martes, 4 de mayo de 2010

Daniela: ¡Ciencia y fe!

Salvador Muñoz
Los Políticos

Circula por la Internet una serie de fotos de la diputada federal Daniela Nadal Riquelme…
Lo más seguro es que la ubique si recuerda que es la suplente que entra en lugar de Javier Duarte de Ochoa, cuando pide licencia para ir en pos de la candidatura del PRI por la Gubernatura.
Es una joven bella, de singular sonrisa y que por un accidente automovilístico, sufrió “una lesión medular la cual impide que mueva mis piernas” como ella alguna vez lo dijo en entrevista.
Como uno no es médico, tiene que recurrir al oráculo moderno para buscar respuestas que no tiene, así que acudimos a la Internet (Trastornos de la Médula) y encontramos esto:
“Cuando la médula espinal resulta afectada por un accidente, la pérdida de la función neurológica puede ser parcial o total y producirse en cualquier parte del organismo en el nivel por debajo de la lesión. Por ejemplo, un trauma medular grave en medio de la espalda puede paralizar las piernas, pero se preservará el funcionamiento normal de los brazos. Además, puede experimentarse dolor en el nivel de la lesión o por encima de ésta, especialmente cuando se han afectado las vértebras.
“Pueden permanecer intactos algunos movimientos reflejos que no estén controlados por el cerebro o incluso puede producirse un aumento de los reflejos por debajo del nivel de la lesión. Por ejemplo, se mantiene, e incluso puede exagerarse, el reflejo rotuliano (la parte inferior de la pierna se flexiona cuando el tendón situado debajo de la rótula se golpea suavemente con un martillo de goma). La exageración de los reflejos produce espasmos en las piernas. Los reflejos que se preservan son los responsables de que se desarrolle una rigidez muscular que conduce a un tipo de parálisis espástica. Los músculos espásticos se notan rígidos y duros, con sensación de pinchazos esporádicos y sacudidas espasmódicas en las piernas.
“La recuperación del movimiento o de la sensibilidad durante la semana siguiente al traumatismo suele anunciar una recuperación favorable, pero cualquier disfunción que persista después de 6 meses es probable que sea permanente. Una vez que se han destruido los nervios espinales, la disfunción será permanente”.
Sí… lamentablemente para Daniela, su accidente ocurrió en el 2005… han pasado cinco años de ello por lo que, si nos atenemos a lo que dice el anterior texto, pareciera que la silla de ruedas la habrá de acompañar por el resto de su vida…
Siempre es bueno una segunda opinión. Así que llamé a un traumatólogo, fuera del estado, para que no hubiera predisposición alguna en su comentario y le pasamos tanto el comentario de la joven Nadal que dice tener “una lesión medular la cual impide que mueva mis piernas” así como una foto donde aparece en una fiesta acompañada de Javier Duarte de Ochoa y Paco Portilla Bonilla… ¡con la pierna cruzada!
La respuesta del traumatólogo, de quien me reservo su nombre, es así:
“Si tuviera una lesión medular no controlaría esfínteres… debería estar acostada y tendría déficit motor, o sea, no podría mover las piernas o sensitivo”…
–¿Entonces?
–Lo único que puede tener es una lesión vertebral…
–¿Eso qué es?
–Una lesión del hueso… lo cual no es grave…
–¿Esa lesión le permitiría andar en silla de ruedas y cruzar la pierna?
–Sí ¡y hasta caminar!
Por supuesto, la perspectiva del traumatólogo es con base en el mismo decir de Daniela Nadal (“una lesión medular la cual impide que mueva mis piernas”) y una foto donde se le ve cruzando la pierna. Quizás los doctores de la diputada federal tengan una mejor opinión porque la tienen en vivo, de carne y hueso, aunque creo que todos los veracruzanos estaremos de acuerdo en hacer a un lado a la ciencia fría, precisa, exacta y nos arropamos mejor en la fe para poder decir que estamos frente a un milagro del Señor y Daniela se está recuperando… ¡amén!

e-mail: dor00@hotmail.com

No hay comentarios: