miércoles, 18 de junio de 2008

Entrevista con Miyuli

Salvador Muñoz

Por donde quiera que se le vea, Miguel Angel Yunes Linares sacude. Todo mundo tiene que ver con su afiliación al PAN. Lo que conlleva su registro. Su destape a la gubernatura enchina la piel a más de uno. Hablan de él como un energúmeno de la política, de acoso, de persecución…
Han pasado muchos años desde que llegó muy enojado a la oficina de Yayo Gutiérrez para reclamar una pequeña notita de “Toto Muñoz” en una sección que había en “Política” llamada “De a grapas”.
Yoya decía que estaba preocupada porque Yunes Linares quería saber mi dirección, saber dónde vivía. Realmente no sé qué pasó. Lo cierto es que me tuve que ir un rato a Acayucan a hacer un “posgrado”. Quizá no lo recuerde don Miguel… es más… yo casi lo olvido…
¿Qué tan malo puede ser Yunes Linares? ¿Es tan mal político que tuvo que irse a otro partido para buscar una oportunidad? ¿Será el alfil del Presidente Calderón? ¿Lo seguirá apoyando la maestra Elba Esther?
Todas estas preguntas y más quisiéramos que nos las respondiera el director general del Issste pero como no es posible contactarlo para ello, nos servimos a nuestra manera: La entrevista con Miyuli.
–¿Cómo lo recibieron los panistas tras ponerse la camisa del blanquiazul?
–¡De manera similar!
–¿Se pusieron la azul con usted?
–Estos diputados se pusieron la camiseta, pero ¡roja! ¡Qué cabrones!
–Bueno, ya ve que sólo siguieron el ejemplo de la diputada Dalia Pérez…
–Pero los diputados panistas no fueron congruentes…
–¿Por qué? ¿Por vestirse de rojo?
–No, eso es lo de menos… yo hubiera preferido que Dalia, en lugar de ponerse la camiseta… ¡se la quitara!
–¡Es usted un pingo!
–¡Hey! ¿Quieres bronca o qué?
–Para nada señor, soy muy malo pa’ la lidia…
–No me menciones ese nombre porque me endiablo…
–Mejor cambiamos de tema… ¿el viejo régimen o un cambio?
–Apuesto por el cambio… ya ves que en este gobierno los “dinos” del viejo régimen no tienen cabida…
–¿Ehhh? Señor, me refiero al régimen de Pensiones del Issste…
–¡Ughhh! Me jodissste…
–Oiga… se dice que tiene usted diferencias con Fidel… ¿es cierto?
–¡Por supuesto!
–¿Por qué?
–En principio, él es morenito y yo güerito; él fue candidato, y yo no; él es gobernador y yo quiero ser…
–Pero ha de haber algún punto de coincidencia… ¿no cree?
–Puede ser, déjame pensar…
–Mientras, dígame su opinión de Bueno Torio…
–¿Cuál buey notorio? ¡Yo no he notado nada!
–Hablo del cordobés Bueno…
–¿Hay un cordobés bueno?
–Son varios… está Nemi Dib…
–¿Es broma?
–Entonces… ¿cómo ve Buganza?
–¿El del 10?
–Sí, ¿por qué cree que utilice el número 10 en su propaganda?
–Pues creo que puede ser por dos razones…
–¿Cuáles?
–Porque a lo mejor sólo diez personas creen en que va a hacer candidato a Gobernador otra vez…
–¿Y por qué otra razón?
–A lo mejor nada más sabe contar hasta diez…
–¡Es usted un diablo!
–¿Otra vez? ¿Me quieres hacer enojar?
–No dije nada… pero le decía de los cordobeses…
–Ah, sí… que no hay ni uno bueno…
–¿Y Duarte?
–¡Ese está más quemado… ya hasta cayó en la cárcel!
–Dije Duarte, señor, no Dante…
–Ahhh… Javier Duarte es un buen muchacho, estudioso, educado, con buen maestro, tan atento, que vino a Boca del Río a saludar a mi hijo hace poco…
–Oiga… habla bien de usted referirse de tal forma al hombre más cercano del gobernador…
–Insisto: ¡Es tan bueno que parece líder! Es más: ¡tiene voz de líder!
–¿En serio?
–Sí… me recuerda a Roberto Madrazo… antes de la operación…
–No le digo… es usted un Demonio…
–¡Ahora sí, ahora sí revolviste mis demonios internos!
–No se exalte, don Miguel… mejor responda, para acabar la entrevista: Si usted fuera candidato del PAN a la gubernatura, ¿a quién escogería como contendiente del PRI, Duarte, Yunes Zorrilla o Yunes Landa?
–¡A Duarte!
–No me diga que porque es el más chiquito de estos tres…
–No seas cochambroso… te explico por qué: Yunes Landa, quieran o no, está trabajando, llevando agua a su molino, sin hacer mucho ruido y cuenta con el apoyo de Manlio Fabio; a Yunes Zorrilla le guardo un gran afecto a él y su familia y no podría negarle nada a su señor padre… y con Javier Duarte, joven en la lidia política no tengo compromiso… aunque acá entre nos, no debo perder de vista a Dante…
Así acabó la entrevista…

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