¿Se aprende con la televisión?

Janet Domínguez Montero
Lo tienes que saber

Todo lo que somos, y lo que hemos aprendido, es con base a la imitación y repetición de todo lo que vemos, sobre todo en las primeras fases de la infancia.
Los niños aprenden a andar porque ven a sus mayores que andan. Hablan, porque oyen sonidos que intentan repetir. Y cuando son algo mayores, no desean otra cosa que realizar las actividades que hacen sus padres.
De bebés tocamos y manipulamos los objetos que nos rodean, captamos los colores, las formas, los tamaños y hasta las texturas a través de nuestros cinco sentidos.
Luz María Ibarra, en su libro de Gimnasia Cerebral, manifiesta que la vista es el sentido más sensible, por lo que a través de ésta, podemos recibir las imágenes y guardarlas en nuestra memoria. Considera que "las imágenes penetran por nuestros ojos y se invierten hacia atrás mientras entran por el nervio óptico y a través del quiasma óptico se dirigen del tálamo al lóbulo occipital donde la visión primaria es procesada. La visión completa se produce cuando la información de todos los lóbulos cerebrales tienen acceso".
Al cerebro le corresponde procesar la información que es captada por los ojos, y nos da la oportunidad de elegir las imágenes y guardarlas.
Joseph Chilton Pearce sugiere ver televisión no antes de los ochos años de edad, debido a que "las imágenes y las habilidades del lenguaje no se han establecido inteligentemente". Si un niño ve televisión antes de esta edad, no se le da oportunidad de desarrollar la imaginación y recibe un cierto bloqueo en su cerebro.
A los niños les atrae lo que ven, mas no lo que escuchan. Poseen un grado de distorsión, para ellos no hay una conexión entre lo que escuchan y lo que observan. Ciertos comportamiento de los personajes en los programas de televisión, son repetidos por los niños. Lo hacen a través de la imitación.
¿Por qué un niño quiere volar como Batman o como Superman? Porque cree que puede volar o ser como ellos. ¡Cuántos casos hemos escuchado sobre pequeños que se avientan de azoteas o de balcones y todo por imitar a su personaje favorito?
Las formas y figuras que en la televisión se muestran no son diseñadas para un niño. Aparentemente pueden estar quietos e interesados, pero se ha comprobado que la llamada "caja tonta" afecta en el aprendizaje de los pequeños.
La carencia de instrucciones físicas, emocionales y sensoriales es una consecuencia; se recomienda entonces la manipulación de objetos, juegos de mesa o de destreza y la interacción con otras personas, para aprender y desarrollar mejor su inteligencia así como capacidad de imaginar.
Actualmente, vemos programas que en su contenido es basura, no hay mensajes ni mucho menos imágenes que sean productivas para los pequeños. En esos shows, aparentemente de carácter infantil, si observa con detenimiento, podrá identificar cierto grado de lelismo o pasividad.
Si usted no se encuentra en casa a causa del trabajo o no sabe cómo entretener a su pequeño, le recomiendo buscar diversas alternativas. La televisión no es medio por el cuál su hijo pueda aprender mejor, sino todo lo contrario. Usted contribuye a que éste se vea afectado en su nivel de aprendizaje.
Se ha preguntado alguna vez cuántas horas los niños invierten en la televisión o qué programas ven, sin olvidar cuál es el contenido de esos programas y la reacción del niño después de ver "la caja tonta".
Si no lo ha hecho, ¿no cree qué es tiempo de hacer algo?

domínguez.montero@gmail.com