Votación animal

Brenda Caballero
Números Rojos

¿Cansado de estar harto? ¿aburrido de ver siempre lo mismo? pareciere parte de un comercial de CV Directo de ésos que nos venden cosas que parecen que nos sirven, pero que al final terminan sirviendo solo para una cosa… para nada.
Ese parece ser el motor que ha impulsado a candidatos inusuales en esta jornada electoral en varios lugares del país a candidatearse para un puesto de elección popular.
El ya muy conocido y famoso gato Morris para la Alcaldía de Xalapa; Titán, el perro san Bernardo para la alcaldía de Oaxaca y el burro Chon, viejo candidato resucitado de los años 70, quien se postula para Ciudad Juárez y que en aquel tiempo compitió contra Luis Echeverría y Miguel de la Madrid.
Cuánta razón tiene el maestro Arturo Reyes Isidoro, cuando habla del quinto poder en referencia a las redes sociales, pues estos cuadrúpedos personajes nacen, crecen, se candidatean, mueren y hasta reviven en las mismas redes sociales.
Se pueden ver principalmente a miles de jóvenes apoyando y opinando sobre los nuevos miembros de la política, jáctandose y mofándose de los candidatos de siempre y elevando porras hacia los animalitos.
Pero ¿votarán por los candidatos animales?
Es probable que haya quien lo haga, en el afán de defender el “voto libre” teniendo una tendencia mayor entre los que acaban de cumplir la mayoría de edad; sin embargo, aunque es popular entre los adultos, algunos piensan que ésa es una forma de anular su voto.
En lo particular, no votaría por Morris, se me hace un gato fresa, ¡jajaja! creo prefiero al burro, o de perdis al fiel perro, lástima que no haya más diversidad de candidatos animales que compitan por Xalapa. ¡en fin!
Pero regresando a Morris, debemos entender que debe ser tomado como una broma, como una parte necesaria para soportar las perspectivas negativas hacia los políticos de siempre.
Tal asunto no debe ser parte de una preocupación para las autoridades electorales, ¿o sí? pues ya hablan hasta de que esa libertad de expresión animal sea tomada como delito. Vaya ¡me imagino al Morris pisando la cárcel antes que Granier! ¡Seguramente se alegaría “terrorismo electoral en redes sociales”! O tal vez ¡“red de corrupción gatuna-electoral”! enfocada principalmente de recursos tomados de alguna Asociación Animal, con eso de que imprime e imprime pegotes ¿pues de dónde saca dinero? ¿Quién lo financia? ¿rebasó ya el tope de campaña? ¡todo con tal de entambarlo pues aquí hay gato encerrado!
Preocupación, distractor, broma, burla, chantaje, táctica electoral, es algo en lo que no coincidiríamos nunca, pues en ocasiones, algo bueno se convierte en malo y viceversa.
A continuación, le voy a transcribir parte de un comunicado de prensa publicado por el portal Animal Politico, que envía el burro Chon a los “Perros de Comunicación, a las Organizaciones Prodefensa de los Animales, a las Bestias Domesticadas y a la Fauna Silvestre”:
“El motivo de este comunicado es para denunciar una serie de hechos que llaman a la confusión y pueden terminar desviando el sentido histórico de las candidaturas animales”.
“Vemos con tristeza la falta de memoria, ya no de los capitales humanos que nos malgobiernan, sino (¡el colmo!) de animales que apelando el hartazgo de tod@s los seres vivos, entran al escenario político como una alternativa de cambio. El oportunismo de quienes aparentando enfrentar la farsa electoral termina por legitimarla al demandar candidaturas independientes donde los sectores desposeídos nos contarán con los recursos de grandes magnates para financiarse sus probables candidaturas. Candidaturas independientes sin organización de la animalada empobrecida, no es otra cosa que convertir la farsa en una tragedia…”
“¡No puede ser democracia lo que enriquece a pocos y empobrece a la mayoría!”
Las candidaturas en las redes están dadas, pero en las urnas ¡es otra cosa! Falta que Animal Planet y Discovery Channel sustituyan a los medios.

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