Números Rojos
¡Por eso no me gusta comprar un pino natural! dice el hombre, ante el triste escenario de los pinos arrumbados en banquetas y calles.
Indiscutiblemente no puedo refutar tal argumento, ante el abandono de los compradores de pinos naturales ¿Por qué tirarlos a la calle después de que alegraron y aromatizaron tu casa más de un mes?
Nuestro arbolito permanece aún en casa. Él quisiera conservarlo allí todo el año, para no botarlo o tirarlo a la basura, mas yo no apoyo la idea ¡No me imagino un árbol en el centro de la sala los 365 días del año! Bueno, a lo mejor en primavera pudiera ponerle flores, en verano fotos de las vacaciones, en otoño pintarlo de dorado y para Hallowen adornarlo con telarañas, fantasmas y calabazas, ¡pero no es tan fácil cuando vives en 65 metros cuadrados!
Luego entonces, lo más lógico es tratar de darle un digno lugar de descanso: “reciclarlo”.
Hace exactamente una semana, en el parque de Los Berros, nuestras autoridades federales, estatales y municipales dieron inicio “supuestamente” con esta actividad, incluso denominaron al Programa “Recicla tu Navidad”, del 7 de enero al 14 de febrero, la cual tiene la meta de recolectar para este año, 50 mil arbolitos en todo el estado.
Pero en Xalapa, más de una persona acudió con su pino a alguno de los 13 centros de acopio de los que en dicho acto y medios de comunicación se dieron a conocer, sin embargo, no estaban en funcionamiento; incluso, al preguntar a los empleados de algunos centros comerciales, ni siquiera enterados estaban y lo único que decían es que no tenían indicaciones, pues no se habían puesto las tarimas para llevar a cabo dicha recolección.
Ante tal incertidumbre y confusión, hace unos días, el Director de Recursos Naturales de la Secretaría de Medio Ambiente del Gobierno Estatal, Héctor Hernández Andrade, tuvo que “explicar” el funcionamiento de los Centros de Acopio, deslindándose (diría yo), pues hablaba de que era competencia de las autoridades municipales coordinarse con los centros comerciales.
¡Óigame, pues no es un trabajo en equipo! ¡Si el Ayuntamiento no puede ni con la basura! Bueno, con el cobro anual sí, mas no con la recolección.
Hernández Andrade explicaba que, efectivamente, no estaban funcionando todos los centros de acopio como se había pronosticado, pues algunos, como los Chedraui Museo y Cristal, no tenían espacio; entonces, me pregunto ¡dónde pusieron todos los árboles que vendieron! ¿En ese momento sí había espacio?
¿No se supone que como Autoridades deberían gestionar el apoyo de reciclaje entre los empresarios, para que no nada más se enriquecieran éstos con la venta de arbolitos sin responsabilidad con el medio ambiente? ¡eso sería lo más justo!
Aunque acepto que no toda la responsabilidad es de las autoridades, sino de nosotros mismos, los que compramos árboles naturales ¿Por qué si nos dimos el tiempo hasta para ir a cortarlo, por qué no darnos el mismo tiempo para llevarlo a un Centro de Acopio? Lógicamente, optamos por lo más fácil: tirarlo en la esquina ¡qué hueva llevarlo! Dijera el dicho, un poco modificado: “Arbolito nuevo donde te pondré, arbolito viejo, donde te tiraré”.
Ante tal situación, siempre me ha dado vueltas el que se le impusiera a cada árbol un importe (que no impuesto), por ejemplo: adicionar al precio de cada pino 20 pesos y cuando se llevara a reciclar fueran devueltos; por supuesto, que nunca falta el desidioso que diga: “Yo no lo llevo aunque se pierda el dinero”; pero le digo una cosa, siempre habrá otra persona que por 20 pesos lo haga. ¡Por qué cree que siempre hay los que se llevan el cartón, el aluminio, las botellas de Pet, por menos de eso!
Simplemente ésa sería una opción y créame, el próximo año, no veríamos ni un pino tirado ni abandonado en las calles.
Email: caballero_brenda@hotmail.com
Indiscutiblemente no puedo refutar tal argumento, ante el abandono de los compradores de pinos naturales ¿Por qué tirarlos a la calle después de que alegraron y aromatizaron tu casa más de un mes?
Nuestro arbolito permanece aún en casa. Él quisiera conservarlo allí todo el año, para no botarlo o tirarlo a la basura, mas yo no apoyo la idea ¡No me imagino un árbol en el centro de la sala los 365 días del año! Bueno, a lo mejor en primavera pudiera ponerle flores, en verano fotos de las vacaciones, en otoño pintarlo de dorado y para Hallowen adornarlo con telarañas, fantasmas y calabazas, ¡pero no es tan fácil cuando vives en 65 metros cuadrados!
Luego entonces, lo más lógico es tratar de darle un digno lugar de descanso: “reciclarlo”.
Hace exactamente una semana, en el parque de Los Berros, nuestras autoridades federales, estatales y municipales dieron inicio “supuestamente” con esta actividad, incluso denominaron al Programa “Recicla tu Navidad”, del 7 de enero al 14 de febrero, la cual tiene la meta de recolectar para este año, 50 mil arbolitos en todo el estado.
Pero en Xalapa, más de una persona acudió con su pino a alguno de los 13 centros de acopio de los que en dicho acto y medios de comunicación se dieron a conocer, sin embargo, no estaban en funcionamiento; incluso, al preguntar a los empleados de algunos centros comerciales, ni siquiera enterados estaban y lo único que decían es que no tenían indicaciones, pues no se habían puesto las tarimas para llevar a cabo dicha recolección.
Ante tal incertidumbre y confusión, hace unos días, el Director de Recursos Naturales de la Secretaría de Medio Ambiente del Gobierno Estatal, Héctor Hernández Andrade, tuvo que “explicar” el funcionamiento de los Centros de Acopio, deslindándose (diría yo), pues hablaba de que era competencia de las autoridades municipales coordinarse con los centros comerciales.
¡Óigame, pues no es un trabajo en equipo! ¡Si el Ayuntamiento no puede ni con la basura! Bueno, con el cobro anual sí, mas no con la recolección.
Hernández Andrade explicaba que, efectivamente, no estaban funcionando todos los centros de acopio como se había pronosticado, pues algunos, como los Chedraui Museo y Cristal, no tenían espacio; entonces, me pregunto ¡dónde pusieron todos los árboles que vendieron! ¿En ese momento sí había espacio?
¿No se supone que como Autoridades deberían gestionar el apoyo de reciclaje entre los empresarios, para que no nada más se enriquecieran éstos con la venta de arbolitos sin responsabilidad con el medio ambiente? ¡eso sería lo más justo!
Aunque acepto que no toda la responsabilidad es de las autoridades, sino de nosotros mismos, los que compramos árboles naturales ¿Por qué si nos dimos el tiempo hasta para ir a cortarlo, por qué no darnos el mismo tiempo para llevarlo a un Centro de Acopio? Lógicamente, optamos por lo más fácil: tirarlo en la esquina ¡qué hueva llevarlo! Dijera el dicho, un poco modificado: “Arbolito nuevo donde te pondré, arbolito viejo, donde te tiraré”.
Ante tal situación, siempre me ha dado vueltas el que se le impusiera a cada árbol un importe (que no impuesto), por ejemplo: adicionar al precio de cada pino 20 pesos y cuando se llevara a reciclar fueran devueltos; por supuesto, que nunca falta el desidioso que diga: “Yo no lo llevo aunque se pierda el dinero”; pero le digo una cosa, siempre habrá otra persona que por 20 pesos lo haga. ¡Por qué cree que siempre hay los que se llevan el cartón, el aluminio, las botellas de Pet, por menos de eso!
Simplemente ésa sería una opción y créame, el próximo año, no veríamos ni un pino tirado ni abandonado en las calles.
Email: caballero_brenda@hotmail.com
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