativa?
Es tan fácil entender que ningún Código puede estar por encima de la Constitución y dicha Ley parece ser más un intento de ahorcar la Libertad de Expresión de los diversos medios de información que a su vez, callaría a la voz de entidades, agrupaciones, del ciudadano común que puede estar en contra, diferir, o simplemente contravenir con un partido o candidato que puede representar a su juicio, un sistema autoritario, prepotente y sobre todo, pendejo.
Es por eso que cuando se ve esas noticias, uno quisiera que fueran más vaciladas para entonces evitar pensar en frases como éstas: viendo a Javier Duarte, ¡ya extraño a Tío Fide!

1 comentario:

Anónimo dijo...

http://www.animalpolitico.com/2012/07/propone-gobierno-de-veracruz-castigar-a-los-medios-que-hablen-contra-politicos/
esperamos su analisis