lunes, 29 de septiembre de 2008

Los niños no se tocan... ¡las niñas sí!

Claudia Guerrero
Entre lo utópico y lo verdadero

Aunque tengamos una Ley de la No-Violencia a las Mujeres, desgraciadamente por ser de naturaleza joven, no actúa con la inmediatez que se debe y que a las mismas jóvenes son acosadas en su trabajo, al no ceder a los caprichos de retorcidos fugaces funcionarios que son protegidos por la mafia de personajes, que en público son honorables funcionarios, pero en el bajo mundo, escondidos detrás del clóset, hay una serie de preferencias sexuales poco claras, sin contar el involucramiento de niñas y jovencitas no mayores de 15 o 16 años... En fin, "carne fresca, revitaliza el cuerpo", como dirían ellos.
Poco o mucho se sabe de todo esto, ya que es un secreto a voces que destapa la cloaca de corrupción y tráfico de influencias que persigue la administración fidelista.
En el caso de la funcionaria del Instituto Municipal de la Mujer en Emiliano Zapata, fue cesada de sus funciones, por un grupo de "machos traumados", como los calificó la diputada Dalia Pérez, encabezados por el Alcalde Fernando Retureta y su séquito de hombres "necios", que no pudieron soportar que una mujer trabajara eficazmente.
Este caso, del que varias diputadas han colaborado en mucho o poco, y se les está dando seguimiento a esta situación vergonzosa de discriminación a una mujer quien su único delito es tener luz propia, ante un grupo de "machotes" opacados. Por otro lado, la denuncia penal interpuesta por una becaria, quien acusó a Dagoberto Alarcón Solís, Director del Departamento del Congreso del Estado, el cual "orgulloso y digno" envía una circular a todos los diputados, documento que aceptó Margarita Guillaumín recibir, desmintiendo las acusaciones de la joven becaria y la expone como una "mala mujer que lo quiere perjudicar"...
Esto se prestará a aseveraciones, sólo que no cuenta, que la agraviada tiene el rostro desfigurado por los golpes y un ojo morado e inflamado, del que por mucho tiempo se podrá recuperar...
Esto, señores, son lesiones graves que atentan su vida y ¡Va a la cárcel! por lo tanto, ¿por qué el tipo sigue ahí en el Congreso?... Acaso es porque se jacta de ser "bendecido por Dios", de Fidel, de Héctor Yunes o ¿De quién? Mejor que nos diga, pues la prensa se le irá a la yugular si tienen ética profesional para informar, pues si algunos medios se quedan callados ante este hecho y estar en la cómoda postura de decir "Nadie es culpable, hasta que se le compruebe lo contrario".
Señores, ustedes serían también copartícipes de esta agresión. Piensen que todos estamos expuestos a una agresión y acoso físico, ya sea a nuestra hermana, prima, sobrina, tía, en fin, a cualquier mujer que tenga la necesidad de trabajar y que obtusos descerebrados quieran abusar de su puesto para conseguir como sea, satisfacer sus bajos instintos. No queremos parecer feministas, pero hay que reconocer que hoy en día, la mujer ya no se deja y ¡aguas hombres!, pues vamos rompiendo esquemas culturales que cargábamos desde hace siglos y eso, sí es equidad de género.
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