De Ariel a Ragueb

Salvador Muñoz
Los Políticos

Ariel Gómez León, diputado federal que tuvo la mala ocurrencia de hacer una broma con micrófono abierto sobre el color de los haitianos, es víctima de la Santa Inquisición que vio en él, al chivo de todas las bromas que han surgido en la desgracia.
Sí, su error fue ponerle nombre y apellido a un chiste que podría hacerse en grupito y todos morirse de risa, pero en público, atenta contra la moral de muchos.
Dijo que a los haitianos había que ponerles tinta indeleble blanca (por el color de su piel) para que no se les repitiera el apoyo en la comida y no hubiera abuso en ello.
Como todos los chistes de desgracias, es cruel y lo peor del caso, lo dice un representante popular… ¿y si lo hubiera dicho “Platanito”? ¿o en “Guerra de Chistes”? A lo mejor no pasa de una manifestación y a la semana se olvida… como seguro habrá de pasar con Ariel, pero a él le costó la “expulsación” del partido al que apenas acababa de ingresar: PRD.
Pero, chistes de desgracias siempre hay…
* Recuerdan por qué los de San Juanico estaban enojados con los del DF… porque la movida del DF estuvo mejor que el reventón de San Juanico.
* ¿O saben por qué se le cayó a Montano la candidatura a la Gubernatura hace más de cinco años? Porque Alemán dijo: “Va el de la Mano Negra”.
* ¿Saben por qué Juan “Chuperto” fue a Tlacotalpan? Porque le dijeron que a los bueyes los “empedan” para cruzar el río y quiere aprender a nadar.
* El atentado a Cabañas fue por rivalidad partidista… “¡A que te la parto!” “¡A que no!” “¡A que sí!” “¡A que… pum!”
* Que si hubiera estado Juangabriel en el Bar Bar, el atentado lo habría cometido el Joto Joto…
* En Indonesia, después del Tsunami, está prohibido saludar con un “Hola” porque corren…
* En Haití, nadie quiere refugiarse en Veracruz porque hay muchos pedos con Tembladeras…
* Tras las inundaciones en Costa Esmeralda, Tecolutla y Casitas, allá por 1999, dejaron de comer “tortas ahogadas”.
* O el de la Influenza… ¿por qué entró tan fácil a México este virus? Tenía muchas influenzas…
En fin, que si seguimos rascando, créame que hay más chistes crueles pero anónimos, que no tienen dueño como lo tuvo el de la tinta indeleble blanca.
Y teniendo un chivo, pues es más fácil llevarlo al holocausto, que pague por todos los chistes crueles, por esos chistes que nos hacen reír u obligan a decir ¡no maaaaa….no no!
No expío de culpa alguna al diputado chiapaneco pero estoy de acuerdo con él… ya lo decía Pedro Infante: ¡Viva mi desgracia! Así somos, nos reímos, lloramos y reímos y si no, ahí está el investigador de la UV, Ragueb Chaín Revuelta, si bien es un hombre inteligente, buen elemento entre la gente del rector, tiene un ¿humor? ¿forma de ser? No sé cómo decirlo, para tratar a la gente.
Es de esos personajes que gustan de adjetivar al personal, ya le dice “pulga”, “pinche negro” o hace ademanes en una mímica formidable para decir “babas” o “tonta” a la gente que le rodea. No tiene pelos en la lengua el director de Administración Escolar de la UV porque dice que a él de chiquito “Me enseñaron que cuando quiera decir una grosería, la diga”.
Si es así, la forma de trabajar o ser jefe es un estilo… que puede caer bien como un buen chiste, o tan mal como la declaración desafortunada de Ariel Gómez León.

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