miércoles, 3 de abril de 2013

Caca grande

Salvador Muñoz
Los Políticos

Una enorme plasta olía Harry. ¡No! le dije, y siguió su camino. Entonces, un joven me gritó: “Hey, ¡levante la caca de su perro!”
–No es de mi perro...
–¡Cómo no! ¡Si lo acabo de ver!
–Es más fácil que por su tamaño sea tu caca y no la de mi perro...– y nos retiramos el Harry y yo de ese pen...sante...
Sí, al parecer, todo indica que dicho chavo magnificó la “calabaza” de mi perro.
II
Al escribir un pie de foto, confundo a José Luis Santiago López con Juan Herrera Marín, en ese entonces, secretario de Seguridad Pública. Al interior del periódico, no pasó de una llamada de atención por parte del director, Yayo Gutiérrez.
Hace como quince años, al fallecimiento de don Juan Malpica Mimendi, el titular de esa nota, si no mal recuerdo, decía: “Fallece Malpica Vivendi”. Y nuevamente Yayo me llamó la atención aunque, con un dejo de sorna, decía, “si bien hizo del periodismo un modus vivendi, ése no era su apellido”. Por cierto, si usted busca en la internet “Malpica Vivendi” ¡lo va a encontrar!
Claro que la regadota más grande que hubo en aquellos tiempos fue la de un corrector a mi cargo que se le fue “La V de la Violencia” por “La V de la Victoria”, cuando los exodistas de Tabasco hicieron su plantón en la Plaza Lerdo... el error lo tuve que asumir y tratar de enmendar el yerro ante esa gente diciéndoles que había sido una triste equivocación.
Un error que no permitía tan fácilmente Yayo era las fechas o folios de las páginas... y era recurrente una frase ante el yerro: “Van a pensar que todos somos unos pendejos”...
Apenas este miércoles, releyendo uno de mis comentarios, al referirme al diputado y amigo Uriel Flores, vi que le puse “Uriel Rosas”...
Viene a colación esta serie de comentarios de mis “calabaceadas” en los medios de información pues jamás se magnificaron tanto como las “calabaceadas” de Enrique Peña Nieto.
III
¿Alguien recuerda a Enrique Peña Nieto durante el debate televisivo? varios amigos y yo, cuando fue tal evento, esperábamos ansiosos ver cuántas veces la “calabaceaba” y resulta que no... es más, hasta lo vi bien... vaya, ¡nos decepcionó! ¿Qué fue lo que ocurrió? Algunos dicen que traía apuntador y lo más seguro, es que sencillamente no se salió del libreto.
Si hiciera un “top” de sus yerros, me quedo con el de los libros, por ser el más original. Aunque el IFAI y su definición es increíble.
Está claro que Enrique Peña Nieto está en una posición en donde todo lo que haga y diga ha de pasar por el censor ciudadano, a diferencia de usted, yo o cualquier otro mortal que se puede equivocar, cometer una pendejada pero como se es ajeno de las pléyades de la política o la farándula (remember Ninel Conde) ¡no pasa nada!
El ejemplo reciente: Al saludar a Carolina Gudiño y referirse a ella como la presidenta municipal de la capital de Veracruz... aunque de inmediato corrigió para citar a Xalapa.
La ola de críticas se le vinieron encima, más cuando el evento en donde se encontraba trataba sobre educación de calidad... dicen que debió ser mejor de geografía.
Por ello, creo que todos estamos de acuerdo, Enrique Peña Nieto debe cuidar su imagen y sobre todo, la percepción que la gente pueda tener por una sencilla razón: cualquier error, yerro o “calabaceada” que tenga se magnificará porque en términos políticos no deja de ser un “Caca grande”.

No hay comentarios: