El fin de semana de Javier

Salvador Muñoz
Los Políticos

Rutinario como soy, todos los días recorro un pasillo para ir la parque y me intrigaba sobremanera las cajetillas de cigarros Marlboro aplastadas en el estacionamiento o jardinera que encuentro de manera consuetudinaria en ese tramo de mis caminatas.
Una mañana, cerca de las siete horas, estaba a punto de entrar a ese pasillo cuando vi el objeto volando que salía de la ventana del segundo piso. Sí, era otra cajetilla de cigarro, aplastada, que resolvía de una vez por todas mis dudas al respecto.
La vecina, una maestra, es la que siempre arroja las cajetillas vacías por la ventana haciendo del estacionamiento o jardinera, dependiendo de la suerte donde caiga la cajetilla, un basurero.
* Por lo regular, cada viernes, la vecina de mi suegra se reúne con otros maestros en su casa. Música, alcohol y escándalo a altas horas de la madrugada ya sin contar que se apropian del estacionamiento.
Su marido, un “ingeniero”, se robaba el agua. Su patio es una peste porque su perro, el buen Tenoch, hace sus necesidades allí y nadie de esa familia recoge las heces del animal. A veces, cuando pisan la mierda, optan por dejar los zapatos afuera y entran descalzos a la casa para no ensuciarla. No cito que se roban el “cable” ni la “luz” para soldar.
* Tenía otros vecinos que cada semana bajaban grandes bolsas de basura que escurrían por las escaleras del condominio dejando grandes pestes. Aun cuando negaran que ellos eran los cochinos, la marca de su arrastre los delataba. Afortunadamente se fueron. Y con ellos la peste.
Sí... son vecinos indeseables.
II
Si a mi puerta llegara Mario Marín, el ex gobernador de Puebla, sencillamente no lo recibiría.
No sé usted, pero a mí, en lo particular, igual me desagrada la presencia de Carlos Salinas de Gortari en Veracruz aun cuando acá, tanto fidelistas como la actual administración, lo consideren un héroe.
Incluso, se me hace desagradable Osiel Castro de la Rosa, actual funcionario estatal, después de que fuera balconeado en varias fotos donde supuestamente sale desnudo con algunas damas y caballeros.
Y me ha de disculpar el funcionario, pero después del escándalo que protagonizara contra Arturo Reyes Isidoro, igual se me hace antipático Toño Flores, a quien a pesar de su patanería, fue recompensado.
Si fuera diplomático, tanto a esos vecinos como a estos políticos, bien pudiera tacharlos de “personas non gratas”.
Dije: “Si fuera diplomático”.
III
De acuerdo a la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, en su artículo 9, un Estado puede, “en cualquier momento, y sin tener que explicar su decisión”, declarar a cualquier persona de un cuerpo diplomático persona non grata.
El asunto viene a colación por la presencia en Veracruz, de Javier Lozano, titular del Trabajo a nivel federal, el pasado fin de semana.
¿Por qué molestó tanto su estancia por tierras jarochas? No lo sé.
La libertad de tránsito lo ampara. Puede venir las veces que quiera a Veracruz. Ahora que si viene en calidad de ciudadano, sólo hay que exigir a las autoridades federales (no estatales), que no haya usado recursos que salen de nuestros impuestos porque es seguro entonces que igual nos ofendería tanto o más como pensar que Enrique Jackson fue inquilino del Crown Plaza y el gobierno estatal pagó su estancia con nuestros dineros.
¿Non grato?
No...
Insisto: Es más desagradable, desde mi punto de vista particular, que se le hubiera pagado de nuestros impuestos, alojamiento, la comida, desayunos y cenas a Enrique Jackson en el Crowne Plaza y más “Non Grato” Carlos Salinas de Gortari, alabado y venerado por el anterior gobierno y por más de un priista en la actual administración, que el fin de semana de Javier Lozano en Veracruz, haya venido a lo que haya venido.

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