lunes, 12 de julio de 2010

Wall-e & Eva, ¿hacia qué futuro?

Jorge Arturo Rodríguez
Tierra de Babel

Dicen las malas lenguas que ya somos un chingo de gente y prometemos ser un chingaderal en esta nuestra veintiúnica Tierra que descuidamos diariamente, a pesar de que sabemos que abandonándola nos desterramos, y no contentos con esto, le vamos abonando desperdicio con nuestros desmanes.
En fin, como apuntan Paul y Anne Ehrlich, cada hora nacen más de 11,000 personas y cada año la población se incrementa en alrededor de 100 millones. Es decir, “dentro de 100 años la Tierra habrá superado probablemente los 10,000 millones de habitantes y tal vez los recursos para alimentarlos puedan cubrir sus necesidades mínimas, sin embargo ¿cuál será el costo para el ambiente?” Apocalíptico, ¿no?
Paul y Anne Ehrlich agregan que la explosión demográfica debe ser un asunto de seguridad mundial, porque la disponibilidad de recursos, la producción de alimentos, la contaminación, el calentamiento global, la lluvia ácida, la destrucción de la capa de ozono, entre muchos otros hechos, nos debe poner a pensar al respecto. Pero eso es exactamente lo que menos hacemos actualmente: pensar.
“No debemos esperar a que las catástrofes generadas por el deterioro ambiental que estamos produciendo, sean las que 'tomen la decisión' de frenar la explosión demográfica; tenemos conciencia y formas inteligentes para conocer el peligro y buscar alternativas que contribuyan a que todos los seres que ocupamos la Tierra tengamos una buena calidad de vida”, aseveran los autores del libro “La explosión demográfica, el principal problema ecológico”.
Si a estas alturas en el mundo somos más de 6,000 millones de habitantes y ya no sabemos ni pa’ donde jalar, imagínense ustedes lo que viene a la vuelta de la esquina. Ni qué decir de México, que a según el II Conteo de Población y Vivienda 2005, realizado por el INEGI, (esperemos los resultados del Censo de Población que se está realizando), somos 103 263 388 habitantes. Estamos entre los once países más poblados del mundo, después de China, India, Estados Unidos, Indonesia, Brasil, Pakistán, Rusia, Bangladesh, Nigeria y Japón. ¡En la mauser!
A propósito del Día Mundial de la Población que se celebra cada año el 11 de julio, leí en el portal de ecoticias.com que el rápido crecimiento actual de la población ha generado alarma, porque el aumento viene acompañado de inconvenientes relacionados con los recursos disponibles, como son el agua, las tierras de cultivo, los alimentos, la atención sanitaria o la educación.
“El problema se agudiza por el injusto reparto de esos recursos, con los países ricos esquilmando a los más pobres y lejanos. A esto se suma la carrera consumista, la contaminación que no tiene fronteras y la industrialización de entornos donde sus habitantes no participan de los beneficios. El reto es conseguir que cada uno de ellos viva en condiciones dignas y en libertad, que se respeten sus derechos humanos y participen de un desarrollo sostenible”. Chin, ya nos llevaron los pingos…
Con todo, tengamos en cuenta que la vida exige a todo individuo una contribución y depende del individuo descubrir en qué consiste, escribió Viktor Frankl. Así que, a contribuir pa’ no continuar devastando a nuestra Tierra, ¿o no, Wall-e?, ¿o no, Eva?

Los días y los temas

En este embrollo de los resultados electorales, que si gané, que si perdiste, que toma, que madre y media, espero, la verdad, que pronto Veracruz se tranquilice, al menos en el ámbito político, y nos pongamos a trabajar de veras. Y espero, sobre todo, que no hayamos dado con nuestro voto dinero y poder al gobierno y nos arrepintamos mañana, porque sería como si le hubiéramos dado whisky y las llaves del coche a un adolescente, parafraseando al periodista P.J. O’Rourke.

De cinismo y anexas

Escribió Eduardo Galeano: “Ojalá seamos capaces de hablar poco y hacer mucho. Graves daños nos ha hecho, y nos sigue haciendo, la inflación palabraria, que en América Latina es más nociva que la inflación monetaria. También, y sobre todo, estamos hartos de la hipocresía de los países ricos, que nos están dejando sin planeta mientras pronuncian pomposos discursos para disimular el secuestro”. ¿Algún problema?

Hasta la próxima
jarl63@yahoo.com.mx

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