Elecciones

Esperanza Arias Rodríguez
El Espacio de Atenea

Concluyó la jornada electoral 2013 y los resultados, en el distrito electoral XXVI con cabecera en Acayucan, no son nada alentadores para el PRI, más bien constituyen un duro revés para quienes desde la cúpula del partido le apostaron a la imposición, en algunos municipios, de candidatos que se confrontaron con los otros grupos políticos internos o minimizaron la fuerza de penetración de los candidatos de partidos de oposición.
El distrito electoral XXVI tiene ocho municipios: Acayucan, Oluta, Soconusco, Sayula de Alemán, Hueyapan de Ocampo, San Juan Evangelista, Texistepec y Jesús Carranza, y fuera de éste último, lo cierto es que en los otros siete, los conocedores de la política habían pronosticado varias posibles derrotas o por lo menos una reñida votación entre los abanderados del PRI y sus oponentes.
En Hueyapan de Ocampo, se le pintaba no muy favorable el panorama al candidato del PRI, Antonio Gómez y se le daban amplias posibilidades al de Movimiento Ciudadano,Lorenzo Velázquez, quien de hecho es un priista que no tuvo la oportunidad en su partido, y optó por la oposición, y finalmente ganó.
Por lo que hace a Oluta, Soconusco y Sayula de Alemán, se anticipaba una competencia electoral fuerte, dura, reñida, en el caso de Oluta, entre los candidatos del PRI, Pastor Cruz González y del PAN, Jesús Garduza Salcedo, quedando en manos de éste la alcaldía. Sayula de Alemán, dicen los enterados, que la perdió el perredista Fredy Ayala González, por confiado, por hacer mítines con gente acarreada de otros municipio, ante el panista Graciel Vázquez Castillo, y en los hechos se anticipaba que la victoria estaría entre los dos, al darse un tercer lugar, al candidato del PRI- el pevemista Héctor Velazquez Vázquez, si bien aquí no todo estaría dicho y podría impugnarse la elección ya que la diferencia de votos sería mínima además de ventilarse el presunto robo de casillas, así que el dirigente el Verde Ecologista todavía tendría una lucecita de esperanza.
Por lo que hace a Texistepec, se pronosticaba, doble contra sencillo que la presidencia municipal sería para el ex priista, arropado en el perredismo, Rubén Reyes Rodríguez, pero sorpresivamente, el candidato Enrique Paul, alfil de la alcaldesa Myrna Anzalmetti se erigió con el triunfo, postulado por el PRI.
En Jesús Carranza, nunca se dudó de que el ex diputado local y cacique del pueblo, Gilberto Guillén serrano, sería alcalde por segunda ocasión, asegurándole el triunfo al PRI. La realidad es que fue el único municipio donde nadie dudó que sería priista los próximos cuatro años.
San Juan Evangelista fue una municipalidad en las ubicaba en tercer lugar al candidato del PRI, Abel Vázquez González, en segundo a la panista Xóchitl Tres Rodríguez y en primero a Juan Carlos Vázquez Bonilla; de hecho, la noche del domingo, hacia las once de la noche, representantes del Alternativa Veracruzana (AVE), partido que lo postuló daban por sentado que habían ganado cinco municipios en la zona sur, entre ellos San Juan Evangelista, pero inusitadamente, la mañana de ayer, San Juan amaneció con la noticia de que su edil a partir del 1 de Enero de 2014, será Abel Vázquez González, el medio hermano de Cirilo Vázquez Lagunes, el legendario cacique del sur.
Y por último, la cereza del pastel, la joya de la corona, el municipio cabecera de distrito, Acayucan, estuvo en duda por algún tiempo en cuanto a si sería gobernado por el candidato de AVE Marco Antonio Martínez Amador, o se erigiría en alcalde el ex regidor , ex Ministerio Público Federal, ex perredista y ex candidato a diputado local, Clemente Nagasaki Condado Escamilla. Casi a las dos de la mañana se despejó la duda en el Consejo Electoral Municipal del IEV: el ganador era el constructor y promotor deportivo, el candidato del pueblo, dijeron muchos: Marco Antonio Martínez Amador.
Mucho antes, sin embargo, los expertos en desmenuzar los acontecimientos sociales y políticos del municipio, anunciaron la derrota del priista Nagasaki Condado, esto porque se había formado un frente: Todos Unidos contra Nagasaki, en el cual convergieron todos los grupos políticos antagónicos , por naturaleza o por circunstancia, que cohabitan en esta municipalidad: se mezclaron los colores: PRI, PAN, PRD, y uno que otros despistados de MC , PT y Nueva Alianza, para darle el voto de castigo a quien fuera postulado por el PRI. Aquí podrían escribirse ríos de tinta enumerando y analizando los factores que obraron en contra de Nagasaki, pero mejor se sintetiza en algo escuchado la noche del domingo:” con Marco ganó el pueblo”, otros, los fríos, los analíticos y los oficiantes de políticos, prefieren decir que no ganó Marco, que se votó contra Nagasaki, claro, aquí tendría que consignarse, en justicia, que el virtual presidente de Acayucan hizo lo suyo: caminó el tramo bastante tiempo para penetrar entre el pueblo y por algo la gente lo sintió como ‘su candidato’. Los ajustes de cuentas, el cobro de facturas, la fractura al interior del PRI, la lucha intestina a muerte entre el grupo político hegemónico y el candidato que pretendía barrerlo , desaparecerlo, y no para un cambio precisamente, sino para entronizar su propio poder de grupo y familiar…esa es otra historia.
Ahora sólo falta esperar y desear que el futuro presidente de Acayucan se mantenga con los pies y la cabeza en la tierra, llene las expectativas ciudadanas y logre mantener a raya a los grupos de interés –individuales y colectivos-y políticos que se aglutinaron en torno suyo para poder gobernar y ahora sí, cambiar para bien este municipio, porque ese es el compromiso que asumió con su pueblo. Y nadie desea ser defraudado.