Crónica de una boda

Salvador Muñoz
Los Políticos

Y ahí estaban…
Marlon Ramírez, Américo, David Velasco, Manzur y muchos políticos más.
Reían, platicaban, festejaban, abandonaron el saco, algunos se levantaron y demostraron por qué son felices: ¡Les gusta bailar!
Acá no los convocó el PRI, tampoco el gober, menos Javier Duarte… se reunían por un punto común que los enlazaba a todos cuando dirigían sus miradas al centro del salón: ¡Un amigo!
Un amigo que pasaba a engrosar las filas de los llamados “Señor”, “casado”, “amarrado”… así es: Jorge Armando García Vera, nuestro amigo, festejaba su matrimonio con la bella Alexa Chavarría Panduro.
Difícilmente me hacen ir a fiestas, pero la ocasión lo ameritaba:
Jorge, hijo de Cecilio García Cruz, lo conocí chavito y es raro: conforme pasan los años sigo viendo a los jóvenes, jóvenes y a los viejos, más viejos.
Lo he visto reír, enojarse, llorar; un muchacho de buenos sentimientos, noble… y el sábado que lo vi entrar al salón al lado de su ahora esposa, lo vi feliz.
Creo que todos pasamos por eso… nos vemos felices el día de nuestra boda. Cheque la foto de cuando se casó y la última que se tomó con su esposa. Brenda me dice viendo la que nos tomaron esa noche del sábado: “¿Tenías sueño?”
Realmente sí… lo confieso: ¡Estoy domesticado! ¡Ya no farras! ¡Ya no “noches de teibol”! ¡Adiós a la bohemia!
Si cuando me invitan a salir ¡mis orejas se paran! pero de inmediato, en un síntoma pavloviano, ¡algo me hace ir inmediatamente a mi casa!
Y la mujer me dice: “¿Por qué no sales con tus amigos?” Y no sé si lo hace de manera sincera o haya un dejo de burla en su pregunta.
Bueno, es el precio de casarse.
Eso sí, nunca se lo dije a Jorge… creo que no sería de amigos advertirle lo que implica casarse:
• Levantarse todos los días teniendo al lado a la misma mujer.
• Escuchar las pláticas sobre sus amigas.
• Que te cuenten los males y achaques de la suegra.
• Los interrogatorios eternos: ¿Quién es? ¿por qué te saluda? ¿dónde la conociste?
• Preguntas que no entiendes: ¿Ya no me quieres?
• Definiciones increíbles: No es rosa, es fiucha, o rosa mexicano, o rosita, rosita tenue…
Advertirle a Jorge de eso no sería de amigos y hubiera sido egoísta de mi parte liberarlo del delicioso placer de estar casado.
Por eso, me dio gusto ver a Américo y Mariana Yorio, ella fresca como mañana aun cuando hacía un calor arriba de los 32 grados.
También estaba David Velasco Chedraui con su guapa Mariana Munguía, luciendo el pedazo de noche que tiene como cabellera y degustando dulces con chilito cual chamaca.
Alejandro Montano y María Eugenia Bermúdez, así como Jorge Reyes Peralta y su esposa, disfrutaron la noche bailando al ritmo de la cumbia, ¡tanto que ambos caballeros salieron bailando del salón cuando se despidieron!
Alfredo Ferrari, José Luis Salas Torres, Carlos Rodríguez Velasco, Agustín Herrera Beltrán y sus señoras estuvieron presentes.
Por cierto, entre estas parejas, destacaron dos cosas:
¡De repente! Agustín Herrera se paró con la servilleta en la boca… ¿se le cayó un diente? ¿se rompió la boca? ¿le pegaron?
Marlon escuchó la explicación que le daba el hermano del Gobernador mientras que los demás especulaban… al final, creo, no me consta, todo terminó en tremenda mordida de “chipo” que se dio el mismo Agustín.
La otra, fue cuando una dama al sentarse, rodó por el suelo. Los caballeros, prestos, la ayudaron a levantarse para que tomara asiento de nuevo y cuando así lo hacía ¡volvió a caer! ¡La silla tenía un desperfecto! Afortunadamente la dama, salvo el orgullo, no resultó lastimada.
Por otro lado, ya sabe, no puede uno desprenderse del viboreo a las mujeres, propio de estas reuniones sociales que invitan a interrogantes como:
¿Ya viste cómo viene vestida?, ¿Quién la peinó?, ¿Qué? ¿Se maquilló a oscuras?, ¿Fue con Cepillín para que le pusiera sombras?, ¿Con esos zapatos vino?
Por supuesto, eso sólo obedece a cortes femeninos, por el lado masculino creo que somos más finos, por eso dirigiremos nuestras baterías a cuatro mujeres que destacaron, a juicio de quien escribe y asesorado por Brenda:
La novia, Alexa Chavarría Panduro, en un vestido confeccionado seguro en Disney: ¡Parecía Princesa de Cuento de Hadas!
La segunda mujer era Karime Macías de Duarte (vimos su foto con Kike Muñoz, el de Sociales del Diario de Xalapa), no tanto por el vestido que igual lo lucía con garbo, sino por el nuevo look… el peinado que traía le da un nuevo matiz a su cara, juega con sus ojos y su sonrisa, al extremo de que en la ceremonia religiosa, Karime resplandecía sin necesidad de joyas.
Por cierto, excelente detalle de Javier Duarte de Ochoa al asistir sólo a la parroquia para acompañar a sus amigos. De haber asistido a la fiesta difícilmente podría haber estado festejando el momento: ¡Júrelo que no lo hubieran dejado en paz!
La tercera dama que, dice mi esposa, se lleva la noche entre las invitadas, fue Maruchi, la esposa de Salvador Manzur, quien en elegante vestido rojo se veía soberbia aunque no resaltaba tanto como ese pequeño “tatoo” en la parte anterior del hombro derecho.
Aunque para mí, la que más sobresalía era Brenda, bella como siempre…
Por ahí estaban también Rodolfo Casanova, Arturo y Antonio (los cachorros de Reyes Isidoro), Ricardo Ahued (no pude ver si llegó con su esposa) y los Alemán…
¿Eh? Por supuesto… no los Alemán-Magnani, sino los hermanos Iván y Omar Alemán Chang.
Éste último se dirigió a los novios con emotivas palabras sobre el matrimonio, tan fuertes y sensibles que me obligaron a pedirle a Brenda que fuera mi esposa de nuevo, por la emoción que sentía… ¡vaya! No en balde, Omar es el de Relaciones Públicas de Javier Duarte de Ochoa.
Creo que la misma sensación debió haber sufrido Marlon Ramírez Marín quien acompañado de su prometida, Sonia Cerdán Ruelas, recordaron que en octubre, habrán de seguir los mismos pasos que Alexa y Jorge…
Sólo espero que Marlon no haga caso a los puntos que puse sobre el matrimonio pero aunque los leyera, sabemos que Marlon ¡no se sabe rajar!

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