Marco Antonio Aguirre Rodríguez
Místicos y Terrenales
En definitiva, los Yunes, tanto los dos priistas como los panistas, están ya en franca lid hacia la candidatura por el gobierno del estado para el 2016.
Incluso de Héctor Yunes se ha insisto en que se prepara para asumir la gubernatura de estado en caso de que Javier Duarte de Ochoa sea llamado al gabinete de Enrique Peña Nieto.
Lo mejor o lo peor de esta versión es que tiene tres vertientes y los que apuntan por cualquiera de las tres de hecho son muchos, pero en verdad muchos.
1. Están los que desean que Javier Duarte sea incorporado a cualquier puesto federal con tal de que deje el gobierno del estado. Estos difunden la versión de que el ahora gobernador de Veracruz será incorporado a la dirección de algún puesto secundario, en donde quedará como un burócrata más.
2. Están los que dicen todo lo contrario, que Javier Duarte será llevado al gobierno federal por haber demostrado un gran papel en Veracruz al mantener un estado prospero y boyante a pesar de haberlo tomado en condiciones deplorables.
3. Existen quienes aseguran que Javier Duarte mismo se ofreció ante Enrique Peña Nieto para ocupar cualquier cargo, buscando una salida al gobierno del estado de Veracruz, porque cada día le cuesta más mantener el gobierno.
Entonces, de la misma forma, lo mejor o lo peor es que cada una de estas versiones tiene a tres tipos de políticos apoyando la versión, y no precisamente todos los que enarbolan una tendencia son del mismo grupo político.
1. Los que dicen que a Duarte lo quitarán del poder son los que desean que salga ya, porque lo sienten como un mal, terrible gobernador. Estos son los que dicen que lo pondrán en cualquier puesto sin importancia y están dispersos por todo el mapa del estado.
2. Quienes afirman que Javier Duarte será llevado para apuntalar el equipo de Enrique Peña Nieto, son de los cercanos precisamente al gobernador. Ellos están dejando correr la versión de que ocupará un buen cargo y entre estos se notan dos vertientes: la de quienes arman justificaciones “por si acaso” y los que piensan que realmente puede ser colocado hasta en una secretaría de despacho y ellos quedar como altos funcionarios federales.
3. En cambio los que manejan que Javier se fue a ofrecer al gobierno de Peña Nieto son algunos de los múltiples que se dicen cercanos al próximo presidente de la República y que han sido maltratados por el gobernador y/o por su círculo cercano; estos dicen tener su información directamente de las oficinas de Peña Nieto.
Por lo pronto, lo mejor o lo peor, es que Javier Duarte no se va; y en esta cuarta corriente están quienes piensan que se queda no tanto porque haya hecho un buen papel como gobernante, si no porque no lo quieren en el equipo de Peña Nieto, porque consideran que durante el proceso electoral jugó en contra.
Por lo pronto Javier Duarte tiene una relación bizarra con los tres Yunes.
Para comenzar, ha tenido reuniones con Miguel Ángel Yunes, lo cual reconoció, y dijo que no tenía ningún problema en aceptar esto. ¿En calidad de qué se ha reunido con Miguel Ángel Yunes?.
Sería interesante saberlo para conocer la preponderancia que le da al todavía panista (aunque existen versiones de que ahora está buscando irse hacia el PRD).
Miguel Ángel Yunes para nada ha bajado la intención de buscar la gubernatura de Veracruz para el 2016.
¿Y también se ha reunido con los otros Yunes?
Héctor Yunes asumió en cambio una defensa a ultranza del gobernador después de que se difundió un correo electrónico en el que se anunciaba que Javier Duarte partiría hacia el DF con el gobierno de Enrique Peña Nieto y que el ahora senador se quedaría como gobernador interino.
Una versión del porque se dio esto, el desmentido, fluye en el sentido de que a Héctor Yunes le llegó una llamada reclamándole que miembros de su equipo eran los propaladores de la versión y en consecuencia le exigieron que desmintiera públicamente la versión.
Parte de esta nueva filtración indica que a Héctor Yunes le llamó alguien distinto al gobernador Javier Duarte, aunque con raíces en Veracruz, pero con suficiente fuerza como para hacerlo ponderar que sí debía desmentir la especie.
Y es que dicen (a mí no me consta) que algunos colaboradores de Héctor Yunes sí han dicho que sería mucho mejor como gobernador que Javier Duarte.
Y es que si en este momento tuviera que escogerse candidato al gobierno del estado Héctor Yunes está mucho mejor posicionado a nivel federal que quien sería el candidato de los nietos de la fidelidad, el alcalde de Tuxpan, Alberto Silva.
Pero en cambio hablar de mejor posicionamiento entre los grupos de la federación que su pariente, el otro senador Yunes, José, ya es cuestión de revisar.
José Yunes Zorrilla tiene la ventaja de haber conseguido la comisión de Hacienda en el Senado, con todo el apoyo de –dicen sus allegados- tanto del coordinador de la fracción priista del Senado, Emilio Gamboa Patrón, como del hombre fuerte del peñismo, Luis Videgaray.
Los Yunes, pues, son quienes ya desde ahora pintan como posibles aspirantes a la candidatura gubernamental y como los fuertes por las diversas corrientes políticas.
Pero tendrán que esperarse al 2016 y prepararse por lo pronto para la batalla del 2013.
Juegos de místicos.
En esos los terrenales no entramos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario