jueves, 4 de septiembre de 2008

UV, los problemas apenas empiezan

Álvaro Belin Andrade
Hora libre

En medio de problemas aún sin resolver, como la demora en la entrega de los recursos adicionales aprobados por los legisladores y la inclusión de mil 600 alumnos que no estaban contemplados en la planeación de su proceso de admisión, la semana pasada la Universidad Veracruzana recibió con júbilo a sus más de 15 mil nuevos halcones (veracruzanos y de otros estados), una cifra similar a la registrada por la Universidad Nacional Autónoma de México.
El rector Raúl Arias Lovillo pidió compromiso a los nuevos estudiantes en una institución que, según lo dijo, es diversidad, tolerancia, diálogo y conocimiento al servicio de los otros, y promueve valores como la fraternidad y la solidaridad con la sociedad a la que se debe.
Y es que, pese a las dificultades, la UV ha contado con el respaldo de los de dentro y de los de fuera. Durante todo este año ha estado en el centro de múltiples debates, se ha intentado hacerla rehén de circunstancias políticas y de no pocas escaramuzas y caprichos, se le ha querido involucrar en el juego de espejos en que se juegan futuros políticos, pero ha sabido salir indemne, y su comunidad docente y estudiantil ha continuado con su quehacer cotidiano.
Lejos de conflictos como los que ahora están sumidas otras universidades, como la Universidad de Guadalajara, en la última década la Universidad Veracruzana se ha colocado, gracias a un esfuerzo colectivo, entre las cinco universidades públicas más importantes y respetables del país, si bien muchos problemas no se resuelven con discursos o buenas intenciones.
Hasta el momento, los recursos aprobados por la Legislatura no han llegado a las arcas universitarias, pese a que eran una necesidad desde principios del año. El apoyo que el gobierno federal le otorgaría, según anuncios hechos públicos, tampoco han manado, no obstante que el error del Ceneval obligó a admitir a mil 600 estudiantes más, y eso deben resolverlo con prontitud las autoridades hacendarias de Veracruz y el gobierno federal.
Ya Ricardo Corzo Ramírez, secretario Académico de la UV, ha expuesto ante la opinión pública los datos de lo que económicamente representa la admisión de los mil 600 estudiantes adicionales. De entrada, el incremento en mil 900 horas-clase que tienen un costo, calculado por él en unos 80 millones de pesos cada año, al menos para la cohorte generacional que ha comenzado este mes a formarse en las aulas universitarias.
Por todas las regiones universitarias hay una preocupación latente, porque dichos recursos debe gestionarlos la institución, pero los espacios, la organización de los grupos académicos, la administración escolar de una población escolar súbitamente incrementada le corresponde a los vice rectores, a los directores de facultades, a los administradores.
Y esto se ve con mayor nitidez en las carreras más solicitadas como Arquitectura, Comercio y Administración, Derecho, ya no digamos Medicina donde a más de aulas se requieren espacios con equipamientos especializados.
Actualmente, la Universidad contará con una matrícula de 51 mil 480 estudiantes, la mayoría de ellos (95 por ciento) están inscritos en programas de licenciatura. Junto con quienes estudian posgrado y programas de educación no formal, la población se acerca a los 80 mil individuos, un aporte (31.5% de la demanda de educación superior en el estado) que debe tener como correlato un apoyo financiero importante.

El Consorcio Clavijero podría apoyar a la UV
En este trance por el que cruza, en que se le ha prometido la entrega, a partes iguales entre los gobiernos federal y estatal, de 90 millones de pesos para enfrentar la contingencia, la Universidad Veracruzana debiera apoyarse en otras instituciones hermanas.
Es el caso del Consorcio Clavijero, asociación civil de la que es fundadora y asociada, que podría apoyarla ofreciendo a una buena parte de los estudiantes adicionales los programas de estudio de los dos primeros semestres, relacionados con el modelo educativo integral y flexible, aprovechando que se ofrecen en línea, lo que supondría un mayor aprovechamiento de sus centros de cómputo para la acreditación de dichas materias.
No se trata de delegar compromisos. Es claro que el Consorcio Clavijero no ofrece las carreras que tiene la UV en su catálogo, pero los planes de estudio de este organismo fueron creados prácticamente a imagen y semejanza de los de la UV en su componente inicial, el que se refiere a las competencias generales. De manera que es un elemento del que se podría valer la UV para formar a una buena parte de sus estudiantes en sus primeros pasos, permitiendo desahogar el grave problema de la falta de espacios y de personal docente.
Por supuesto que podrían esgrimirse argumentos en contra como el hecho de que tendría que negociarse con el Fesapauv la posibilidad de que no fueran miembros de ese gremio quienes formaran a todos los estudiantes universitarios o de que la certificación de calidad del 80 por ciento de sus planes de estudios no fue lograda por la UV contemplando al Consorcio Clavijero. Pero considerar esta posibilidad como parte del abanico de posibilidades para enfrentar la contingencia acarreada por el error del Ceneval, no es descabellado.
Tan solo habría que considerar que, como lo informó la UV, 7 mil 593 estudiantes de 34 diferentes carreras realizaron su trámite de inscripción por internet, lo que habla de una tendencia creciente hacia la utilización de las nuevas tecnologías.

Dura batalla por el control de la UdeG
En Guadalajara, una de las universidades públicas más importantes del país, la UdeG, enfrenta uno de sus momentos más aciagos. Sometida a una encarnizada lucha por su control entre el PRI y el PAN, dado su apetitoso presupuesto (más de 7 mil millones de pesos este año, que representa casi tres veces el de la UV) y su enorme influencia en los diversos sectores sociales, lo que la hace un bastión importante como plataforma electoral, se enfrenta al momento más crítico de su historia.
Dos grupos, escindidos del mismo tronco, han dejado a un lado el interés institucional para hacerse de su dominio en un pasaje abominable de lo que no debe suceder en una institución educativa que, como la de Jalisco, ha caído en el mismo juego que mantiene postradas a universidades públicas como las de Oaxaca, Guerrero, Durango y Puebla, entre otras.
El actual rector, Carlos Briseño Torres, acaba de ser destituido en una sesión ilegal del Consejo Universitario General, luego de buscar infructuosamente romper con la larga historia de hegemonía y cacicazgo protagonizada por la familia Padilla López, encabezada por el ex rector Raúl Padilla, último de los prohombres que han hecho y deshecho en la UdeG en los últimos 20 años, si bien la historia empieza a finales de los años cuarenta en que el padre de los ex rectores Raúl y Trinidad, Raúl Padilla Gutiérrez, funda junto los Zuno la Federación de Estudiantes de Guadalajara.
A la FEG la dirige Raúl en 1977 que ahora lanza violentos coletazos para evitar ser expulsado del paraíso económico y político que representa esa casa de estudios. Doce años después asume la rectoría, donde consolida a su grupo y, al término de su gestión, apoya a quien le ha dado la espalda y contra quien lanza sus demoledores misiles.
Raúl Padilla, hay que decirlo, encabeza la organización que hace posible la más importante reunión de libreros y lectores en América Latina, la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, cuyo más reciente pleito lo protagonizó con los descendientes del escritor Juan Rulfo, cuyo nombre había utilizado para prestigiar el más importante premio literario de Latinoamérica, otorgado por la FIL, haciendo a un lado a los depositarios de la gran herencia cultural del autor de “Pedro Páramo”.
Luego de que los seguidores de Padilla destituyeran a Brisceño del cargo en un consejo universitario cuya sesión había sido suspendida por éste, el pleito universitario ha pasado ya a las instancias judiciales. Este lunes, un juzgado de distrito concedió al rector encapillado una suspensión provisional que implicaría la restitución de su cargo, aunque el CUG tendría 24 horas para impugnar el fallo que, de suceder como sucederá, obligará a pasar el caso al tribunal colegiado para, en otras 48 horas, emitir una resolución definitiva.

Para el recreo

***Colores que matan. La presidenta del SNTE, Elba Esther Gordillo, no se quedó en la mera crítica por la coloración partidista de las escuelas públicas, como lo hizo cuando vino a Xalapa y, por ese tema, confrontó al gobernador Fidel Herrera Beltrán. Legisladores del partido Nueva Alianza, también de su propiedad, elevaron el volumen de sus micrófonos en el seno de la Comisión Permanente de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión para proponer reformas tanto a la Ley General de Educación como al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe) que eviten que los partidos políticos en el poder, en cualquiera de los tres órdenes de gobierno, pinten las escuelas según la orientación cromática que identifique a sus organizaciones. "En ningún caso, el presupuesto destinado al sector educativo para la construcción, mantenimiento, mejoramiento, rehabilitación o remodelación, interior o exterior, de inmuebles educativos será utilizado de forma tal que promueva partidos, ideologías, servidores públicos, y que pudiera influir u orientar las preferencias electorales o simpatías política de los niños, adolescentes y jóvenes", señala la propuesta panalista. Y va más allá, que se considere una infracción que los partidos y servidores efectúen propaganda política en las escuelas, a través de diseños, pintura o acondicionamientos de sus inmuebles, basada en colores, emblemas o distintivos que identifican a las fuerzas políticas. Falta ver si prospera, porque los panalistas no tienen gobiernos para colorear, pero los demás partidos (rojos, azules o amarillos) seguirán con la moda.

