El eco del PRI

Salvador Muñoz
Los Políticos

Si usted pregunta a los priistas de Veracruz cuál es su carta más fuerte en estos momentos, sin dudar, responderían…
a) Fidel Herrera
b) Javier Duarte
c) No tenemos…
Cualquiera de estas tres opciones pudiera ser una respuesta dependiendo del priista cuestionado, de los beneficios alcanzados a lo largo de este sexenio o de lo no logrado.
Por supuesto, usted puede poner las demás opciones que crea conveniente.
Sin embargo, si el PRI apuesta a las dos primeras opciones para arrasar en las próximas elecciones, habría que tomar en cuenta que Tío Fide no será candidato y si es elegido candidato Javier, sólo lo sería para Gobernador.
Es decir, tanto el priista como el ciudadano ya hace voto diferenciado. Y es por eso que la designación de candidatos tanto a Gobernador, diputados y presidentes municipales tiene que hacerse con pinzas, con tiento, sensibilidad para no herir susceptibilidades que orillen a ese voto, al menos en el priismo.
Pongamos algunos ejemplos de cositas que pudieran lastimar al priista…
En San Andrés Tuxtla, se comenta con insistencia que Marina Garay quiere llevar a la alcaldía a Rafael Fararoni, actual presidente del PRI municipal de esa zona.
¿Qué tendría de extraordinario eso?
Quizás nada de no ser porque hace más de dos años Rafael Fararoni compitió por las siglas de Convergencia para diputado local perdiendo ante Manuel Rosendo Pelayo por más de 14 mil votos de diferencia… quedaron 11 mil contra 25 mil.
¿Y la militancia, lealtad, trabajo y fidelidad de Rosendo dónde quedaría porque el corazón del famoso “Chendo” late con fuerza por la alcaldía?
El caso de Marina no es el único. Hay muchos alcaldes que quieren imponer a su gente en miras de extender su poder.
Entonces… ¿se trata de eso? De alargar de cierto modo el control sobre el PRI, sobre organizaciones y sobre el poder económico y político… pregunto…
Tenemos el caso de Martínez de la Torre, donde Rubén Reséndiz ya no dio para más… pero está Eduardo Sánchez Macías, hombre que sin ser “grillo” pero sí político, ha aglutinado de miles en miles a seguidores, bueno, tan es así, que el pasado domingo tuvo más poder de convocatoria que el mismo Héctor Yunes Landa… es decir: Alguien que quiere ser alcalde jaló más gente que alguien que quiere ser gobernador ¡Ojo! Un alma piadosa que se acerque al equipo de logística de HYL para decirle que cuando haya sillas vacías ¡las retiren!
¿O será capaz el PRI de meter al dinosaurio de siempre?
Hay encuestas que hablan de acuerdo a como quieren enseñárselas al Gobernador… vaya, trajes a la medida de su conveniencia…
¿O por qué razón en esas encuestas no aparecía Rosalinda Ramírez Pardo como posible nueva cara para competir por una curul en Alamo?
¿De verdad cree el PRI que en Alamo son felices viendo en cada elección a los Faisal, a los Montalvo o a los Batalla?
Se insiste, al PRI de Jorge Carvallo le hará falta mucha sensibilidad para elegir a los candidatos adecuados tanto para diputado como para alcalde…
Y es que para mucha gente, Alberto Silva, mencionado a buscar la presidencia municipal de Tuxpan ¡podría ser un excelente diputado local! ¡Tiene madera! Pero lo ubican en la búsqueda de la alcaldía… como que no cuadra allí…
Y ejemplos de facturas, caprichos como Carlos Aceves (ilustre desconocido para Xalapa) o imposiciones sobran…
Ojalá que al líder del PRI, cuando esté hablando de la unidad partidista una vez que se den a conocer los nombres de todos los candidatos, no lo interrumpa el rebuznido de un burro (aunque suene redundante precisarlo) ¡vaya a pensar que es eco!

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