¡Gracias Señor Gobernador!

Javier Duarte de Ochoa

La palabra fidelidad se ha llenado de un sentido totalmente distinto en Veracruz. Más que una palabra, la fidelidad no sólo representa un proyecto político que ha mejorado la vida de muchas familias, sino que para muchos, se ha transformado en un proyecto personal.
Este es un proyecto de vida que involucra largos años de trabajo y que en ha llegado a generar resultados en torno a un objetivo común: la justicia social.
El Estado de Veracruz celebra importantes avances gracias al trabajo dedicado, leal y comprometido de su gobernador.
Fidel Herrera Beltrán ha dedicado su vida a la construcción y consolidación de este proyecto para hacer de nuestra entidad un mejor lugar para vivir, un lugar más próspero, más justo y más igualitario.
La visión de un líder como él ha logrado transformar la realidad veracruzana. Gracias al trabajado continuo y coordinado, este proyecto lleva ya cuatro años entregando hechos y resultados.
El modelo de vida y de desarrollo marcado por la fidelidad se consolidó por medio de un grupo de trabajo liderado por el gobernador.
Fidel Herrera logró unir a un grupo con base en convicciones y valores democráticos y sociales sólidos, así como en el esfuerzo y la dedicación continua, para lograr el establecimiento de una sociedad más equitativa, próspera y segura.
En este sentido, la justicia social ha fungido como el eje de este proyecto. Sólo la visión y el liderazgo que han dado origen a esta nueva generación de políticos han consolidado un proyecto que más allá de los discursos, se ha transformado en beneficios palpables para la sociedad. Hoy, Veracruz sigue creciendo gracias a la unidad que se ha formado en torno a un proyecto común.
Después de haber servido como secretario de Finanzas, me siento orgulloso de pertenecer a una generación de jóvenes políticos que se ha forjado bajo el sello del trabajo, el compromiso y la lealtad de la Fidelidad. Guiados por un hombre que ha demostrado en todo momento estar comprometido con la gente y con su país, esta generación de nuevos valores y de formación cada vez más sólida tiene la tarea de seguir trabajando para generar mejores oportunidades de desarrollo y mayor calidad de vida para la población en su conjunto.
En lo personal, la Fidelidad se ha convertido en una forma de vida caracterizada por la unidad, la confianza, la lealtad, la perseverancia y el compromiso ineludible con la justicia social.
A través de este ejemplo diario, he adquirido un compromiso inquebrantable con el objetivo último de convertir a Veracruz en un Estado próspero, donde las oportunidades de desarrollo no escaseen.
La Fidelidad ha convertido a Veracruz en un estado que cuenta con políticas y estrategias que nos permitirán en un futuro no muy lejano transitar hacia una sociedad más próspera en el ámbito social, político y económico.
El camino no ha sido sencillo, pero hemos aprendido que no hay obstáculo que resista al trabajo en equipo, el esfuerzo y la dedicación.
Mi contribución a cargo de la Secretaría de Finanzas ha sido una que ha permitido a nuestro estado el saneamiento de las finanzas públicas y la generación de recursos superiores a los esperados.
Además, con empeño y dedicación, en un espíritu de unidad y colaboración, hemos logrado implementar nuevos mecanismos de trabajo e innovadores sistemas de recaudación fiscal.
En concreto, se modernizó cada sector de la Secretaría para poner al Estado de Veracruz a la vanguardia y a la altura de las circunstancias que el mundo del siglo XXI requiere.
De esta forma he querido responder a la confianza que se depositó en mi capacidad para guiar las finanzas del estado, al tiempo que he tenido la invaluable oportunidad de aprender y crecer profesional y personalmente.
Por todos estos logros, agradezco la confianza que el Gobernador Fidel Herrera Beltrán ha depositado en mi persona. Sin su apoyo y su ejemplo mi trayectoria personal y profesional sería quizás muy distinta.
El lazo que me une a las convicciones y las enseñanzas que he recibido de Fidel Herrera, no es sólo uno de lealtad política, sino uno más sólido de entrañable lealtad personal.
Al dejar la Secretaría de Finanzas y Planeación, no puedo más que reiterar mi firme compromiso con la fidelidad y sus principios.
Y sólo me resta agradecer la oportunidad de crecer en lo personal y en lo profesional a través del ejemplo diario de que hacer una diferencia en la sociedad, es posible.