Cambios que sí funcionan

Salvador Muñoz
Los Políticos

Hacer el cambio preciso en el momento preciso pocos lo saben hacer.
El cambiar implica por lo regular positivismo, el ánimo de querer hacer mejor las cosas o en el peor de los casos, componer las cosas.
Quien observa a quien ejecuta esos cambios, es dado a criticar antes, en y después del suceso (ahí entramos quienes opinamos).
Si el sujeto que incursiona está en su ánimo, lo pondera incluso hasta alaba a quien ordenó el cambio.
Pero si no, le parece inconcebible los movimientos hechos por quien manda.
Afortunadamente, los cambios que se dieron ayer estuvieron de lujo, se notó el toque, el conocimiento del mandón, la experiencia y la noción de lo que se quiere…
Por eso, los relevos que hizo ayer Javier Aguirre dieron paso al triunfo de México ante Estados Unidos en la Copa de Oro…
¡Ah! Cierto, también hubo cambios en la aldea… pero éstos fueron políticos.
Pero igual, son sacudidos por las mismas inercias.
Tonicho, Cabeza de Lata, a Sedesma.
Silvia Domínguez, a Protección Civil…
Ángel Álvaro Peña, el compa de Joaquín López Dóriga, a Turismo.
Jerónimo Folgueras Gordillo, al Instituto Veracruzano de Desarrollo Municipal.
Fernando Arteaga Aponte, delegado en el Puerto de la SEV.
Luis Fernando Antiga Tinoco, ¡por fin! Titular de Salud.
Como dijimos líneas arriba ante los cambios de Javier Aguirre: Hay quienes cuestionan y critican los relevos… igual fenómeno ocurre con los de Tío Fide.
A lo mejor no se juzgue tanto que Tonicho Márquez llegue a Sedesma como sí se haga con Silvia Domínguez en Protección Civil.
Se puede tachar a Cabeza de lata de lo que usted quiera, pero menos de tonto.
A Doña Silvia lo que se le puede juzgar sería su pasividad y algo muy importante en política: No parece Secretaria de dependencia alguna. ¿Se la imagina como al mismo Tonicho o Tío Fide, enfundada en sus impermeables, con sus botas, en medio del lodo? afortunadamente, dijera Rolling Stones (Time is on my side), el tiempo está del lado de Silvia Domínguez… un año para llevársela como se la ha llevado en este sexenio… nadando de a muertito.
El caso de Ángel Álvaro Peña es interesante… si se juzgaba a Jerónimo Folgueras porque decían que poco o nada sabía de Turismo, puede ocurrir con el periodista lo mismo… aunque, claro, para ello hay asesores (igual como con los diputados) y si bien se veía un trabajo activo por parte de Folgueras en Turismo, se entiende que si Álvaro Peña mantiene al mismo equipo funcionará igual o mejor dicha secretaría. ¡Ah! Sin contar con el apoyo que pueda tener de su compadre López Dóriga en la promoción de Veracruz... y del mismo Gobernador.
Fernando Arteaga Aponte vuelve a la SEV… ya antes fue delegado en Martínez de la Torre. Su cambio, dicen los malpensados, obedece más a su relación y cercanía estrecha con el “adelantado” Héctor Yunes Landa. La posición que guardaba en el Instituto Veracruzano de Desarrollo Municipal, comentan, se prestaba para que filtrara información o contactos a su amigo “adelantado”… bueno, pero ésos son rumores.
En el caso de Antiga Tinoco se reflejan las tres M’s que tiene siempre un político…
Merecimiento, mérito y “merito”.
En su caso se aplica a la inversa: Siempre fue él “Ya merito” y nunca le tocaba aun con los “méritos” que le podían dar de manera simple tal secretaría. Ahora sí, se la “merecía”.
¿Por qué sale Lila? Ni idea… pero su trabajo aparentó honestidad, dedicación y honradez… ojalá Antiga Tinoco continúe esa línea que aparentaba el doctor Lila de Arce.
Se insiste: Todo cambio anuncia mejora… Tío Fide sabe sus tiempos, se da sus pautas, conoce a sus hombres… puede que los cambios sean buenos ¡pero habrá que ver ahora qué tal juegan en esas posiciones! Porque está visto y demostrado hasta el momento que los únicos cambios que realmente han funcionado son los del Vasco Javier Aguirre.

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