Influenza, cubrebocas y viejitos

Salvador Muñoz
Los Políticos

En estos momentos, en la Ciudad de México, hay un tema que, paradójicamente, mientras en los medios de información masiva se difunde cual virus, en los hospitales se está prohibiendo su simple comentario: La Influenza.
¿Por qué? No lo sé… amigos médicos del altiplano, me envían mensajes… hay preocupación en ellos.
Tengo un primo en el DF con una empresa dedicada a fabricar productos para la salud. Dice que tiene las mejores marcas de equipo médico y material de laboratorio.
Ayer me comentaba vía Messenger y radio que acababa de vender cuatro mil cubrebocas a una mujer con facha de vendedor ambulante.
Aunque puede ser considerada la gran venta, no lo fue… cobró aproximados un mil 800 pesos.
El paquete de cien piezas vale 37 pesos pero está seguro que la mujer habrá de sacarle el doble de lo que invirtió… o más.
¿A qué voy?
Al parecer, en la ciudad de México, ya hay gente que quiere sacar provecho de la epidemia de la influenza.
Porque, como explicaba mi primo y a la vez un amigo médico, no cualquier cubreboca sirve.
Ambos, el empresario y el médico, me explicaban que para este caso, es mejor un cubrebocas de Alta Especial o con filtro, que protegen mejor ante virus como el que se enfrenta en estos días.
En otras palabras: Un respirador contra partículas comúnmente usado por soldadores, marca 3M modelo 8512, N95, aprobado por la NIOSH.
Es decir, de acuerdo a la NIOSH, ofrece un 95 por ciento de protección lo que NUNCA un cubrebocas de a peso te dará.
Breve paréntesis:
(El NIOSH es el Instituto Nacional de Salud y Seguridad Ocupacional, agencia federal encargada de hacer investigaciones y recomendaciones para la prevención de enfermedades y heridas asociadas con el trabajo y es parte de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Hace investigaciones relacionadas con todo lo que tiene que ver con las enfermedades y lesiones ocupacionales, desde la enfermedad pulmonar de mineros hasta el síndrome del túnel carpiano de usuarios de la computadora)
Ahora, volviendo con el cubrebocas o respirador contra partículas, hay un hermoso “pero”. Si oyó las noticias, estará enterado que aparte de las vacunas, no hay suficientes “cubrebocas” más que para médicos y enfermeras.
¡Ah! Ahí entra la magia de la burocracia.
Cuando los médicos hacen sus requisiciones, digamos el caso del famoso “cubrebocas”, las empresas no siempre tienen el stock aquí en México ya que es de “importación”.
Por supuesto, la Secretaría de Salud se pone sus “moños” para sacar los permisos de importación. Luego entonces… es difícil que lo encuentre. Si va a una farmacia le van a vender un “cubrebocas” de a peso.
¿Qué harán entonces en este momento allá en la ciudad de México?
Lo más seguro, hacer una excepción a sus “reglas” para importarlos rápidamente aunque un permiso de importación fácilmente se puede llevar un mes si bien nos va.
Por lo mientras, hay contingencia en todos los nosocomios. No hay permisos, no hay vacaciones, todos, enfermeros, médicos, estudiantes, están concentrados.
Incluso, se habla de que, si sigue en aumento el número de casos, van a tener que poner en cuarentena a los Hospitales.
Un consejo que me dio mi amigo médico es que trate de conseguir esos cubrebocas que en el mercado estarán a 65 pesos por diez. La cosa es protegerse ¡por si las moscas!
Otro consejo, es que este fin de semana, me arme de alimentos de latas, porque es posible que, al menos en México, los centros comerciales como Chedraui, Wal-Mart, etcétera, no concentren a tanta gente por prevención… ¡ojo!
Y el último y más importante, a manera de que no nos agarren desprevenidos… aunque, antes de cualquier cosa, por favor, consulte a su médico de cabecera: Rimaltadina y Antiflu-des… pero por favor… insisto: No se automedique… le cuento una plática y los consejos que me dio un doctor… Lo mejor, si usted se siente mal, es que acuda al médico…
Ojalá las cosas mejoren… aunque mi primo, el empresario, se queja de la despreocupación que ve en los chilangos, pues usan cubrebocas a la altura del cuello. Le pregunto:
–¿Y tú andas con tapabocas?
–¡No!
–¿Por qué? No te quejas de la falta de preocupación de los ciudadanos?
–Pues sí, pero si me pongo uno, entonces ¿qué vendo?
No es broma… así me lo dijo.

PD Llegó el jueves, llegaron las pensiones a los viejitos del Asilo, llegó el dinero… pero ni Rosa Borunda llegó ni llegaron las respuestas de lo que ocurre en el Asilo Sayago… ¿silencio cómplice? ¿Sobrevivirán los viejitos este año? ¿O porque no hay presupuesto destinado para este 2009 al asilo por eso les dieron las pensiones? ¿Lara Careaga ya estará trabajando sobre ello? ¿Antiga Tinoco hace mutis? ¿Timoteo Aldana dejará que se ensucie su trayectoria? ¿Y Lila? ¡pobres viejitos!