Andanzas de una Nutria
“Veracruz, rinconcito donde hacen su nido las olas del mar; Veracruz, rinconcito de patria que sabe sufrir y cantar”.
Agustín Lara
Un cúmulo de sabores, colores y aromas se asoman a mi mente.
Café, cítricos, diversidad de flora y fauna, paisajes naturales, climas distintos que van desde las temperaturas bajo cero, las zonas húmedas, hasta las regiones más cálidas y cercanas al mar.
Todo ello es enmarcado por el arte, la música, el folklore, la cultura, gastronomía, aventura y alegría de la gente que habita y da vida a nuestro maravilloso Veracruz.
Nuestra entidad tiene la magia de desplazarnos por los aires con sus tradicionales voladores en Papantla, con las aves migratorias que pintan sus cielos durante la primavera, a bordo de un parapente o a través de la tirolesa desde las alturas de Orizaba.
Tiene el don de llenar nuestro paladar con sus deliciosos platillos que bien pueden ser con mariscos, como un arroz a la tumbada, huatape de la zona norte, tegogolos en Catemaco, o pescado a la veracruzana; pambazos o chiles xalapeños, mole de xico, pan de naolinco o dulces típicos de la región, variedad de tamales dependendo de la región del estado; las tradicionales gorditas rellenas de frijol, picaditas con queso o las garnachas de Rinconada.
También puede alegrarnos con sus licores de hierbas y frutas, como la morita o el verde de Xico, los toritos de cacahuate, guanábana y cajeta por mencionar sólo algunos y, para los niños, un delicioso licuado de vainilla bien frío. También puede impregnar el paladar de un fuerte sabor a tabaco, con los puros de la región de Los Tuxtlas.
El estado del Flaco de Oro tiene la capacidad de hacernos vibrar con su música, con sus danzones, el son jarocho, de colorear las mejillas de una dama al recitarle una décima, o de hacer sonar la tarima con un zapateado sin igual.
En la región capital se puede empapar de historia al recorrer el Museo de Antropología, uno de los más ricos en piezas antropológicas y en investigación del país; o bien, tiene la oportunidad de sentir la adrenalina al realizar deportes extremos en Jalcomulco, donde se puede practicar el rappel, rafting o descenso de río, navegar en kayak, descender por una cuerda en una tirolesa, hacer senderismo y, al término, degustar los más frescos mariscos en cualquiera de sus restaurantes.
Si desea vacacionar en un destino de playa, déjese atrapar por las de Costa Esmeralda, que le abrazarán con sus olas para que se divierta, coloree su piel de dorado y disfrute la alegría con su familia.
Por otra parte, si lo que tiene planeado para esta temporada es algo menos caluroso, puede realizar senderismo a lo largo de Veracruz, que dicho sea de paso, es el estado más largo del país y el único que tiene los ocho ecosistemas que posee México.
En la zona del bosque de niebla puede acampar o simplemente caminar para observar los helechos gigantes y los pequeños, las orquídeas, y la inumerable variedad de plantas que tiñen de verde al Estado.
Si viaja con niños puede ir a Veracruz para recorrer el acuario, que es uno de los más grandes de Latinoamérica, cuenta con la pecera oceánica en la que podrá nadar con tiburones, observar las langostas, medusas, tucanes, tortugas y los manatíes que fueron rescatados de la laguna de Alvarado y que aquí es el único lugar en donde se han logrado reproducir en cautiverio.
Tras visitarlo, puede recorrer la casita blanca de Agustín Lara, el Baluarte de Santiago, cuyo interior guarda la exposición de Las Joyas del Pescador, Los Portales para echarse un danzón, acompañado de unas chelas bien frías con la botana de queso que ofrecen los vendedores de mesa en mesa.
Estos y muchos otros atractivos ofrece nuestro estado.
nutriamarina@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario