Marcelo, Marcos y Coatzacoalcos
Claudia Guerrero Martínez
Entre lo utópico y lo verdadero
La efervescencia por el inicio del proceso electoral del 2010 se pone caliente. Las decisiones en este momento son claves en el futuro de un partido y de un candidato a la Gobernatura de Veracruz. Analizando, el PRI le será más difícil conservar y mantenerse en el poder, que el PAN en ganarlo. Las estrategias para estructuras políticas y electorales ya se están integrando en estos partidos y se espera la elección más competida en la historia de Veracruz.
Durante los últimos días, hay temas que han repuntado en forma feroz y lo demarcamos así, pues los señalamientos de la ciudadanía, la prensa estatal y nacional han sido parte fundamental para dar una sacudida al Gobierno de Fidel Herrera Beltrán. Y todo, por la aprobación del Paquete Fiscal del 2010.
El PRI, ante la aprobación de la Miscelánea Fiscal, ha sido seriamente cuestionado y hasta algunos, aseguran que se olvidó la propuesta original del Presidente de la República, Felipe Calderón, apoyada incondicionalmente por el PAN en el aumento al 2% en medicinas y alimentos. El partido tricolor afronta los señalamientos de ser traidor de quienes votaron por ellos, pues argumentan los votantes haber creído en sus promesas de campaña. La retórica que utilizó el PRI durante sus campañas y después de ellas, fue determinante: “Estar en contra del aumento a los impuestos por el bien de los mexicanos, pues el PRI trabaja en forma responsable”. Al final no lo cumplió…
Esta frase lapidaria, que se utilizó durante meses, se cayó en unas cuantas horas, cuando los cotos de poder políticos acordaron con el mandatario federal y por consiguiente, los diputados federales acatarían órdenes de su partido político. Lo interesante de este caso, son los diputados que hicieron caso omiso a su partido yéndose por la libre, como el caso de Ricardo Ahued Bardahuil, quien se dice, hizo berrinche y no se presentó a las juntas de la Comisión de Hacienda, la cual es miembro, por no haber tomado en cuenta su opinión y se negociara las iniciativas en las altas esferas políticas, cuestión normal en la práctica de la política de México y nadie le pasó a Ricardo Ahued el acordeón legislativo ni le explicaron la forma en que se realizan negociaciones en el Congreso de la Unión y hasta en el Senado de la República.
Por otro lado, Javier Duarte de Ochoa, quien ha dicho hasta el cansancio ser el “Mesías Salvador de la Crisis” y tomar como estandarte no permitir la aprobación de más impuestos, afectando a los mexicanos, finalmente se tuvo que tragar sus palabras y votar a favor todo lo que se le ordenaba y en otras, estuvo ausente por que tuvo cosas más importantes por hacer, que estar pendiente de las aprobaciones de estas rudas iniciativas, que marcarían el rumbo del país. A Duarte de Ochoa, eso no le importó.
Ahora, el diputado federal por Córdoba explica a los medios institucionales, quienes al parecer no analiza el discurso del exsecretario de Finanzas o algo lucrativo se los impide, las incongruencias que declara, como el día de ayer al decir:”No se saldrán con la suya los panistas en el IVA”. Con estas incongruencias de un diputado plástico, a quien le pagaron un triunfo dentro de la ilegalidad y la compra de votos, ahora sigue gastando nuestros impuestos en pagos de notas insertadas y fotografías planeadas con actores políticos, quienes están inconformes por la imposición de éste, por parte de Fidel Herrera Beltrán.
En los últimos meses, El Gobernador de Veracruz ha sufrido descalabros en la prensa nacional, haciéndose acreedor a las críticas de medios de comunicación, que piensan y analiza o peor aún, ya no puede estar “disfrutando” de los eventos públicos, por las manifestaciones de personas inconformes, quienes a lo largo de su administración, han sido engañados con promesas y papeles, conteniendo la firma del mandatario, de las cuales, la mayoría no son cumplidas.
Peor aún, cuando Fidel les ha dicho a estos manifestantes que los recibirá en su oficina, o les dará sus bases, o les pagará sus ahorros, o realizará carreteras, o construirá aulas, o edificará puentes. Las promesas ya no surten efecto y la enardecida muchedumbre no se calla, por eso, El Mandatario Estatal suelta su lenguaje coloquial con una frase célebre “Oh, que la chingada”, ante los micrófonos en la inauguración del Puente Pípila, la cual quedará para posteridad.
Las malas decisiones lo persiguen al ejecutivo estatal y le cobran facturas, como la venta de los Tiburones Rojos, además, las dos, tres o cuatro bursatilizaciones que endeudará a Veracruz por décadas, llegando ésta a arañar los 34 mil millones pesos; los comodatos o donaciones de predios a nombre de Gobierno del Estado, propiedad de los veracruzanos, cedidas a amigos políticos; la donación de edificios o terrenos a Sindicatos, haciéndolos más ricos de lo que son, con el propósito de pagos políticos electorales y la subasta de automóviles, camionetas y demás transporte propiedad de Gobierno del Estado, estando en buenas condiciones y rematándolos a precios de risa, los cuales, son adquiridos por los propios funcionarios, quienes saben de las óptimas condiciones de los vehículos.
Además, los cambios en su gabinete, quitando a los menos malos y dejando a los más pésimos funcionarios, para evitar filtraciones de información, ya que saben mucho y es mejor tenerlos cerca. Muy al contrario, de un Gobernador quien dice una cosa y hace otra, ayer dice mucho y mañana se retracta, echa la culpa a los medios de comunicación o mejor aún, cuando suelta sus frases coloquiales, ante una eminente desesperación porque se le acaba el poder en Veracruz.
Todo esto origina malas decisiones y pasarse por el “Arco del Triunfo” al Honorable Congreso Local, con la reciente “Venta-enajenación gratuita-título oneroso” o como se quiera decir, al omitir el “pequeño detalle” de la venta del Agrocentro Siglo XXI por 200 millones de pesos, los cuales, se había realizado el compromiso legal con antelación, sin haber llevado el protocolo de deslindar este inmueble de las arcas estatales con la aprobación del Congreso antes de realizar su venta. Fidel hizo todo lo contrario, se reunió con los empresarios chinos, quienes querían invertir en Veracruz y para no dejarlos ir, les dieron todas las facilidades y como cereza en el pastel, venderles el Agrocentro, por 200 millones de pesos, el cual el día de hoy todavía se debe, pues aunque se haya pagado de la bursatilización, se cambió de una deuda a otra.
Mientras depositaba la empresa china el dinero pactado, el Ejecutivo Estatal pasaba a sus aliados, los diputados priistas, en una Sesión Permanente, sin broncas y sin problemas, autorizar en fast track, omitiendo su venta y con el argumento de ser enajenación gratuita. Se filtra la transacción y el monto, sin tener más remedio de reconocerlo el Coordinador Político, diputado Fernando González Arroyo.
Ahora, al PAN le da elementos para entablarle una denuncia penal por peculado, abuso de autoridad e incumplimiento de un deber legal, pues violentó la soberanía del Congreso, no deslindó o licitó el inmueble, omitió la venta y el dinero.
Ahora, se publica ante los medios institucionales una posible anulación de contrato y presuntamente la empresa china podría cancelar el convenio, que presumimos no ser posible, pues debe tener cláusulas que se amparan ante un incumplimiento o retractación entre ambas partes, con una penalización de por medio. Culpar a los panistas y a medios de comunicación de errar la información, son estrategias para desviar la atención de la ciudadanía acusándolos de maximizar los problemas de Veracruz.
Esta misma práctica la realizaron cuando, violentaron todo contexto constitucional ante la venta frustrada de los Tiburones Rojos de Veracruz, en un precio de morralla, para luego, al explotar la bomba, por ventilar la violación a la Constitución, argumentaron tener la culpa la oposición y los medios de comunicación independientes de “Espantar al cliente”. Nosotros nos preguntamos, qué más se va vender, regalar o donar de los veracruzanos. Algunos ya le dicen a Fidel Herrera Beltrán el “Nuevo López de Santana Moderno”…
Marcelo, Marcos y Coatzacoalcos
De manera discrecional, la Secretaría de Comunicaciones está ayudando a las aspiraciones del Secretario de Comunicaciones del Estado, Marcos Theurel Cotero para la Alcaldía por Coatzacoalcos. Usted se preguntará: ¿Cómo desvían recursos? Muy fácil. La Ley Orgánica del Estado estipula que todo recurso que salga de esta dependencia lo debe firmar Octavio Gil García, Jefe de Unidad Administrativa, a quien le envían los documentos, por conducto de una empleada de nombre María Isabel. Ante un acuerdo privado de colaboración para promocionar la imagen de Marcos Theurel, Octavio Gil firma los documentos para captar recursos destinados a la estructura política en ese municipio.
Al ser filtrados estos recursos en beneficio de este secretario de despacho, actualmente su exesposa Katia Aguirre le interpuso una demanda por pensión alimenticia y se comenta pedirle hasta el 60% de sus ingresos totales. Ante esto Víctor Rodríguez Gallegos, Secretario del Ayuntamiento de Coatzacoalcos lo está ayudando por órdenes del Alcalde Marcelo Montiel.
Rodríguez Gallegos, quien cuenta actualmente con 25 juegos de placas de taxi, de las cuales, son prestanombres sus familiares, también tiene en su haber un quebranto patrimonial en Ciudad del Carmen y se quedó con los activos de la empresa como retroexcavadoras y pailoders, además de tener vicios caros. También es aliado del Director de Ingresos Manuel Ponce Ruiz, quien ha sido acusado de ser prepotente y abusivo y cuenta con varias quejas ciudadanas. Otro más de la “pandilla”, es Mario Oriani Hermida, quien es Director de Comunicación Social del Ayuntamiento de Coatzacoalcos y además cobra 23, 900 pesos en Acción Social del Estado, como aviador.
Pero eso no es todo, hay un video, en el cual se involucra al hermano del diputado local Gonzalo Guízar Valladares y fue otorgado por TV Azteca Coatzacoalcos al Honorable Ayuntamiento de ese municipio, para atacar al diputado por el distrito de Coatzacoalcos, quien tiene aspiraciones a ser candidato para Presidente Municipal. Al saber el mal uso de este video, los directivos nacionales mandaron a llamar a Mónica Ricardez y a Tamara Corro, Reportera y jefa de Información, respectivamente, para que dieran explicaciones del uso de este video, propiedad de la empresa. Más adelante, fueron despedidas por culpa directa de Marcelo Montiel…
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