*** Profesores adquieren habilidades de cómputo. El Consorcio Clavijero entregó en el municipio de Veracruz constancias de participación a 114 profesores que concluyeron el curso de Computación Básica, ofrecido en una modalidad semi escolarizada que conjunta clases en línea y asesoría presencial. En la Biblioteca Municipal de Veracruz, los profesores de educación básica, apoyados por el Ayuntamiento porteño, recibieron sus constancias de participación en este programa instrumentado por el Consorcio Clavijero (CC) que permite incorporar al magisterio al uso de las tecnologías de la información y comunicación (TIC) en la educación. Con los 114 profesores que concluyeron exitosamente este curso, en lo que va del año se han sumado 199 mentores en el uso de las TIC tan sólo en el municipio de Veracruz. Ahora se han inscrito al tercer curso 720 profesores más, tanto de este municipio como de Alvarado, Boca del Río y Medellín de Bravo.

*** Por la justicia y la equidad en acceso a nuevas tecnologías. Con 116 kilómetros de fibra óptica, nueve mil 200 nodos de red que dan servicio a unos 80 mil usuarios y una experiencia que ha ido creciendo con el paso de los años, la Universidad Veracruzana, en voz de su rector Raúl Arias Lovillo, se ha incorporado a la Red Nacional del Conocimiento creada a iniciativa de la Comisión Especial para la Promoción del Acceso Digital a los Mexicanos, de la LX Legislatura Federal. En la reunión celebrada recientemente en la ciudad de México, Arias señaló que “la infraestructura tecnológica no es un fin en sí mismo, tiene el propósito de contribuir a elevar la competitividad de Veracruz y participar en elevar la competitividad del país”. Al explicar este esfuerzo de intercomunicación realizado por la UV en los dos últimos rectorados, Arias Lovillo se refirió a la gran desconcentración geográfica de la institución, que obligó a construir una red estatal de telecomunicaciones con redes metropolitanas, un sistema de videoconferencias, un sistema de red inalámbrica para los cinco campus, así como una biblioteca virtual al servicio de los universitarios.

*** Alberto Tovalín muestra a los conjurados. Hasta el 26 de septiembre permanecerá abierta, en la Coordinación Nacional de Literatura (República de Brasil 37, Centro Histórico del DF), la exposición fotográfica “Los conjurados”, del extraordinario fotógrafo Alberto Tovalín, amigo de varias batallas mediáticas y muy vinculado con Xalapa. En ella, Tovalín reúne 43 imágenes de cuatro generaciones de escritores mexicanos en que el artista, según la nota publicada en el diario La Jornada, “rehúye los gestos solemnes y toda parafernalia escritural y se inclina por el lado más convencional del arte fotográfico”. Entre los escritores que fueron presa de la cámara tovaliana se encuentran Sergio Pitol, Carlos Monsiváis, José Luis Rivas, Álvaro Uribe, Luis Felipe Fabre, Luis Jorge Boone, Jorge Brash, Natalia Toledo, Rocío Cerón y Karen Plata, entre otros. Según el fotógrafo, “después de ocho años de no exhibir de manera individual fue maravilloso realizar los retratos, siempre tratando de descontextualizar a los escritores para mostrarlos en acciones menos formales, en las que destacara su esencia, con un goce estético al utilizar una parte de ellos en la composición”. En las fotografías, no hay poses. Los escritores son tomados en su más rica espontaneidad. El escritor Luis Felipe Fabre consideró que “en las imágenes de Tovalín la literatura se hace presente en su invisibilidad. En verdad, en estas fotos la literatura es el fantasma. Tovalín cambia la estética a los retratos tradicionales al capturar imágenes frescas; no son actitudes acartonadas, inclusive parece gente feliz”. La muestra también incluye retratos de Vivian Abenshunshan, María Baranda, Mario Bellatin, Hernán Bravo Varela, Emmanuel Carballo, Alberto Chimal, Rocío González, Guillermo Fernández, Enzia Verduchi, Marya Inzunza, Daniel Tellez, Carolina Luna, Jaime Chabaud, María Rivera, Myriam Moscona, Fabricio Mejía Madrid, Inti García Santamaría y Mario González Suárez. Habrá que verla.

*** Una lucha perdida, rescatada por Maldonado. El fotógrafo Sergio Maldonado saldrá este jueves del exilio en que se ha mantenido en los últimos años para mostrar, en la Galería Ramón Alva de la Canal, un conjunto de 34 imágenes testimoniales sobre esa larga lucha perdida contra el funcionamiento de la planta nucleoeléctrica de Laguna Verde, repudio que ha rebasado ya las dos décadas de continuas movilizaciones, ahora ocultas bajo una sombra de olvido y desinterés, no de sus protagonistas sino de la sociedad en su conjunto. Las fotografías, la mayoría de ellas en blanco y negro, fueron publicadas en su momento en diversos medios informativos locales y nacionales. Una ocasión para remembrar la mitológica lucha de David contra Goliat.

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