jueves, 26 de febrero de 2009

¡Pa’ ponernos de buenas!

Salvador Muñoz
Los Políticos

A menudo, cuando salgo a pasear con “Harry”, mi compañero, amigo y mascota, me gusta hacer un trabajo de análisis del comportamiento humano ante la presencia de mi Scotish Terrier.
¿Cómo?
Muy sencillo.
Camino con Harry y si una persona hace una exclamación como “¡Miraaaaa! ¡Qué hermosoooo!” puedo ver en ella a un ser sensible.
Caso contrario la gente que pasa con una indiferencia total hacia mi cachorro… creo (es mi tesis) que esa persona guarda una neurosis terrible e insensibilidad para con lo que le rodea…
Dicen, a mí no me crea, que esas reacciones están controladas por la serotonina, de acuerdo a su mayor o menor cantidad.
Es decir, a mayor serotonina, más alegría. O menor escala, mayor agresividad o depresión.
Todos tenemos esa sustancia pero que se mueve de diferente forma en nuestra cabeza. Pero dicen los científicos que quienes tenemos reacciones de alegría o emoción ante imágenes como la de mi cachorro, es gracias a un gen con un nombre chistoso: 5-HTTLPR o simplemente “LL”. Le llaman también el gen de la felicidad.
Este gen nos lleva a la aversión a lo feo (quizás por eso le temo a “El Exorcista”), rechazamos lo negativo y ora sí: ¡le decimos “bu” a los malosos.
Por eso, si usted reacciona con rabia cuando unos desalmados (omito la palabra “hijos de la chingada” para no verme vulgar) tienen maniatado de extremidades y boca a un niño de seis años desnudo en el fondo de una cisterna, y cree que esos sujetos merecen la muerte, ¡su gen LL está perfecto!
Ahora que si usted reacciona con un “¡Qué poca madre!” ante la intención que tuvieron los consejeros y presidente del IFE de querer ganar 330 mil pesos al mes y le dan ganas de ir a “mentarles su madre”… ¡su serotonina está trabajando al cien por ciento! (¿A poco no vienen a ser estos funcionarios la comedia política de la película ganadora de ocho oscares “Quisiera ser millonario”?)
Pero, ¿quiere hacer su propia prueba para ver cómo anda su Gen de la felicidad?
Vamos con una prueba sencilla:

1.- ¿Qué le irrita más? ¿Saber que Rihana fue golpeada por su pareja estando embarazada o saber que un diputado local perredista golpea a su pareja?
a) El esposo de Rihana…
b) Bernal…
c) Los dos…

2.- ¿Le da risa que el gobernador diga que es una telenovela que supuestamente el secretario de Gobierno ande espiando a Alberto Silva Ramos, subsecretario en Sedesma?
a) Me da igual…
b) Me hago pipí de la risa…
c) Me da pena…

3.- Le causa risa y copia frases del Ferras (por cierto, Rey del Carnaval en el penal de Allende).
a) Sí… “la bebes o la derramas” ¡qué frase!
b) ¿Quién es el Ferras? (buscarlo en youtube)
c) Más que risa me da miedo…

4.- ¿Hace un entripado cada vez que el dólar alcanza los 15 pesos?
a) No, porque tiene unos dolarcitos guardados…
b) Le es totalmente indiferente.
c) Sufre pero no lo entiende.

5.- ¿Le da coraje saber que hay gente que gana más que usted por tener una buena “palanca”, por ser familiar de periodista o por ser el “quelite” del jefe?
a) ¡Me vale! Con que tenga trabajo yo, me basta…
b) ¡Soy de “esos” que ganan más!
c) ¡Claro! ¡No en balde me quemé las pestañas cuatro años!

Si usted contestó todas las “C” o cuatro de ellas ¡lo felicito! Tiene su gen “LL” a toda madre y no haciendo caso a mis tests estúpidos puede tener una vida feliz.
Por supuesto, sabemos que usted va a reaccionar ante la injusticia, la desigualdad, el abuso y la prepotencia… así que haga todo lo posible por transmitir ese gen a su descendencia o mínimo, contaminar con su optimismo a quien tenga a su lado…

* Cayitos con los embajadores fieles *
El encargado de Finanzas, Chava Sánchez Estrada, y el Subsecretario de Infraestructura Regional de la Sedesma, “el cemental rojo” Alberto Silva Ramos, otorgaron a 11 jóvenes veracruzanos provenientes de todas las regiones de Veracruz, los apoyos correspondientes al convenio que se tiene entre el Gobierno del Estado y el “The Washington Center”, mediante el Programa “Embajadores de la Fidelidad”. A nombre del Ejecutivo Estatal los alumnos estarán por un lapso de 5 meses en la capital norteamericana, comprometiéndose a la aplicación de los conocimientos adquiridos a su regreso a la entidad.

e-mail: dor00@hotmail.com

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