Guadalajara no está lista

Fernando Hernández Fernández
El Marcaje

Tres días en la Perla de Occidente han sido más que suficientes para constatar que a Guadalajara le falta un poco más que demasiado para estar lista de cara a los Juegos Panamericanos del próximo año.
Más allá de las pugnas que hay por los terrenos para la construcción de la villa de atletas y el estadio de atletismo, la logística y atención “coordinada” por el Copag han dejado mucho que desear.
Y aunque el titular de la Conade, Bernardo de la Garza, dijo que son detallitos y que regularmente sucede, es palpable que las errores son más grandes; no nada más radica en si el escenario del tae kwon do era demasiado pequeño para albergar la Olimpiada Nacional, o si la alberca en Vallarta no anduvo bien un día, hay más cosas, como la atención, el trato, instalaciones que deben estar al mil por ciento para el 2011.
Asimismo, causó sorpresa ver policías armados en algunos escenarios, aunado al mal genio de algunos trabajadores o el poco servilismo que expresar colaboradores en hoteles o en los recintos deportivos; hacen las cosas como si hicieran un favor y hasta de mala gana, a muchos se les nota a leguas que no les interesa en lo más mínimo, que están inconformes, con ser sede de algo.
La transportación interna también ha sido deficiente y la colocación de algunos atletas en hoteles feos, con justo lo mínimo de la calidad esperada; como es el caso de los beisbolistas, que fueron enviados a Lagos de Moreno para disputar su torneo, a unas habitaciones que su más alta tecnología es que tiene ventilador, pero lo realmente lamentable es que a los peloteros de la categoría Junior fueron hospedados en León, Guanajuato, a mínimo 40 minutos de donde jugarán, es decir que si tienen partido a las 9:00 horas, tendrían que levantarse alrededor de las 5:30 horas para llegar a tiempo.
Días atrás el director del Instituto Veracruzano del Deporte, Roberto Bueno Campos, criticó a la sede jalisciense, con lugares sucios para pernoctar y alimentación que hasta provocó enfermos del estómago, por lo que se resolvió buscar otro sitio y correr con los gastos lo más que se pudiera por el bienestar de los atletas durante el mes y medio que dura el evento.
Los pronósticos no son alentadores, más allá de los pleitos entre el gobierno estatal panista y la alcaldía priísta. El examen llamado Olimpiada Nacional, hasta el momento, si alcanza calificación de seis podría considerarse hasta demasiado.
Lástima, se pensaba que Jalisco, luego de los logros que ha hecho en esta competencia sería buen anfitrión y se han quedado cortísimos.
Hasta la vista.

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