Qué le pasó al PAN

Salvador Muñoz
Los Políticos

Primero, es sorpresa; después, cuando uno lee, hasta da risa... ya en frío, indignación. ¿Qué le pasó al PAN? Ese partido que hasta era considerado “el de los mochos” por su rigurosidad en su comportamiento, en lo estricto de sus formas, pero con la batuta en alto para poder criticar, señalar y acusar... era el partido de los Clouthier, Gómez Morin, Castillo Peraza, Correa Rachó, a los que nadie podía ver de frente y si así lo pretendían, tenían que alzar la cara.
Todavía uno decía, “el Jefe Diego”, viejo cabrón, entrón, pero que ya no parecía seguir esa vieja escuela que hacía de los miembros del PAN, hombres.
Luego llegó un Vicente Fox, caricatura ofensiva a la doctrina de Acción Nacional que hoy sólo es un triste recuerdo de seis años en el poder.
Acabamos de dejar a un Calderón, con su estela de luz... y muerte, o lo que es lo mismo, corrupción y violencia...
Y apenas pretendemos entender cómo un partido que era el contrapeso democrático de la imposición, del fraude, de la transa, se volvió deprimente réplica de su antagonista, cuando surge Ernesto Cordero y su dispendio...
Regalos, camisas, bebida, tintorería... ¡hasta champús! y todo, con cargo a nuestros impuestos... por eso decía, causa sorpresa, da risa, pero al final, indigna cómo gente que según nos representa, que “busca nuestro beneficio”, nos agarre de pendejos.
Pero, no nos amarguemos, tratemos de verle el lado amable a las cosas y dilucidemos para qué jijos de la chingada un hombre como Ernesto Cordero hizo las siguientes compras:

* Artículo de mil 880 pesos, de la marca Louis Vuitton: Creemos que fue un obsequio a la maestra Gordillo enviado a quién sabe dónde ande...

* Shampoo MaEvans Acción Profunda: Quizás para seguir tomándonos el pelo...

* Seis servicios de boleada de zapatos: Bueno, al menos gasta menos que Granier.

* Un Jersey de los Xolos de Tijuana... ¡a otro perro con ese hueso!

* Lentes de contacto: Para vernos mejor... la cara...

* Dulces: Con eso de que es más fácil engañar a un mexicano que quitarle un dulce a un niño, mejor los compró...

* Botellas de enjuague bucal: Porque es seguro que, después de este escándalo, cada vez que abra la boca, apestará a cloaca...

* Alfombras: Con alguien se tiene que poner de “tapete”...

* Accesorios de baño: Al menos es previsor... sabía que la estaba “calabaceando”...

* Cigarros: Bajo el entendido de que, tras este escándalo, las pocas personas que creían en él es posible que ya ni lo fumen...

* Doce servicios de tintorería: Un absurdo... cualquier hampón de primera sabe que lo importante es lavar el dinero, aunque el tacuche esté sucio.

* Productos de cosmética: Se aplica el anterior punto... cualquier hampón de primera sabe que lo importante es maquillar las cifras, aunque tengas cara de chango...

En fin... que si lo de Cordero ya era un escándalo, imaginen ahora que le sale un novio a Rubén Alanís, coordinador de la campaña a Gobernador de Baja California, de “Kiko” Vega de la Madrid. Que conste, no me escandalizo que un varón tenga un novio, ¡para nada! El asunto es que el novio del también diputado del PAN, tiene quince años. Estupro y pederastia fueron dos delitos que de inmediato le endilgaron al enamorado.
Insisto... después de la sorpresa, caemos en la risa... ya en frío, se vuelve indignación. ¿Qué le pasó al PAN? Ese partido que hasta era considerado “el de los mochos”... ya se parece al PRI... y al PRD... perdió la esencia.