Brenda Caballero
Números Rojos
Tenía siete años cuando en el noticiero de la noche daban a conocer algo que era muy importante, a juzgar por la actitud de mi familia, pues hasta se pararon del asiento para subirle al televisor.
Sinceramente a esa edad qué me importaban las noticias, yo quería que extendieran las caricaturas, no ver a Jacobo Zabludovsky; pero ante la atención de mi familia me centré en la televisión.
No sabía quiénes eran los detenidos pero se me grabó el nombre de una pareja: Caro Quintero y Sara Cosío.
Con el transcurso de los años supe que era un narcotraficante, no sé si el primero en el país, pero sí uno muy importante y “de buen corazón”, puesto que la gente lo quería porque era bueno pa’ las causas sociales, según contaban.
A principio de la década de los 80, Rafael Caro Quintero funda el Cártel de Guadalajara que se encargaba del control del tránsito de drogas a los Estados Unidos, junto con los sinaloenses Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo, “Don Neto”, tío de Amado Carrillo Fuentes.
Fue detenido en Costa en Rica y todo por enamoradizo y asaltacunas, pues se llevó a una menor de edad con él, a Sara, quien al llamar a su mamá, le rastrearon la llamada y fue localizado.
Se le procesó por los delitos de secuestro y homicidio del agente encubierto de la DEA, Enrique Camarena Salazar, a quien junto con el piloto Alfredo Zavala Avelar, mandó a levantar, a castrar, a empalar y a enterrar vivos en venganza de haber dado informes de sus plantíos de marihuana.
Por eso, ayer que me enteré de que el llamado “Narco de Narcos” Rafael Caro Quintero salía libre después de 28 años de estar encarcelado en un Reclusorio Preventivo de Guadalajara, no dejo de sorprenderme del acto y desde luego pensar ¿Por qué hasta ahorita, cuando su abogado declara que pudo haber salido antes?
Entre los puntos en torno a su liberación, podemos citar:
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En virtud de que la economía está de la chingada, Presidencia necesita un asesor para levantarla, ya que hasta el momento, no habido presidente ni secretario de Hacienda que repita su legendaria frase en el momento de su detención: “Pago la deuda externa”, si lo dejaban libre.
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Ahorita que está de moda la legalización de la mota, es necesario un dirigente moral histórico que lleve la batuta, pues Fox está muy desgastado.
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Con la semana de los Emprendedores, ¿quién supera a Caro Quintero?, que compró predios estériles, perforó pozos, irrigó tierras, creó un oasis agroindustrial de doce kilómetros cuadrados, sembró mota y a los 29 años poseía una fortuna de 500 millones de dólares.
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Ahora resulta que debemos dar un “Usted disculpe” a Caro Quintero por haber sido procesado incorrectamente por la Justicia Mexicana. ¿O acaso es otra Reforma? ¿será la judicial?
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Con eso que está de moda la devolución de bienes a ex presidiarios como Raúl Salinas, ¿le serán devueltos El Búfalo, la Hacienda El Castillo, las 36 casas, los autos y el dinero arrebatados?
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¿Fomentará la creación de fundaciones? Con eso de que llegó a donar hasta 100 millones de pesos a cierto municipio sonorense. Sin duda será gran competidor de las de Televisa, TV Azteca y Carlos Slim.
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Existen rumores incluso que será el primer empresario mexicano que funde la Sociedad Anónima de Capital Variable Motamex con el slogan: “Comprar Mota no es Caro, si lo haces con Quintero”.
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Para que no se haga un monopolio ¿les pareciera que Quintero la empacara, el Chapo la distribuyera y Fox la administrara?
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¿Será que ahora Caro Quintero solicite el resarcimiento de los daños causados? Pues a estas alturas sería el hombre más rico del planeta y el primer lugar en los hombres más ricos de Forbes.
Después de 28 años, amparos y mucho dinero, Caro Quintero está libre, aun cuando su sentencia alcanzaba hasta 199 años de prisión; sin embargo, sólo se le dio 40, ya que la legislación vigente en 1985, que le es aplicable, no puede imponer una sanción mayor de la que fijaba como límite máximo el artículo 25 del Código Penal Federal (actualmente es de sesenta años).
De todo esto, podemos deducir que no es tan malo que Caro Quintero quede libre, pues no es su culpa, tan solo fue otra víctima de un Sistema de Justicia Mexicano deficiente que ha aceptado que el Proceso no fue el adecuado, ¡lástima que hayantardado 28 años en darse cuenta!
Email: caballero_brenda@hotmail.com
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