El “ojo de buey” de Tío Fide

Salvador Muñoz
Los Políticos

Hace algunos años, Fidel Herrera llegó a la Parroquia del Centro, acá en Xalapa. De inmediato fue abordado por los reporteros y fue entrevistado. Durante la plática, una reportera se percató de un reloj que portaba el senador… ¡era rojo y sencillamente hermoso!
Tras la entrevista, la reportera no dejó de “chulearle” el reloj, el cual, explicaba Fidel Herrera, había sido regalo de un grupo de buceadores que, si no mal recuerdo, practicaban en la zona norte, allá “arribita” de Costa Esmeralda. A lo mejor la memoria me falla…
Sé que está mal decirlo, pero Tío Fide, en un arranque de generosidad, ante el cúmulo de “chuleos”, se quitó el reloj y se lo regaló a la reportera que, al principio, lo rechazaba ante mis ojos mientras que, en mi interior, me reclamaba el por qué no se lo “chulee” yo… al final, el hermoso reloj rojo para buceo acabó en la muñeca de la compañera reportera.
Hoy, circula por la Internet una crítica al gobernador por llevar en su muñeca un reloj suizo, Hublot, Big Bang 44 mm.
El Hublot nace a principios de los 80 del siglo pasado. En tan poco tiempo, se ha posicionado en el mercado por su buen gusto y porque puede adaptarse a lo formal o informal, de acuerdo a su creador, Carlo Grocco.
Esta firma tiene una peculiaridad, patrocina luchas, ideales y valores, como la del 2005, acompañada de Ronaldo y Zinedine Zidane, durante un encuentro de futbol contra la pobreza. ¡Allí nació el Big Bang! Con una leyenda peculiar al reverso de la caja: “El partido contra la pobreza”. Por supuesto, el modelo fue subastado en un evento de caridad. Las ganancias, a proyectos destinados contra la pobreza.
En el Mundial 2006 hizo una edición especial para Suiza con el logotipo de la federación en la carátula. ¿Y qué creen? La Federación Mexicana de Futbol también tuvo su edición de 250 ejemplares. Dicen que esa vez hubo un reloj especial con esmeraldas en el bisel. ¿A quién se le habrá quedado?
En la Eurocopa 2008, quizá recuerden los amantes del fut, Hublot renuncia a sus anuncios en la cancha para dar espacio a una fundación contra el racismo.
Hace un año, el Hublot fue el cronometrador oficial de los “Rojos”… no… de los fidelistas no… del Manchester United, donde militó Cristiano Ronaldo.
Por cierto, ¿sabe cuánto va a ganar al día este talento de jugador portugués en el Real Madrid? ¡486 mil pesos! ¿Y sabe cuánto dicen que se gastó en una farra con Paris Hilton? ¡20 mil dólares en una noche! Es decir 260 mil pesos.
¿Le sorprende? ¿Le molesta? ¿Le causa envidia? ¿Usted haría lo mismo?
Dicen que el reloj que trae el Gobernador cuesta 585 mil pesos. Es decir, 45 mil dólares. Aunque buscando en la web uno encuentra un Hublot en 26 mil 730 dólares, es decir, casi 348 mil pesos; o en Mercado Libre uno de nueve mil dólares o 117 mil pesos. Ahora que, siendo más exhaustivo y ahorrativo, hay unos de 2 mil 300 pesos que igual ¡dan el gatazo!
¿Cuál cree que se podría comprar usted si tuviera las mismas posibilidades que el Gobernador?
A lo mejor ninguno y esperaría como yo, a que le regalaran un reloj como lo ha hecho mi esposa, mi buen amigo Pedro Manterola o mi buen amigo Cecilio García.
Aquí, curioso, yo no criticaría al Gobernador por traer un reloj (no sé si él se lo haya comprado) de marca… bueno… tiene que ser de marca para poder marcar la hora (chiste sebo)… porque tendríamos que criticar al tipo que trae una Hummer… al que trae un carro Jaguar… al vecino que estrena vehículo nuevo cada año… al que tiene y puede…
Si el gobernador gana para comprarse un reloj de la marca que quiera, puede hacerlo siempre y cuando no toque nuestro dinero y sencillamente, el gobernador no sería tonto para hacer eso… si Cristiano Ronaldo gana para chuparse en una noche 20 mil dólares de alcohol, puede hacerlo, eso sí, los “merengues” le van a exigir un campeonato… si un neurocirujano estudió para cobrar 50 mil pesos o más en una operación, puede hacerlo, siempre que nos mantenga vivos… habitamos un mundo capitalista, de competencia, de habilidades…
Pero si de criticar se trata, más criticable puede ser para un reportero que el carro de Carlos Hermosillo le aplaste el pie a una niña y no haya tenido la amabilidad de trasladarla al Issste para su observación…
Más criticable puede ser que un administrador ordene que se bañen los lunes, miércoles y viernes a los ancianos del Asilo Sayago y ningún reportero haya abogado por ellos…
Más criticable es la secrecía sospechosa con la que maneja Marcos Theurel sus licitaciones, revisiones y auditorías en Secom…
Más criticable es que Veracruz ocupe el primer lugar con niños trabajadores cuando debieran dedicarse de lleno al estudio…
Más criticable es que haya reporteros, columnistas o dueños de periódicos que se hagan ricos y se hayan olvidado de servir a la sociedad…
¡Pero criticar un reloj!
Quizás lo único criticable al gobernador sería el que no trajera uno con los que festejaron 130 años de vida del Manchester United… ¡color rojo!
Ahora que, si se trata de fregar al Gobernador, qué le parece si, cuando encontremos a Fidel Herrera, le “chuleemos” el Hublot (Ojo de buey en francés)… ¡quién quita y se lo chingamos!

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