¿Negrito que no sabe nada?

Jorge Arturo Rodríguez
Tierra de Babel

Mientras presenciamos la violencia y vemos como si nada en las calles “cada cuerpo con su respectiva bala”, expresara cierto reportero de televisión, y a pocos días de que se cumpla un año del secuestro y asesinato del niño Fernando Martí, hagámonos de la vista gorda, sigamos sobreviviendo, el show debe seguir, y creámosle a nuestro Presi Calderón que algún día México será libre y viviremos en paz, como el clásico final de los cuentos “y vivieron felices todo la vida”. ¡Sí!
Mientras, repito, juguémonosla –sin albur-, y sigamos creyendo, sobre todo el hecho reciente de que ganó el PRI la mayoría en la Cámara de Diputados y que ahora sí vienen tiempos mejores. Pero para ello, como bien lo dijo mi Gober Fide, lo que toca ahora es aportar soluciones.
El PRI del empleo y de la seguridad, dijo mi Gober Fide, fue el que ganó en las urnas, “menos triunfalismo y más responsabilidad”, sostuvo, y exhortó a los diputados federales priistas electos dar resultados. Pos sí, de eso se trata.
Enrique Ortez, canciller del gobierno golpista en Honduras, cuando se le preguntó sobre la postura de Estados Unidos, respondió que el Presidente Barack Obama, "ese negrito no sabe nada de nada". Aquí, en Veracruz, sin racismo ni nada por el estilo, nuestro negrito se las sabe de todas, todas, porque bien sabe que si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo. (Lo dijo Albert Einstein).
Ojalá sepan escuchar y atender el reclamo de la sociedad: ¡Que cumplan los diputados! Y ya no ofrezcan tanto, porque bien sabemos que nadie ofrece tanto como el que no va a cumplir, a según Francisco de Quevedo. Pero también que se midan en sus gastos, viáticos, entretenimientos y demás, que no sean –ya basta, ¿no?- como las pasadas legislaturas; vaya, por poner un ejemplo, como la 60 Legislatura saliente cuyos gastos médicos durante sus tres años de ejercicio costó 155 millones 892 mil pesos, incluyendo a familiares y quién sabe si hasta a amantes y amigos. ¡Qué bonita familia! No La Familia michoacana, eh. Porque si de eso se trata, me uno a lo dicho por el escritor José Agustín, en el sentido de que “los narcos no son peores que muchos políticos ni que otros tantos empresarios”. ¿Quién da más?
Sostengo, con el autor de “Inventando que sueño”, que “a mí no me interesa el pedo moralmente, quién sea el bueno o el malo. Para mí tú eres el malo de la película, pero al mismo tiempo eres el bueno. Yo estoy de acuerdo con Puzo, los mafiosos tienen su lado humano, no son tan descalificables como el presidente dice; o lo son tanto como los empresarios, los banqueros, los grandes financieros y los políticos o los gobernantes de los países. Si nos ponemos a ver qué tan devastadora ha sido la influencia del narco en México, comparada con la devastación de Fox y Calderón, yo creo que va pareja. Y por eso coinciden”. (Revista Proceso No. 1795/7 de julio/2009). Y se quedó corto mi querido escritor de la onda.

Los días y los temas
En el Congreso del Estado: ¡Habemus magistrados electorales¡ ¿Y ahora mis estimados abogados Daniel Ruiz Morales, Gregorio Valerio Gómez y José Lorenzo Álvarez Montero, pa’ cuando el Urbi et Orbi? Bueno, total, tienen 10 años para ello. A ver que tal nos va a nosotros, porque, a según, el Tribunal Electoral del Estado es el órgano especializado en la materia que contribuirá de manera permanente a brindar mayor certeza jurídica a los actos y resoluciones electorales, es decir, de las elecciones del 2010 para diputados locales, presidentes municipales y gobernador. ¡Pácatelas! ¿Les creemos?
Pero entre que son peras o manzanas, si Chana o Juana, propongo mejor que desde hoy vayamos despertando, ya falta poco, conocer a los candidatos, seguirlos en cada una de sus promesas de campaña y auto bendecirnos de un chingo de paciencia, pa’ no mandarlos a la chingada… Tantan.

De cinismo y anexas

* Tan rebién estamos que ya somos 80 millones de mexicanos en la pobreza. Bueno, según el exagerado Julio Boltvinik, investigador del Colegio de México, porque yo no los veo por ningún lado, salvo uno que otro por las calles donde camino, incluso en reportajes. No contento Boltvinik, al pedírsele precisara el dato, contesta que “el número de pobres abarca algo así como 75 por ciento de la población nacional, es decir, 80 millones de habitantes. (La Jornada/21 de julio/09). Chale, medio exagerado el tipo, ¿no? No tiene ni tantito el optimismo de Calderón, mucho menos de Carstens.

Hasta la próxima
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