martes, 4 de enero de 2011

La voracidad de los ex alcaldes

* Coordinación con la Federación
* Elizabeth, “La Dama de hierro”


José Ortiz Medina
En Corto... sin Cortes

“Nos saquearon, pero no nos volverán a saquear”, dijo alguna vez José López Portillo a propósito de la fuga de divisas que colocaron al país en la quiebra.
Algo similar podrían decir varios alcaldes a los que sus antecesores no les dejaron ni las ligas. Aunado a las múltiples irregularidades financieras, los ex ediles dejaron los palacios municipales casi vacíos.
Ejemplos de saqueos sobran. El caso más paradigmático es el de Boca del Río, en donde los emisarios del pasado reciente se llevaron hasta los radios del área de Protección Civil y en la Tesorería no dejaron huella alguna al sustraer los discos duros de los equipos de cómputo.
Asimismo, en el municipio de Mariano Escobedo, no aparecen una motoconformadora, una retro excavadora y un camión de volteo.
Una historia similar ocurre en Catemaco, cuyo presidente municipal Elliuth Cervantes Ramírez se queja de que no han podido iniciar sus labores porque no hay papelería ni el equipo necesario para atender a la ciudadanía en sus trámites en Catastro, Tesorería, el Registro Civil, Hacienda Municipal y la Secretaría del ayuntamiento.
En Rodríguez Clara de seis máquinas pesadas que había para arreglar los caminos, únicamente dejaron dos, pero éstas lucen inservibles. Las computadoras han sido saqueadas y la mayor parte están en calidad de desecho.
En otros municipios las patrullas no sirven, los camiones recolectores de basura son precisamente eso, basura. En otras partes no hay ni siquiera sillas en donde sentarse.
En fin, a muchos presidentes municipales el gozo se les fue al pozo pues se dieron cuenta que les tocó administrar sólo ruinas.
Aparejado a las deudas financieras, las irregularidades en el manejo de los dineros y al cúmulo de problemas sociales, los ediles entrantes se toparon con una realidad muy distinta a la que anhelaron en sus mejores sueños guajiros. Sólo les heredaron el cascarón.

EL TEMA DE la seguridad es fundamental en la administración del mandatario Javier Duarte de Ochoa. Por ese motivo, desde antes de asumir formalmente la gubernatura de Veracruz, ya había sostenido encuentros con quienes están obligados a brindar seguridad a los mexicanos, Felipe Calderón Hinojosa y José Francisco Blake Mora. A los pocos días de ser ungido Gobernador Constitucional, se reunió nuevamente con el Secretario de Gobernación, con sus homólogos de las otras entidades federativas y con titulares de las secretarías de seguridad pública estatales, en el Consejo Nacional de Seguridad Pública, que fue presidido por el Presidente de la República. Desde entonces a la fecha, ha estado en comunicación constante con los titulares de esas dependencias. Prueba de ello es el desayuno que tuvo con el Comandante de la 3a. Zona Naval Militar con sede en Veracruz, Vicealmirante C.G. DEM. Guillermo Colina Torres, en el Edificio Faro “Venustiano Carranza” de la esa Zona Naval, ubicado en Insurgentes Veracruzanos, entre Xicoténcatl y Hernández y Hernández del Puerto de Veracruz. Hace unos días, Duarte de Ochoa se reunió con militares de la Secretaría de la Defensa Nacional y ahora lo hace con los Marinos. Indiscutiblemente que existe coordinación entre la Federación y el Estado. Y es notorio. Tan sólo en los actos donde es necesaria su presencia, los navales o soldados acuden sin dudarlo. Lo mejor de todo es que quienes nos beneficiamos de esta relación somos los veracruzanos, que tenemos más seguridad; que tenemos la certeza de que nuestros pasos estarán cuidados.

EN EL MUNICIPIO de Coatzintla, al norte de la entidad veracruzana, estalló en estos días tremendo escándalo por un presunto megafraude en la construcción del fraccionamiento Geovillas, de Casas Geo. Acusan a la ex presidenta municipal, Nayeli del Valle Toca de haber autorizado indebidamente la edificación de dicho complejo habitacional en una zona de alto riesgo por tratarse de una hondonada. Además de la pésima calidad de las casas, los moradores enfrentarán el peligro de inundaciones y deslaves. Ya hay denuncias ante la Procuraduría Federal del Consumidor y otras instancias. En las querellas salen a relucir los irregulares permisos de cambios de suelo. Habrá que investigar cuántos ex alcaldes heredaron un problema similar en otras partes del estado de Veracruz.

TRAS LA RENDICIÓN de protesta de los nuevos funcionarios municipales, la alcaldesa de Xalapa, Elizabeth Morales García fue enfática: “Quiero pedirles que la causa que nos una sea el servicio a los demás; la vida nos da la gran oportunidad de tener tres años para dar nuestro mejor esfuerzo, empeño y conocimiento para que Xalapa sea una ciudad mejor; les pido que trabajemos mañana, tarde y noche, que no tengan un horario de trabajo, y si es necesario lo hagan las 24 horas del día”. Asimismo, la munícipe afirmó que la prioridad de su administración serán los ciudadanos: “utilicen su conocimiento y experiencia para buscar soluciones a lo que a veces vemos difícil; ésta será una administración estricta, de mucho trabajo, responsabilidad y cercanía con la gente”. También advirtió (¿o amenazó?) que quien no cumpla las metas y objetivos o incurra en alguna irregularidad “se va, no lo pensaré dos veces, si bien requieren tiempo para que den resultados concretos, desde hoy podemos medir su actitud de servicio, responsabilidad, asistencia, vocación, honestidad; funcionario que no sirva simple y sencillamente se va”. Vaya que Elizabeth viene en plan estricto. Al rato se puede ganar el mote de la “Dama de hierro”, el mismo apodo que se ganó a pulso la legendaria ex primer ministro de Inglaterra, Margaret Thatcher.

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